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1.040 millones perdidos en un día: cuando un ordenador arruina a una gran empresa
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PERDIERON MILLONES POR ERRORES INFORMÁTICOS

1.040 millones perdidos en un día: cuando un ordenador arruina a una gran empresa

La informática funciona sola... cuando has sabido programarla bien. Que se lo digan a estas empresas: en apenas unas horas, todas tuvieron pérdidas millonarias por fallos informáticos

Foto: 45 minutos le bastaron a Knight Capital para perder 440 millones por un error informático. Foto: Jin Lee/Bloomberg.
45 minutos le bastaron a Knight Capital para perder 440 millones por un error informático. Foto: Jin Lee/Bloomberg.

Hace tiempo que varias de las mayores compañías del mundo confían en la tecnología no solo para mantener ciertas tareas 'online', sino, de hecho, incluso para ejecutar varios de sus trabajos más importantes y estratégicos. Y no seamos ingenuos: es una gran idea. La automatización de ciertos servicios no solo es un recurso más eficiente: en muchas ocasiones, también es más acertado en tareas en las que la labor humana suele fallar con más frecuencia.

Foto: De no ser por una negligencia informática, Santiago del Valle habría sido encarcelado antes de asesinar a Mari Luz Cortés. Foto: EFE/Julián Pérez.

Sin embargo, las cosas no siempre salen bien, y a veces una mala previsión, una mala programación informática o un simple error pueden acabar costando pérdidas millonarias o incluso la ruina absoluta. Estas son las historias de tres compañías que perdieron cientos de millones de euros en pocas horas: alguna de ellas, incluso, entró en quiebra técnica por errores informáticos.

1. Cómo perder 440 millones en 45 minutos

1 de agosto de 2012, un día más en Wall Street para Knight Capital, una de las empresas más activas del momento que, a modo de 'broker', trabajaba comprando y vendiendo acciones según la evolución de las mismas en la Bolsa neoyorquina. Sin embargo, aquel 1 de agosto iba a ser un día terrorífico: tan terrorífico que le costó la ruina.

La compañía programaba sus opciones de compra y venta de acciones desde un ‘software’ informático. Sin embargo, algo iba mal: a primera hora de la mañana, la actividad de Knight Capital era muy alta. Demasiado alta. Estaba comprando y vendiendo demasiadas acciones, a una velocidad muy por encima de su ritmo habitual y, sobre todo, muy por encima de toda lógica financiera.

El software que realiza las compras y ventas en Bolsa ejecutó las acciones programadas para toda la semana

En realidad, todo se debía a un error: aquella mañana, el programa que ejecuta las compras y ventas de Knight Capital se había puesto a ejecutar todas las acciones que debían haberse ido repartiendo a lo largo de la semana.

Y así estuvo tres cuartos hora, trabajando a un ritmo tan frenético como insensato, hasta que los responsables de la compañía vieron el error y pararon las transacciones.

placeholder Así cayeron las acciones de Knight Capital tras el desastre informático.
Así cayeron las acciones de Knight Capital tras el desastre informático.

10 millones de dólares perdidos cada minuto

Fueron apenas 45 minutos, pero los más desastrosos de la historia de esta empresa: en poco más de media hora, Knight Capital había cosechado unas pérdidas millonarias: 440 millones de dólares acababan de irse al garete. En total, Knight Capital había perdido casi 10 millones al minuto.

Esto también influyó en sus acciones: si al comienzo de la jornada cada acción de Knight Capital valía algo más de 4 dólares, media hora después no llegaban al dólar. Pese al corto plazo de tiempo que duró el error, había sido catastrófico.

Knight Capital perdió 440 millones y tuvo que ser comprada por su máximo rival

De hecho, el drama de la firma de inversión no acabó en los 440 millones de dólares. Y es que la pérdida millonaria hizo que la compañía se quedase casi sin dinero: había pasado de ser uno de los ‘brokers’ más activos de Wall Street a rozar la quiebra y cerrar para siempre.

Por suerte, la quiebra no llegó a materializarse. En los días siguientes, la compañía consiguió reunir a un grupo de grandes inversores, que salvaron a Knight Capital de la hecatombe financiera y el cierre definitivo. Pero entre sus nuevos accionistas se encontraba GetCo, el mayor rival de Knight Capital, que a finales de ese año acabaría haciéndose con el 100% de la firma.

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Foto: EFE/Justin Lane.

2. British Airways: 510 millones en 24h

27 de mayo de 2017. Miles de pasajeros se amontonan en los puestos de información de British Airways en 170 aeropuertos de 70 países: sus reservas no funcionan, no pueden imprimir sus billetes, no pueden facturar y, en definitiva, no pueden volar.

A los pocos minutos, la aerolínea confiesa lo que ha sucedido: su red informática se ha caído a nivel global y están siendo incapaces de restaurarla. En cuestión de minutos, la compañía se ve obligada a cancelar todos sus vuelos, con el consiguiente perjuicio para todos sus pasajeros.

British Airways perdió 100 millones y sus acciones en Bolsa bajaron otros 410 millones

Para más inri, el responsable al que todos señalan con el dedo es un español: se trata de Álex Cruz, el consejero delegado de la aerolínea, al que el sindicato de British Airways responsabilizó del fallo tras subcontratar en la India la gestión del sistema informático.

El desastre duró poco más de un día. A causa de las cancelaciones, devoluciones e indemnizaciones, British Airways perdió poco más de 100 millones de euros, pero la cosa no se quedó ahí: en la Bolsa, la capitalización de su grupo bajó en otros 410 millones, según los analistas de Banco Sabadell.

placeholder El bilbaíno Álex Cruz fue culpado del desastre informático de British Airways.
El bilbaíno Álex Cruz fue culpado del desastre informático de British Airways.

3. Delta Airlines: 90 millones en cinco horas

El caso de Delta Airlines fue menos catastrófico, pero no por ello menos importante. Todo empezó el 8 de agosto de 2016, cuando el sistema informático de la aerolínea también se vino abajo.

La compañía tardó cinco horas en levantar su sistema, pero las consecuencias ya se estaban agolpando: en esas cinco horas, Delta AIrlines se vio obligada a cancelar o retrasar varios cientos de vuelos. De hecho, pasajeros que ya estaban sentados en aviones de Roma, Los Angeles o Londres tuvieron que ser desalojados antes de despegar.

placeholder Delta Air Lines tuvo que cancelar más de 1.300 vuelos. Foto: EFE.
Delta Air Lines tuvo que cancelar más de 1.300 vuelos. Foto: EFE.

El caos informático acabó ese día, pero el aéreo fue mucho más lejos: durante los siguientes tres días, Delta AIrlines se enfrentó a la cancelación o retraso de más de 1.300 vuelos en todo el mundo. El resultado: unas pérdidas cercanas a los 90 millones de euros.

Parece evidente que la mayoría de estas empresas habrán aprendido la lección. Delegar ciertas tareas en los algoritmos informáticos no solo es necesario, sino también mucho más eficiente. Ahora bien, la informática no funciona sola, así que habrá que aprender a programarla bien y, sobre todo, a tener un plan alternativo (y rápido) cuando surjan los problemas.

Hace tiempo que varias de las mayores compañías del mundo confían en la tecnología no solo para mantener ciertas tareas 'online', sino, de hecho, incluso para ejecutar varios de sus trabajos más importantes y estratégicos. Y no seamos ingenuos: es una gran idea. La automatización de ciertos servicios no solo es un recurso más eficiente: en muchas ocasiones, también es más acertado en tareas en las que la labor humana suele fallar con más frecuencia.

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