BlackBerry Classic, el retorno de un gigante
Un 'smartphone' con teclado físico y enfocado al mundo de la empresa. BlackBerry quiere recuperarse y piensa hacerlo con un modelo que recuerda a sus días de éxito
Ya lo dijimos en su momento: John Chen no ha llegado para hacer experimentos, sino que quiere ganar su particular partida. Y no es una mano fácil precisamente. BlackBerry ha sido uno de los colosos que más estruendo causó al caer, pero de las cenizas están reviviendo grandes marcas con nuevos estilos de dirección a los que no les tiembla el pulso a la hora de tomar medidas desagradables y, sobre todo, rompedoras.
En esta nueva escuela encontramos a gestores transgresores como a Satya Nadella, que está devolviendo la alegría a Microsoft en el mercado de consumo, pero también al enigmático nuevo CEO de la firma canadiense. Ya dejó claro que no le tiembla el pulso a la hora de arriesgar en las decisiones, y donde muchos verían un suicidio en comercializar un móvil como el Passport, nuestro protagonista encontró la luz de la esperanza con un terminal que entusiasmó en su estreno. Pero el Passport era sólo el primer acto de una obra que va a dar mucho que hablar. Y de la que ahora conocemos la siguiente entrega, en la misma línea de transgresión.
Porque… no nos vamos a engañar: que la siguiente novedad de la casa sea un modelo compuesto por pantalla y teclado físico puro y duro es de un arrojo que pocos asumirían. La firma de Waterloo no niega este guiño a sus días de gloria y sin complejos, ha bautizado a su nueva estrella como Classic.
Puede pestañear todo lo que quiera pero está ante un auténtico déjà-vu, aunque no tanto. BlackBerry respira nuevos aires y en esta maniobra orquestada por Chen, este modelo vuelve a reivindicar la fórmula de éxito que en su día les encumbró (un smartphone con teclado físico) pero incorporando todas las mejoras posibles de los nuevos tiempos. Un difícil matrimonio que parece muy bien avenido a la vista del aspecto del nuevo equipo.
Idéntica por fuera, pero rompedora por dentro
Classic supone un extraño beso entre el pasado y el futuro, y con franqueza, ya no nos atrevemos a criticar la maniobra por peregrina. La firma tiene entre sus fieles auténticos devotos, y los que todavía llevan en sus bolsillos las incombustibles Curve, recibirán con los brazos abiertos esta coherente alternativa. Classic es una Curve modernizada en lo tocante al chasis, y de hecho la denominación inicial del modelo era Q20, como evolución del Q10.
El acabado es impecable y el fabricante ofrece a su mercado un producto de elevadísima calidad y dirigido al consumidor de smartphones premium. No se deje llevar por las apariencias: Classic es un móvil de calidad y como veremos, no apto para todos los bolsillos. Y tampoco piense que el hardware es una burda copia de versiones anteriores: la firma ha aprovechado para mejorar el teclado, sosteniendo que la escritura ahora es mucho más precisa, y como cabía suponer, la pantalla es táctil y la batería excelente.
Sin embargo, lo mejor está en su interior: el smartphone equipa la última versión de BlackBerry OS, una de las mejores plataformas móviles del mercado, que además permite ejecutar aplicaciones Android.
Como afirman en Techcrunch, que nadie se espere colas interminables de hipsters deseando salir de la tienda entre aplausos con un terminal recién horneado. No es el mercado de BlackBerry, y les ha costado reconocerlo. La firma se dirige a un nicho en el que se le quiere, pero sobre todo se le respeta: el mercado empresarial, y seguro que cosecha unos sólidos resultados que ayudarán a apuntalar la remontada in extremis que está protagonizando Chen.
Así que ya sabe, si ha pensado en jubilar su fiel Curve, el próximo 17 de diciembre se lanzará esta nueva joya y a un precio doloroso para muchos: 450 dólares por un móvil con teclado… aunque tal vez deberíamos aprovechar el claim de la firma, que nos habla del “móvil en el que confías, con una potencia que ni te imaginas”.
Ya lo dijimos en su momento: John Chen no ha llegado para hacer experimentos, sino que quiere ganar su particular partida. Y no es una mano fácil precisamente. BlackBerry ha sido uno de los colosos que más estruendo causó al caer, pero de las cenizas están reviviendo grandes marcas con nuevos estilos de dirección a los que no les tiembla el pulso a la hora de tomar medidas desagradables y, sobre todo, rompedoras.