Chasco para Soria: no podrá aprobar el decreto de autoconsumo hasta septiembre

El ministro de Industria, José Manuel Soria, ha expresado en varias ocasiones durante las últimas semanas su intención de irse de vacaciones con el real decreto de autoconsumo aprobado y listo para entrar en vigor. Sin embargo, sus intenciones se han visto truncadas. El pasado viernes 31 de julio tenía lugar el último Consejo de Ministros del curso y el borrador no pudo ser tramitado, ya que faltaba el informe del Consejo de Estado.

A falta de ese documento, el Gobierno ya había cumplido con los demás trámites, incluyendo el de la consulta pública y el informe de la Comisión Nacional del Mercado y de la Compentecia. El borrador, al que se le han realizado algunas modificaciones tras las fuertes críticas recibidas, fue enviado hace días al Consejo, de forma que el ministro se ha fue de vacaciones sin el decreto, pero con todo encaminado para poder aprobarlo a su vuelta.

Sin embargo, el Consejo de Estado va a frustrar sus intenciones varias semanas más. El motivo es que, según ha podido saber Teknautas, este martes accedió a una petición de audiencia, relativa a dicho proyecto de real decreto, otorgando un plazo de quince días hábiles a contar desde el día siguiente de la resolución, es decir, desde este miércoles. En ese periodo, el solicitante de la audiencia, que prefiere que su nombre no sea publicado, podrá acudir a la secretaría general del Consejo para consultar el expediente y redactar sus alegaciones.

No antes del 4 de septiembre

Esto quiere decir que en las próximas tres semanas naturales, el Consejo no habrá emitido todavía su informe. El día 26 de agosto se cierra este periodo de audiencia, que el organismo respetará antes de redactar sus conclusiones. Es prácticamente imposible que el informe esté listo para el día 28 de agosto, en que se celebra el primer Consejo de Ministros tras la vuelta de las vacaciones.

La fecha de aprobación del decreto se retrasaría al siguiente Consejo de Ministros, el 4 de septiembre. Y sólo si todos los implicados trabajan a toda velocidad

El Gobierno debe recibir ese informe y estudiarlo, aunque no tengan la obligación de tenerlo en cuenta ya que no se trata de un texto vinculante. En cualquier caso, la fecha de aprobación del decreto se retrasaría al siguiente Consejo de Ministros, el día 4 de septiembre. Y eso sólo si todos los implicados en el proceso trabajan a toda velocidad. El real decreto de autoconsumo seguirá por tanto durante varias semanas más en la pila de cosas por hacer del ministro Soria, y no en la de las cosas finiquitadas.

Una carrera contrarreloj por el autoconsumo

No se trata de un retraso sin más. La aprobación de este decreto se ha convertido en una carrera contrarreloj entre el ministro Soria y los grupos que se oponen a la normativa, entre los que se encuentran las empresas del sector, asociaciones de consumidores, grupos ecologistas y formaciones políticas. El primero quería solventar los trámites antes de llegar al parón estival. Se barajó la fecha del 31 de julio, y después la de este viernes, 7 de agosto, con las consiguientes críticas por la supuesta intención de que la aprobación pasase desapercibida a causa de las vacaciones veraniegas.

La oposición ha tratado de dilatar el proceso todo lo posible, aprovechando el periodo de consulta pública para inundar el buzón de alegaciones habilitado por el Ministerio y poniendo en marcha una recogida de firmas que demostró el músculo que tienen los autoconsumidores en nuestro país: 100.000 firmas en 24 horas y el buzón de correo del Ministerio colapsado.

Modificaciones al borrador

En cualquier caso, el borrador que ha recibido el Consejo de Estado no es el mismo que originalmente presentó el Gobierno. Después de muchas críticas ha incluido algunos cambios. Por ejemplo, el autoconsumo ya no será incompatible con tener contratado el Precio Voluntario al Pequeño Consumidor o el bono social, ambos contratos regulados pensados para las viviendas con menos recursos. Esta había sido una de las quejas más oídas, ya que el autoconsumo es especialmente beneficioso para aquellas personas con ingresos bajos, porque puede ayudarlas a reducir el importe de sus facturas.

También elimina la obligación de que las instalaciones menores de 10 kW (que son principalmente las domésticas) que se han comprometido a no verter sus excedentes de energía a la red general abonen los estudios de acceso y conexión a la red. Esas instalaciones seguirán teniendo que solicitar la autorización de su compañía eléctrica, pero ya no tendrán que pagar por ello.

Quizá lo más llamativo sea el cambio de actitud frente a las baterías. Aunque en el nuevo texto desaparece la prohibición de utilizarlas (que estaba presente en el texto de 2011, y que se mantenía en el nuevo a la vez que absurdamente se cobraba por su uso), Jorge Morales, experto en energía y emprendedor del sector eléctrico, pide no caer en el simple análisis de que el Gobierno ha respondido a las presiones generales y en concreto a las de la multinacional Tesla.

'Elimina la prohibición de usar las baterías, pero en vez de quitar el impuesto que puso sobre ellas lo ha extendido a todos los casos'

"Es verdad que elimina la prohibición de usar las baterías, pero en vez de quitar el impuesto que puso sobre ellas, y por el que la CNMC le llamó la atención porque lo consideró discriminatorio y recaudatorio, lo ha extendido a todos los casos". En el anterior borrador, explica Morales, el Gobierno establecía un cargo fijo a la potencia de la batería: si la utilizabas para reducir tu potencia contratada (demanda máxima de energía en un instante determinado), te cobraban un cargo fijo que resultaba disuasorio.

"En su informe, la CNMC le dijo al Gobierno algo escandaloso: que si seguía por ese camino tendría que cobrar a todos los que consiguiesen de una forma u otra reducir su potencia contratada", continúa Morales. Ahora Industria extiende ese cargo a todos los sistemas de autoconsumo que tengan ese efecto, aunque no utilicen para ello una batería.

Estos cambios en el borrador no han pillado a sus opositores con el pie cambiado, ni piensan aflojar su postura. Morales reconoce que son una mejora, pero insiste en que la propuesta sigue muy lejos de fomentar realmente el autoconsumo: "Amenazan con ser muy duros para luego aflojar un poco, y todavía tienes que dar las gracias".