¿En serio cuidas tu privacidad? Esto es lo que puede averiguar tu jefe si te busca en internet
¿Qué averiguaría tu jefe si te buscase en internet partiendo de un solo dato tuyo? Da igual que sea un dato simple como el nombre, email o móvil: te vamos a demostrar todo lo que puede encontrar
A todos nos preocupa (más o menos) nuestra privacidad 'online', y por ello todos tenemos la misma sensación: en internet no hay ninguna información que pueda servir para que nuestro actual jefe o un reclutador de empleo pueda saber algo de nosotros. Incluso si nuestro Facebook muestra más vida personal de la que queremos que se conozca, no pasa nada: allí solo puede ver tu información un círculo cerrado de amigos. No hay nada que temer.
Pero, ¿estás seguro de que cuidas tu privacidad 'online'? ¿Estás seguro de que, si la persona de la que depende tu futuro o presente laboral se pone a buscarte en internet, no va a encontrar nada que no quieres que encuentre? Créenos: si tiene paciencia y unos conocimientos técnicos muy básicos, va a poder encontrar mucha más información de la que a ti te gustaría.
Hagamos un experimento. Imaginemos que tu jefe o la persona que te hace una entrevista de trabajo tiene un solo dato sobre ti. Solo uno: ya sea el nombre, el correo, el teléfono o simplemente tu perfil de Linkedin. Vamos a demostrarte todo lo que podría encontrar sobre ti en internet si de verdad se lo propone. Spoiler: el resultado no te va a gustar (aunque quizá a tu jefe sí).
1. Si tiene tu email
Imaginemos que tu jefe o el reclutador de turno te tiene agregado en Linkedin. Si tienes un perfil en esta red social habrás visto que puedes escribir una breve descripción sobre ti en tu biografía. Es ahí donde mucha gente, especialmente si está buscando empleo o si está abierta a nuevas experiencias laborales, suele poner su correo electrónico. En este caso, si pones tu email, lo normal será que pongas una dirección 'seria', esa que usas a nivel laboral, generalmente tu cuenta de Gmail o alguna otra orientada a temas profesionales.
Sin embargo, si tu jefe o reclutador quiere saber tu email, quizá no vaya a tu biografía, sino a la pestaña de contacto de tu perfil. Y aquí llega la primera sorpresa. En esa pestaña Linkedin no pone el email que pusiste en tu biografía, sino el email con el que te registraste en esa red social. Y es probable que ambos no coincidan. Si te registraste hace tiempo, tal vez ese email no sea el 'serio', sino esa cuenta de Hotmail que te abriste hace muchos años y que a día de hoy usas básicamente para registrarte en páginas web y poco más. Esa cuenta será la que sirva de puerta de entrada a todo lo demás.
¿Qué pueden descubrir con tu correo electrónico?
a) Tu Facebook. Si en el buscador de Facebook insertas una cuenta de correo electrónico, la red social te indicará si hay algún perfil registrado con esa cuenta. Da igual que en la vida real te llames Roberto Llaneras López y en Facebook seas Rob Llan, por ejemplo: si te registraste con el mismo email de Linkedin, aparecerá tu cuenta.
Es probable que hace años escribieras comentarios que pudieran ser polémicos o conflictivos (racistas, machistas, ideológicamente comprometidos...)
b) Tu Twitter. En Twitter no funciona el buscador por correo electrónico, pero hay herramientas 'online' como Rapportive que sirven de chivato perfecto. Si insertas ahí un email, te dirá en qué redes sociales hay perfiles registrados con ese correo. Si resulta que tienes una cuenta anónima en Twitter en la que pones a parir a medio mundo, más te vale que no esté registrada con el email que tiene tu jefe, porque podrá descubrirla.
c) Webs de contactos. A día de hoy las 'apps' y webs de contactos son muy sofisticadas en la privacidad de los usuarios, pero no siempre fue así. Si te registraste o usaste alguna web de este tipo hace años, cuando ninguno nos preocupábamos por nuestra privacidad 'online', una buena búsqueda en Google podría delatarte. Y no hay nada de malo en estar en una web de contactos, pero si quieres mantener tu intimidad a salvo esto te complicará la tarea.
d) Comentarios polémicos en internet. También es probable que hace años, en la época dorada de los blogs, escribieras comentarios que pudieran ser polémicos o conflictivos (racistas, machistas, ideológicamente comprometidos...). Si lo hiciste en uno de esos blogs que muestra el correo del usuario, te pueden descubrir.
e) Dominios registrados. Si alguna vez has tenido una web de la que prefieres no acordarte, asegúrate de que registraste el dominio de manera segura y privada; si no, tu reclutador podría encontrarla gracias al correo que usaste. También puede que los dominios que tienes registrados sean de lo más normal, pero eso es lo de menos: si los registraste de manera no anónima, en webs como Whoisology podrían aparecer otros datos tuyos, como tu teléfono o el domicilio de tu casa.
2. Si tiene tu número de móvil
En este caso, Linkedin será de nuevo la mayor puerta de entrada a nuestra privacidad. Al tratarse de una red social de ámbito profesional, la mayoría de usuarios no duda en dar según qué formas de contacto que en otras redes sociales no daría ni borracho. Pues sí, amigo, mucha gente pone su móvil en Linkedin. Y si crees que tú no lo haces, te recomendamos ir corriendo a tu perfil para comprobarlo: igual te llevas una sorpresa.
