Apple se tambalea con iOS 8, su lanzamiento con más fallos

Los números son siempre un tema calientecuando se habla de Apple, y es que es fácil pillarse los dedos con análisis precipitados. No recordaremos ahora aquellos oráculos que vaticinaron el seguro batacazo del primer iPhone, o los que no duraron en calificar al iPad como “un iPod gigante” con el dispositivo en las manos. En esta casa hasta el rabo todo es toro y conviene ser cautos.

Sin embargo, parece que algo está cambiando en lo que respecta a la calidad de algunos de los productos de la casa. No se sabe muy bien si por un ánimo de relajar la elevada tasa de exigencia impuesta en la era de Jobs, o bien porque el control no es tan bueno, pero lo cierto es que la división que gestiona el desarrollo de iOS vuelve a estar en el disparadero. ¿Recuerdan el lanzamiento de iOS 8? Esta nueva versión ha sido uno de los grandes saltos de la plataforma, y hay que reconocer el mérito del fabricante en conseguir el efecto de “móvil nuevo” actualizando el software. Pero sin embargo parece habérseles atragantado…

Tal y como avanzamos en octubre, iOS 8 está pasándolas canutas en un aspecto que sin duda preocupa a los grandes: el índice de adopción. Este ratio mide el porcentaje de actualización a las nuevas versiones entre los usuarios y sirve como claro termómetro del éxito o no de la última versión de la plataforma. Precisamente ha sido siempre Apple la marca que no ha dudado en sacar pecho con este índice, empleándolo sin piedad contra Android, el sistema operativo de Google completamente estratificado en un peligroso cúmulo de versiones que se convierten en una auténtica pesadilla para los desarrolladores.

Pues bien, desde luego que las cifras de Apple son muy lejanas a la fragmentación de los de Mountain View, pero lo cierto es que a iOS 8 le ha costado dios y ayuda superar la frontera psicológica del 50%, y ahora se arrastra a velocidad de tortuga incrementando usuarios mientras suponemos que el equipo de desarrollo contiene el aliento.

La versión con más fallos

En realidad, el índice de adopción, aun siendo importante, es el menor de los problemas de iOS 8. En un mercado tan apretado y competitivo como el de los dispositivos móviles, la percepción del usuario es un intangible que vale oro, y aquí hasta la fecha Apple tenía un expediente inmaculado salvo lógicas excepciones.

Pero iOS 8 parece haberse convertido en algo más que una tacha anecdótica en la trayectoria de la plataforma: esta versión luce ya el galardón de ser la que más fallos presenta para los usuarios. Y no crean que por poco: se calcula que iOS 8 es un 60% más inestable a ojos del usuario que iOS 7, medida la inestabilidad en los fallos, resets espontáneos y apagones que presenta. Esta cifra sorprende, sobre todo a un usuario tan de nicho como el de la casa, y tan acostumbrado a una calidad extrema.

¿Ha habido una relajación premeditada en el control de calidad para adelantar el lanzamiento de las nuevas versiones o bien se trata de un mal control de calidad? No se sabe a ciencia cierta qué está sucediendo pero todavía algunos se frotan los ojos tras asumir que alguien en Apple dio luz verde a una actualización menor que dejó sin línea a los primeros usuarios que corrieron a actualizar sus iPhones.

Aunque en esto de los índices de adopción, todo depende de las perspectivas y Apple no duda en recordarlo. En una de sus últimas Keynotes, Craig Federighi presentó un humillante gráfico en el que mostraba cómo iOS 8 había logrado alcanzar un 48% de usuarios en base instalada en menos de un mes, mientras que Kit Kat, se quedaba en apenas un 25% en casi un año.