Especulación, estafas millonarias y blanqueo: ¿debe España prohibir el bitcoin?

Suenan tambores de guerra contra el bitcoin en Corea del Sur. El Ministerio de Justicia de aquel país tiene entre manos “un proyecto de ley para prohibir el intercambio", además de haber tomado medidas contra la especulación y blanqueo de capitales. No muy lejos de allí, en China, las autoridades han lanzado una batería de medidas que incluso quiere prohibir la 'minería'. Rusia quiere expulsar esta actividad de las zonas residenciales y ya ha impuesto grandísimas restricciones. En India, entre otros lugares, también han tomado medidas restrictivas, y en Egipto claman contra esta divisa digital acusándola de perturbar los principios del islam.

La criptomoneda por excelencia, con una cotización de infarto de la más pronunciada de las montañas rusas, ha salpicado el mapa mundial de asombro, excitación, confusión y también temor a partes iguales. "A día de hoy, el bitcoin está por encima, por ejemplo, del rublo ruso. Es la cuarta moneda en capitalización del mundo", explica Alberto Gómez Toribio, cofundador de NevTrace y uno de los mayores expertos nacionales en la materia. "Es totalmente natural que gobiernos con una divisa débil se muestren más combativos, pero en otras zonas del mundo, como la zona euro, no está en la agenda política".

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Esta semana, sin embargo, la Comisión Nacional del Mercado de Valores y el Banco de España alertaron de los peligros de bitcoin y otras monedas digitales, basándose en los avisos lanzados desde los reguladores estadounidenses. “Han surgido preocupaciones con respecto a los mercados de criptodivisas y las ICO, incluyendo que, tal y como están operando en la actualidad, hay considerablemente menos protección para los inversores que en nuestros mercados de valores tradicionales, con los consiguientes mayores riesgos de fraude y manipulación”, señala el comunicado de la SEC, que 'replicó' el organismo español. Ante esto es imposible no preguntarse si ha llegado también a nuestro entorno el momento de la mano dura con esta tecnología.

En España y en Europa, una regulación o prohibición al estilo de China es impensable a día de hoy

"En España y en Europa es a día de hoy impensable una prohibición o una regulación muy dura en este sentido", añade Gómez-Toribio. "Además, no es el camino que se está siguiendo. Probablemente el nuestro sea uno de los marcos más propicios para operar con bitcoin. En España ya es posible constituir sociedades con bitcoins y Acnur o Médicos sin Fronteras se han financiado por este tipo".

Las diferencias son notables entre EEUU y Europa. Al otro lado del Atlántico "se ha creado una licencia a medida" para operar con ella, lo que "desincentiva" la entrada de nuevos actores, especialmente 'startups'. "Aquí, a raíz de la decisión del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, tomó el punto de partida de que fuesen tratadas como divisas", continúa Gómez Toribio. "Si deben ser legisladas igual, también deben ser autorizadas para los mismos usos y eso abre muchísimas puertas".

Las casas de cambio, la clave

Supuestos fraudes millonarios, evasión, blanqueo... Son algunos de los estigmas que han acompañado a estas criptodivisas. Sin embargo, los expertos señalan un actor clave: las casas de cambio. "El 80% de las operaciones con bitcoin están identificadas gracias a estas plataformas", comenta Pablo Fernández Burgueño, abogado especializado en nuevas tecnologías y fundador de la firma de ciberseguridad Escila.

"En esto llevan trabajando dos años y, a lo largo de 2018, la Unión Europea va a publicar las directivas de prevención de blanqueo de capitales. Eso obligará a las casas que trabajan con criptomonedas a tener identificado (cosa que ya ocurre) tanto a los que compran como a los que venden, por lo que así se pretenden minimizar posibles evasiones de impuestos, fraudes o, incluso, la financiación del terrorismo", explica. "La siguiente clave será extender esto a las casas de cambio de fuera de Europa que actúen hacia nuestro mercado".

