Cómo limpiar tu móvil (puertos incluidos) para que funcione siempre como nuevo
Por razones higiénicas y del propio funcionamiento del dispositivo, es recomendable que, habitualmente, le sometas a una limpieza completa
Aunque no seas capaz de verlo a simple vista, tu teléfono móvil está lleno de bacterias, polvo y suciedad, algo que puede afectar al buen funcionamiento del mismo y, aunque no lo creas, a tu propia salud.
Es por eso, que es recomendable que le hagas una buena limpieza. Debería ser diaria, pero que lo hagas de vez en cuando, como nos recuerda Popular Science, también es una solución válida para dejar tu dispositivo casi como nuevo. La duda surge ahora, ¿cómo hacerlo?
Los móviles modernos son cada vez más impermeables y resistentes, por lo que eso facilita, y mucho, nuestra tarea. Eso sí, evita la mayoría de los productos de limpieza convencionales y cualquier material abrasivo para no tener disgustos y convertir tu dispositivo móvil en algo inservible.
La importancia del paño
Como podrás imaginar, el primer paso que has de seguir para la limpieza es apagar completamente el móvil y quitar la funda y cualquier accesorio que tenga conectado (auriculares, cables de carga, baterías externas, etc).
Algunos expertos recomiendan mezclar un 50% de alcohol isopropílico y un 50% de agua
Apple recomienda un paño para gafas, pero cualquier paño suave y sin pelusas o de microfibra que no arañe el teléfono te será válido. Humedécelo con un poco de agua y limpia la parte delantera y trasera con movimientos circulares y constantes para levantar la suciedad acumulada.
Procura tener un trapito seco cerca para eliminar el exceso de humedad al final, sobre todo en la zona de los botones y los puertos de entrada, donde el agua podría interferir con el funcionamiento normal de tu teléfono.
Si las manchas son más resistentes, opciones recomendables son las toallitas suaves para la cara o para los bebés (asegúrate de que estén aprobadas para su uso en dispositivos eléctricos) o un poco de jabón de manos.
Algunos expertos también recomiendan mezclar una solución compuesta por un 50% de alcohol isopropílico y un 50% de agua. Rocíalo sobre el paño de limpieza para asegurarte acabar con todo resto de bacteria.
Evita productos de limpieza convencionales o materiales abrasivos que puedan afectar a tu dispositivo
Si tu teléfono tiene la categoría IP68 de resistencia al agua, puedes introducirlo en un recipiente de agua limpia durante uno o dos minutos. A continuación, quita la humedad con un paño, limpiándolo al mismo tiempo.
¿Y los puertos?
¿Y para los puertos? Aunque un palillo convencional o un bastoncillo para los oídos o unos simples soplidos te pueden sacar de un apuro puntual, quizás lo más recomendable es tirar de productos profesionales, como un espray de aire a presión o un kit de limpieza de puertos. Ambos son bastante baratos y te pueden facilitar mucho la tarea
Cuando el proceso de limpieza haya terminado, espera hasta que cualquier humedad se haya secado (una toallita de papel puede ayudar) antes de volver a encender tu teléfono y volver a colocar la carcasa y los accesorios.
Aunque no seas capaz de verlo a simple vista, tu teléfono móvil está lleno de bacterias, polvo y suciedad, algo que puede afectar al buen funcionamiento del mismo y, aunque no lo creas, a tu propia salud.