Una 'startup' española lleva a la cúpula de Vodafone ante la Justicia por presunto plagio
La 'startup' española TOT cita como testigos a directivos como Antonio Coimbra y Francisco Román. Exige 508 millones por presunto plagio, revelación de secreto industrial y competencia desleal
La cita ha tenido lugar lunes a las 10h en el Juzgado de lo Mercantil número 7 de Madrid. Parte de la cúpula de Vodafone España se ha sentado ante el juez para declarar, en calidad de testigos, en la primera vista de un juicio por presunto plagio tecnológico y lucha de patentes. Y entre dicha cúpula se encuentran Antonio Coimbra, actual CEO de la compañía en España, y Francisco Román, anterior CEO y actual presidente de Vodafone España.
¿El motivo de las declaraciones ante el juez? Como ya informó este periódico en exclusiva, la presentación, por parte de la tecnológica española Top Optimized Technologies (TOT), de una demanda multimillonaria contra Vodafone y Huawei, a las que la compañía demandante atribuye plagio e infracción de patentes (que serán juzgados en España), así como revelación de secreto industrial, competencia desleal e incumplimiento contractual (juzgados en Reino Unido). No es cosa de poco: en juego hay como 508 millones de euros que, como máximo, podrían llegar a más de 1.000 millones.
El papel de Román y Coimbra
La cúpula de Vodafone no ha acudido a los juzgados 'motu propio', sino que su presencia fue requerida por TOT. En su demanda, a la que ha accedido este diario, la 'startup' señala a Francisco Román como principal cabeza visible de la compañía en las numerosas reuniones y acuerdos de negocio establecidos entre 2005 y 2015.
Según los demandantes, "el 20 de mayo de 2005 se concertó una reunión entre Álvaro López Medrano [CEO de TOT] y Francisco Román, quien actuaba en representación de Vodafone al ser consejero delegado de Vodafone España [actualmente es el presidente]". Unas reuniones en las que, siempre según la versión de TOT, Vodafone mostró un interés en la tecnología de la 'startup' española (en la que de hecho acabó invirtiendo) y pidió que se siguiera desarrollando.
La tecnología de TOT, bautizada como 'outer lLoop power control' (a partir de ahora la llamaremos OLPC), permitía a la 'startup' española que las antenas de telefonía fueran más eficientes a la hora de suministrar potencia a los móviles que se conectan a ellas, evitando de este modo la saturación de conexiones, los colapsos en la red de dichas antenas y la realización de llamadas consumiendo menos recursos.
Román, por tanto, ha sido preguntado por el papel que jugó exactamente en los primeros contactos con TOT, en las negociaciones posteriores y en los acuerdos de negocio firmados entre ambas. Además, el actual presidente fue quien firmó la solicitud de una patente de Vodafone que TOT reclama como suya, así que también se le preguntará por ese asunto y por su posible presencia o colaboración en varias de las irregularidades que la 'startup' española atribuye a la compañía de telecomunicaciones. En su comparecencia, Román ha negado que estuviera al tanto de los acuerdos alcanzados con TOT y ha asegurado que no conocía los términos del contrato suscrito entre Vodafone y Tot en 2008, ya que ese tipo de detalles técnicos "no tiene por qué conocerlos el consejero delegado", que era el cargo que él ocupaba en aquellas fechas.
Francisco Román firmó la solicitud de una patente de Vodafone que TOT reclama como suya
Antonio Coimbra, por su parte, compareció para ser preguntado por las tecnologías de gestión eficiente de redes de telefonía de las que dispone Vodafone en la actualidad y el origen de su desarrollo, ya que, según insiste TOT, dichas tecnologías no han sido creadas por Vodafone, sino que fueron plagiadas a TOT. En su declaración commo testigo, el actual CEO ha asegurado que en ningún momento estuvo al tanto de los acuerdos o los trabajos realizados conjuntamente con TOT.
Román y Coimbra no han sido los únicos citados a declarar. También lo han hecho Yannick Le Pezennec (product manager de Vodafone y coautor de una patente que, según TOT, le ha sido plagiada), Santiago Tenorio (responsable de estrategia de red y cobertura) y David Leftley (responsable de Vodafone Ventures cuando la compañía compró el 10% de TOT), entre otros. También se citó a Pablo de Carvajal, secretario general y director de asuntos públicos, regulación y negocio responsable de Telefónica, ya que dicha empresa conoció la tecnología de TOT antes de ser ofrecida a Vodafone.
Según los demandantes, estos testigos (salvo Pablo de Carvajal) formaron parte activa de las intensas relaciones de colaboración y acuerdos de negocio entre TOT y Vodafone, con lo que han sido preguntados, entre otras cosas, por los acuerdos alcanzados, la predisposición de Vodafone y las presuntas prácticas que la 'startup' española achaca a la multinacional. Unas prácticas en las que, según TOT, Vodafone habría incurrido en plagio e infracción de patentes (que serán juzgados en España), así como revelación de secreto industrial, competencia desleal e incumplimiento contractual (juzgados en Reino Unido).