Gracias a las casas de cambio, el 80% de las operaciones con bitcoin están identificadas

El economista Juan Ramón Rallo es bastante escéptico con que en el medio o largo plazo las autoridades nacionales y comunitarias "no intenten meter mano". "Uno de los argumentos más recurrentes que utilizan a la hora de legislar es que puede resultar desestabilizador para la economía si todo este tema sufre un pinchazo. No lo niego, pero no creo que sea la razón principal", analiza. "Creo que empieza a producirse un inicio de miedo entre ciertos agentes y gobiernos a perder el monopolio monetario, que es lo que ha sido hasta que ha aparecido un nuevo competidor", añade.

Control estatal y miedo

Cuando se le pregunta por posibles regulaciones de cara a acotar los usos delictivos de estas monedas, es tajante: "El euro o el dólar, cuando hablamos de efectivo, también son vías para el blanqueo de capitales. Y los controles que tienen son bastante más laxos que los que se quieren imponer al bitcoin. Se está vendiendo el peor escenario posible para justificar acciones de control estatal".

También resta cierta importancia a la volatilidad de esta moneda: "Creo, y esto es una opinión puramente personal, que en los últimos meses ha entrado gente que no comprendía realmente el funcionamiento de las criptomonedas y cuando se dan movimientos como el de Corea o China salen pitando por miedo a perderlo todo".

Rallo tampoco es partidario de un control sobre estas criptodivisas, "de la misma forma" que no lo es con otros activos. "Esto es como el principio de la inviolabilidad del domicilio. Si la policía tuviese la potestad de entrar sin orden judicial a tu casa, obviamente descubrirían algún delito más. Pero prevalece el derecho a la intimidad", afirma como comparativa. "No tengo la más mínima duda de que cualquier Estado a la larga va a intentar tutelarlos, hay que ver si las medidas son tan agresivas como las de China y si la ciudadanía las permite".

En España, un 'minero' debe darse de alta en el impuesto de actividades económicas

Algunos de estos expertos opinan que España se encuentra mucho más avanzado, incluso, que los países de nuestro entorno. "Aquí sabemos que incluso el 'minero' tiene que darse de alta en el impuesto de actividades económicas y que su actividad no está sujeta al impuesto del IVA", explica Gómez Toribio, que destaca el "papel activo de la CNMV" asesorando y controlando las distintas ICO —iniciativas para captar financiación con criptomonedas— en nuestro mercado. "Se trata de supervisar que estas operaciones se cumplan en base a la normativa que existe para otras formas tradicionales como el 'crowdfunding'. La diferencia es que en este caso es un sistema tecnológico y, por tanto, completamente legal", completa en este sentido Pablo Fernández Burgueño.

¿Desmontar las 'criptominas' es posible?

China lo tiene claro. No quiere tener ni 'mineros' en su territorio. Por eso está preparando una serie de medidas para evitar que se puedan realizar estas actividades allí. Pero ¿realmente es posible? "Por supuesto que sí. Es tan fácil cómo controlar el consumo energético", comenta Alex Preukschat, autor del libro 'Blockchain, la revolución industrial de internet'. 

No hay que olvidar que el consumo anual del minado de bitcoins gasta más electricidad que 161 países debido a la gran capacidad de procesamiento que se requiere para ejecutar con éxito estas transacciones. Este experto explica cómo en Canadá se han dado casos en que la policía, "hace ya unos años", detectaba un consumo anormal de electricidad y acudía al edificio en cuestión pensando que era un laboratorio de drogas y se encontraban con un montón de ordenadores. 

"En este sentido, España no va a tener un gran problema que gestionar. Hay que pensar que tenemos uno de los precios más altos de kilovatio hora del mundo. Eso hace que instalarse aquí como 'minero' no tenga sentido", aclara Gómez Toribio. "Se instalan en lugares como Venezuela o China porque la energía es barata. También tienen predilección por climas fríos [como Rusia] porque eso ayuda a la refrigeración de los equipos", remacha.