Esta 'startup' es la única española entre las 50 más prometedoras del mundo

Mañana se cumplen dos años del nacimiento de la empresa madrileña Geoblink, fundada por Jaime Sánchez-Laulhé sin más compañía que 3.000 euros. Esta semana, Bloomberg la incluía en su lista de las "cincuenta 'startups' más prometedoras de las que nunca has oído hablar", una selección que su última edición de 2009 contó con nombres tan bien conocidos hoy como Spotify y Evernote. Entre los requisitos evaluados para cribar entre más de 50.000 jóvenes compañías están la rapidez con la que han obtenido financiación y el potencial del sector en el que se encuentran.

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S. Ferrer

"Es increíble, nos está contactando mucha gente por haber salido", explica Sánchez-Laulhé a Teknautas. El fundador y CEO de Geoblink trabajaba en la consultora McKinsey, donde ayudaba a empresas de venta al por menor a colocar sus puntos de venta en el lugar adecuado, analizar por qué funcionan mejor o peor según el sitio y planificar dónde abrir el siguiente. Esta disciplina se conoce como 'geomarketing' y, con ella en mente, decidió crear un producto que atacara estos problemas desde la nube.

La plataforma muestra un mapa interactivo que ayude a encontrar el mejor lugar donde abrir un establecimiento

Geoblink consigue lo mismo que Sánchez-Laulhé hacía en su antiguo trabajo, pero analizando datos de diversas fuentes para contestar la pregunta: ¿dónde abro mi tienda? Para responderla, mira cuánta gente vive y pasa por esa zona, sus datos demográficos (edad, sexo, poder adquisitivo...), si hay competencia o colegios cerca, qué consumen aquellos que van por allí (moda, ocio nocturno, bares...).

El servicio va más allá y también muestra áreas gemelas a otras y permite analizar la canibalización, es decir, el número de clientes que se pierden por culpa de la competencia cercana. El objetivo final es que el usuario encuentre el punto óptimo en el que iniciar o expandir su negocio.

El resultado es, en palabras de Sánchez-Laulhé, "un Google Maps avanzado" para gente de negocios sin conocimientos técnicos. "Es fácil de usar, en cinco segundos te muestra un mapa interactivo con los datos de la zona", resume el CEO de Geoblink. El sistema funciona con una suscripción anual, pensada para grandes cadenas, e informes individuales para los pequeños empresarios, cuyo precio es de 700 euros. De momento cuenta con clientes como Eroski, Toyota, Generali, Granier y BasicFit.

Desde Londres al CERN

Aunque solo hayan pasado dos años desde el nacimiento de Geoblink, ha llovido mucho desde entonces. A los dos meses de fundar la mesa, Sánchez-Laulhé recibió 175.000 euros de Iñaki Berenguer, y tras pasar casi un año en la aceleradora de 'startups' de Juan Roig, Lanzadera, recibió su primer millón de euros de Nauta Capital. La empresa también ha salido de nuestras fronteras: hace menos de un mes que arrancó en Reino Unido y, según su fundador, están "a punto" de comenzar en Francia. "Hemos nacido aquí pero la meta es ser globales", asegura Sánchez-Laulhé, que ha vivido en Hong Kong, Nueva York y Francia.

El equipo también ha cambiado en estos dos años: de una persona ha pasado a 25, con perfiles bien distintos. La 'startup' cuenta con doctores en Física salidos del CERN de Ginebra (Suiza) y matemáticos; también con trabajadores salidos de Dropbox y la empresa de videojuegos EA Games. Un variado grupo de cerebros destinados a facilitar la vida a directores de expansión y pequeños empresarios. Porque elegir mal la calle de un negocio puede suponer una sentencia prematura de muerte.