Por qué es absurdo que España proteja la privacidad de los jóvenes por WhatsApp

La Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) se ha unido al Ministerio de Educación para educar a los más jóvenes en materia de privacidad, según ha anunciado esta semana. Curiosamente uno de los canales escogidos a tal efecto es un número de WhatsApp, una aplicación que no destaca por su seguridad y protección de datos.

La ironía queda patente si se tiene en cuenta que este mismo mes el Tribunal de Justicia de la Unión Europea invalidaba los intercambios de datos personales entre EEUU y Europa. Una decisión que afecta a empresas americanas como Facebook, dueña de WhatsApp.

“Que la AEPD utilice un servicio así con la directriz derogada es llamativo”, explica a Teknautas el informático y experto en ciberseguridad Yago Jesús. “Hay que dar ejemplo, es como ser Ministro de Sanidad, prohibir fumar en los hospitales y que te pillen haciéndolo en la puerta”, añade.

"¿Telegram? Todavía peor"

Lo peor no es el mal ejemplo, sino los riesgos inherentes a un canal como WhatsApp: “No sólo tus datos son archivados, sino que existe el peligro de que se apoderen del número registrado”, asegura Yago. El experto considera que esta posibilidad es “técnicamente viable”, por lo que alguien se podría hacer pasar por AEPD “como quien se esconde en el confesionario de una iglesia, porque no ves con quién hablas”.

No sólo tus datos son archivados, sino que existe el peligro de que se apoderen del número registrado

La intención, como suele decirse, era buena. “Las administraciones suelen ser acusadas de no usar los medios correctos, sobre todo para la gente más joven”, comenta Yago. Además, WhatsApp “ha avanzado mucho” en temas de seguridad. Pero esto no impide que se hayan “probado reiteradamente” numerosas vulnerabilidades: la web de la Electronic Frontier Foundation compara la seguridad de la app de mensajería frente a la de sus rivales

Telegram suele presentarse como la alternativa por excelencia en esta situaciones. Yago, por el contrario, defiende que su uso “hubiera sido peor”. En su opinión, la aplicación propiedad del multimillonario ruso Pável Dúrov no es tan transparente como imaginamos: “Lo que llega al exterior pone los pelos de punta”. ¿La mejor opción? En opinión del experto, “utilizar alternativas que respeten la privacidad, como la española Spotbros”.