De manera paralela, este diario ha recopilado la versión de Vodafone al respecto de la comparecencia ante el juez de parte de su cúpula. La empresa asegura que “el juzgado de Madrid atenderá los asuntos de posible infracción de patente y los daños reclamados por TOT, pero no las reclamaciones por incumplimiento de los acuerdos de confidencialidad y de competencia desleal, ya que el Tribunal de Madrid se declaró no competente respecto a dichas reclamaciones”, que serán atendidas en Reino Unido. Por ello, la compañia considera que contra António Coimbra y Francisco Román “existe evidencia limitada”, ya que “fueron llamados como testigos antes de la decisión sobre la falta de competencia de los tribunales de Madrid, dado que este caso es contra Vodafone Group PLC y no contra Vodafone España”.
Una demanda de 508M
TOT atribuye a Vodafone la intención de aprovechar su tecnología OLPC y plagiarla, una atribución que hace extensiva a Huawei, ya que la 'startup' española estableció comtacto y acuerdos comerciales con las dos compañías tecnológicas hace varios años.
Los demandantes, por tanto, exigen a Vodafone y Huawei 508,9 millones de euros. Y esa cifra podría ir a más, ya que esas cantidades, en realidad, deberían ser multiplicadas en función del número de celdas de las que consten las antenas móviles que a día de hoy supuestamente estarían usando la tecnología de la compañía española, con lo que, según la información obtenida por este periódico, estaríamos ante una demanda de más de 1.000 millones de euros.
Y es que TOT no solo atribuye a Vodafone y Huawei ganar dinero gracias a una tecnología supuestamente plagiada, sino también de impedir que TOT lo ganase por su cuenta, bloqueando supuestamente sus acuerdos de colaboración e impidiendo a la 'startup' vender dicha tecnología a otras grandes compañías tecnológicas.
Así pues, el pago de los 508,9 millones sería establecido "como pérdida de incremento patrimonial que ha dejado de obtener TOT como titular del derecho de la patente a causa de la violación de su derecho", según reza la demanda.
Supuesto plagio
El origen de esta demanda comienza en 2005, cuando TOT, que había registrado cuatro patentes tecnológicas en los años anteriores, empezó a establecer contacto con Vodafone de cara a abrir vías de negocio juntos. Según TOT, "ambas compañías firmaron el 22 de abril de 2006 un acuerdo de confidencialidad que permitió una estrecha colaboración con varios directivos tecnológicos de Vodafone España", hasta el punto de que Vodafone "inició contactos con todos sus proveedores, como Nokia, Ericsson y muy especialmente Huawei, para que la solución OLPC se integrara en sus antenas y equipos de red. (...) A raíz de lo anterior, se iniciaron los primeros contactos a tres bandas entre TOT, Vodafone y Huawei".
Sin embargo, y siempre según la versión de TOT, "el objetivo de Vodafone y Huawei era obtener la máxima información por parte de TOT acerca del funcionamiento de su tecnología y el 'know how' de esta para apropiársela". De hecho, en diciembre de 2007 "Vodafone solicitó una patente a su nombre, titulada 'Method of management of power in utran networks', que es un plagio de un documento adjunto en un 'mail' enviado por TOT a Vodafone el 30 de mayo de 2006", aportado por los demandantes.
El objetivo de Vodafone y Huawei era obtener información de la tecnología de TOT para apropiársela y patentarla a su nombre
Para TOT, la estrategia de Vodafone y Huawei, en definitiva, consistió en firmar documentos "estableciendo condiciones para impedir que TOT pudiera desarrollar su actividad (...) y, mientras tanto, poder ir alargando los plazos haciendo creer a TOT que se implantaría su OLPC y, en paralelo y de forma oculta, patentando a su nombre dicha tecnología".
La relación a tres bandas se deterioró definitivamente entre finales de 2014 y comienzos de 2015, cuando "Vodafone solicitó formalmente a Huawei la inclusión de la tecnología de TOT en sus sistemas, a lo que Huawei respondió con una negativa", solicitando "el pago de unos precios elevadísimos, desproporcionados, que fueron rechazados por Vodafone". Ahí TOT se vio bloqueada, ya que ni Vodafone ni Huawei implementarían su tecnología, pero TOT no podía vendérsela a otras grandes tecnológicas, ya que lo tenía prohibido por contrato. De hecho, en su demanda, TOT incluso alude a un email en el que un directivo de Huawei supuestamente mostraba su intención de ralentizar el proceso para, finalmente, paralizar cualquier negociación con los demandantes.
Los demandantes, por tanto, lo tienen claro: Vodafone y Huawei "han mantenido una actitud engañosa desde el inicio de la relación" y "su objetivo en todo momento ha sido hacerse con la propiedad industrial e intelectual de TOT de forma ilícita, actuando de mutuo acuerdo para obtener cada una los sistemas más convenientes para su actividad".
El contencioso judicial se seguirá extendiendo durante los meses de septiembre y octubre. Hasta el momento, el proceso avanza lentamente, pero ya ha llevado a declarar ante el juez a Francisco Román, Antonio Coimbra y varios miembros más de la cúpula de Vodafone en España.
La cita ha tenido lugar lunes a las 10h en el Juzgado de lo Mercantil número 7 de Madrid. Parte de la cúpula de Vodafone España se ha sentado ante el juez para declarar, en calidad de testigos, en la primera vista de un juicio por presunto plagio tecnológico y lucha de patentes. Y entre dicha cúpula se encuentran Antonio Coimbra, actual CEO de la compañía en España, y Francisco Román, anterior CEO y actual presidente de Vodafone España.