¿Qué pueden descubrir con tu número de teléfono?
a) Tu Facebook. De nuevo, llegar a tu Facebook podría ser fácil. Quizá no lo recuerdes, pero es medianamente probable que, al usar al 'app' móvil de esta red social, hayas vinculado tu perfil a tu número de teléfono. En ese caso, si tu jefe o reclutador mete ese número en el buscador, no lo dudes: saldrás tú.
b) Webs de contactos. Repetimos: hace diez años la privacidad no era igual que ahora, y puede que algún portal de contactos mantenga tu número y pueda salir en Google. Insistimos: aquí no juzgamos a nadie, eres totalmente libre de entrar en las webs de citas que creas conveniente, pero si quieres evitar que te encuentren, ojo a esto.
c) Dominios registrados. Igual que con el correo. A menos que registrases el dominio sin dar tus datos, ten cuidado. Es poco probable, pero si eres el dueño de un dominio, digamos, 'cuestionable', esto podrá aparecer en los buscadores. Y, de nuevo, las webs que analizan el whois de un dominio podrían ser el recipiente en el que haya más datos asociados a ti.
3.- Si tiene tus dos apellidos
La mayoría solemos poner nuestro nombre y dos apellidos en el CV. No pasa nada, ¿verdad? En principio no, a menos que no queramos que nuestro jefe o reclutador tenga un punto de partida para encontrarnos y 'diseccionarnos' en medio internet.
¿Qué pueden descubrir con tus dos apellidos?
a) Tu Facebook. Sí, sabemos lo que nos vas a responder a esto: "Mi nombre real es Roberto Llaneras López, pero en Facebook soy Rob Llan y ese señor no tiene mi correo electrónico para buscarme". Sí, lo sabemos, pero hay otros métodos. Es probable que ahora seas Rob Llan, pero lo más seguro es que, cuando te registrases en Facebook, lo hicieras con tu nombre y dos apellidos. Así pues, quizá tu nombre en la red social ha cambiado, pero, a menos que hayas sido cuidadoso, tu nick inicial (el que sale en la url de la web) seguirá siendo el mismo. Si tu jefe recurre a la estructura típica de nicks que usa Facebook, podría buscar 'roberto.llaneraslopez' en el buscador y encontrarte.
Y si esto te parece poco, hay una segunda opción: quizá has cambiado tu nombre y tu nick, pero mucha casualidad será que no tengas un familiar que siga registrado con nombres y apellidos. En ese caso, podría buscar a todos los Llaneras López e indagar en su lista de amigos.
b) Denuncias. Esto es poco probable, pero no imposible. Si alguna vez has denunciado a alguien o has sido denunciado, es medianamente probable que tu nombre completo esté rulando por internet. No tienes por qué haberlo publicado tú, pero quizá sí lo hiciera otra persona.
c) Dominios registrados. Insistimos: el problema no son los dominios que tengas registrados, sino que aparezcan otros datos como tu correo electrónico, tu móvil, tu dirección de casa...
4. Si tiene tu DNI
¿A quién en su sano juicio se le ocurriría poner su número de DNI en internet? A nadie, ¿verdad? Sin embargo, hay una puerta de entrada. Si alguna vez has buscado empleo, es probable que hayas subido tu CV a páginas como Infojobs, Infoempleo o Linkedin. Todo correcto, salvo un detalle: al subirlo, debías borrar o pixelar el DNI. Si no lo hiciste y Google ha indexado el contenido, tu DNI estará disponible para tu jefe o reclutador.
¿Qué pueden descubrir con tu DNI?
a) Multas. A día de hoy las instituciones públicas son muy cuidadosas con la difusión de datos personales, pero créenos: no siempre lo han sido, y algunas siguen sin serlo. Seguramente a tu jefe no le parezca grave que te multasen a los 19 años por hacer botellón en la calle, pero quizá no quieras que se entere. Además, la cosa se podría complicar: si estás optando a trabajar como transportista y descubren que has tenido varias multas de tráfico... en fin, no hace falta que sigamos explicándote, ¿verdad?
b) Denuncias. De nuevo es poco probable, pero si te has visto implicado en algún tipo de denuncia quizá tu DNI esté localizable en internet. Y puede que eso te perjudique.
Si después de leer este reportaje te has echado a temblar, hacemos un llamamiento a la calma. No te diremos que 'si no tienes nada que ocultar no debes preocuparte', porque no somos quiénes para juzgar ese asunto. Lo que sí te diremos es que, si te vieras en problemas por algo de lo que pueda descubrir tu jefe buscándote en internet, hay salida. En la mayoría de casos que hemos ido describiendo, un despido sería probablemente ilegal, con lo que, si se produjese, te recomendamos buscarte un abogado laboralista para que defienda tus legítimos derechos.
Pero tampoco seamos ingenuos. Quizá lo que encuentren sobre ti no acabe desembocando en un despido inmediato, pero sí en que tu jefe se forme una mala opinión o en que seas descartado en un proceso de selección de nuevos empleados, con lo que quizá deberías revisar a fondo la información que hay sobre ti en internet. Si todo esto te ha parecido conspiranoico, créenos: en este periódico hemos investigado a mucha gente y este tipo de estrategias nos han ayudado muchísimo más de lo que te imaginas.
A todos nos preocupa (más o menos) nuestra privacidad 'online', y por ello todos tenemos la misma sensación: en internet no hay ninguna información que pueda servir para que nuestro actual jefe o un reclutador de empleo pueda saber algo de nosotros. Incluso si nuestro Facebook muestra más vida personal de la que queremos que se conozca, no pasa nada: allí solo puede ver tu información un círculo cerrado de amigos. No hay nada que temer.