Hey HTC, ¿quién quiere una cámara sin pantalla y sin visor?

En el mundo de la tecnología cuando un producto se vende como las rosquillas todo el mundo intenta copiarlo o incluso reinventarlo. Eso es exactamente lo que ha sucedido con las GoPro. Su enorme éxito ha desatado una fiebre entre diversas marcas por lanzar sus propias cámaras de acción. Los últimos en unirse a esta competición han sido HTC, algo bastante curioso teniendo en cuenta que desde su fundación en 1997 esta empresa sólo ha vendido móviles y tabletas.

La Re Camera tiene un diseño peculiar que busca redefinir el concepto de cámara de acción. Al igual que la Polaroid Cube, de la que hablamos en su día, está pensada para los que quieren captar fotos y vídeos al dar un paseo en bicicleta o bañarse en la piscina, aunque mediante una pinza también puede engancharse a la ropa y grabar todo lo que pasa frente a nosotros.

Vamos, que la RE Camera no está ideada para aquellos que necesitan una cámara dura como las piedras y que pueda sumergirse a gran profundidad, sibienes cierto que armada con algún accesorio puede mejorar su dureza.

¿Existe un mercado para cámaras como esta? Seguramente si, pero el precio es fundamental si se quiere llegar a un público más o menos amplio. Los 229 euros que costará en España nos parece un precio excesivo.

Incluso GoPro se ha rendido a la evidencia y ante la feroz competencia de otras marcas acaba de lanzar un modelo, la GoPro Hero, que cuesta 149 euros, una cifra que está por debajo de los precios del resto de modelos que la empresa comercializa, aunque esta versión prescinde de la conexión wifi, una función de la que si dispone la RE Camera.

El problema de encuadrar a ciegas

Algo que exaspera a algunos cuando usan una GoPro es que estas cámaras hasta hace unos días no incorporaban de serie una pantalla para encuadrar, aunque estose acaba de remediar en una de las dos versiones de la nueva GoPro 4, que ya cuenta con pantalla táctil. Pero, eso sí, no es precisamente barata, pues cuesta 349 euros.

La ausencia de una pantalla en muchas cámaras de acción algunos la justifican por el amplio campo de visión que abarcan sus objetivos, un argumento que se cae por su propio peso cuando uno descubre al descargar las fotos y grabaciones de vídeo que las imágenes torcidas son bastante frecuentes.

Hasta ahora la única forma de enmendar esto era conectando la cámara vía wifi al móvil para que la pantalla haga de visor, aunque lo cierto es que incluso con esa técnica resulta complicado lograr un encuadre preciso. La RE Camera también se vale de esa tecnología para que podamos componer la imagen que vamos a captar.

Eso sí, en el caso de que queramos prescindir del móvil y encuadrar a ojo el diseño de la RE Camera resulta muy práctico, pues es posible cogerla firmemente. Algo que supone una gran ventaja frente a las GoPro, ya queestas últimas no destacan precisamente por una ergonomía que permita sujetarlas a pulso fácilmente, sino que están sobre todo ideadas para ser usadas con los múltiples accesorios que fabrica la empresa.

Otro punto a favor de RE Camera es que algunos valorarán su cuidada estética minimalista, pues su aspecto se aleja de las formas rudas de las GoPro. También sus accesorios tienen un diseño bien pensado. De hecho, cosas como su base de cargarecuerdan bastante a los impolutos diseños de aparatos electrónicos que para Braun realizara el diseñador Dieter Rams.

Una ventaja más de la RE Camera frente a las GoPro es que no necesita de ninguna carcasa para poder sumergirla en el agua, aunque la resistencia a las inmersiones sólo da para un chapuzón en la piscina, pues no puede sumergirse a más de un metro durante más de media hora.

Respecto a sus características técnicas, la cámara tiene un sensor CMOS de 16 megapíxeles con el mismo tamaño que el de la inmensa mayoría de cámaras compactas: 1/2.3”, lo queno es un buen síntoma, pues nos tememos que tanta resolución repercutirá de forma negativa al captar imágenes con poca luz. Hubiese sido mucho mejor optar por menos megapíxeles para mejorar las imágenes nocturnas.Aunque es cierto que muchas de las fotos que captemos con la cámara tendrán que ser reencuadradas en el móvil o en el ordenador. Sólo de esa forma lograremos enderezar las tomas torcidas que captemos a ciegas. Para eso si que vienen bien los 16 megapíxeles.

A la hora de grabar vídeo la cámara capta 30 imágenes por segundo con resolución Full HD 1080p, aunque dispone de un modo para grabar imágenes a una velocidad cuatro veces más lenta de lo normal (120 fps) si reducimos la resolución de la grabación a HD 720p. Respecto a la capacidad de almacenamiento hay que decir que cuenta con una memoria interna de 8 Gb que puede ser ampliada mediante una tarjeta de 128 Gb. Más que suficiente.

Usando la base de carga que se vende por separado, la cámara también puede ser útil para retransmitir vídeo en streaming. De esa forma podemos utilizarla para vigilar desde el móvil una habitación en la que duerme un niño o incluso toda una casa, algo que para algunos resultará bastante útil.

Sobre la duración de su batería interna, ésta según el fabricante permite grabar vídeo durante 1 hora y 40 minutos a máxima resolución, aunque probablemente la cifra sea inferior si la usamos conjuntamente con el móvil conectándola vía wifi.

En conclusión, la RE Camera no es una mala idea pero cuesta imaginar quéclase de gente puede estar interesada en ella al precio al que la vende HTC. Sobre todo teniendo en cuenta que existen alternativas mucho más económicas, como la Polaroid Go, ya quelos 100 euros que cuesta esta última convencerán a muchos de los que quieren jugar un poco con una cámara de acción sencilla.

Por eso el éxito de la RE Camera dependerá en gran medida de su diseño y su estética, dos aspectos que con frecuencia pesan más que muchas características técnicas. También será importante comprobar la calidad de imagen que la cámara sea capaz de proporcionar, algo que de momento es un misterio.