Del concepto al 'market': ¿Cuánto cuesta desarrollar una 'app'?

Actualmente, en España hay 22 millones de usuarios activos de aplicaciones y se descargan cuatro millones de estas herramientas al día. La media de apps por cada smartphone es de 24, mientras que en las tabletas es de 31.

¿Mucho? Nuestro país no es una excepción. El mercado de las aplicaciones parece haberse convertido en la nueva gallina de los huevos de oro. Según Gartner, las tiendas de aplicaciones móviles alcanzarán este año un total de 102.000 millones de descargas anuales.

Solo en Cupertino, cada segundo que pasa 800 aplicaciones salen de sus servidores para instalarse en un iPhone o un iPad. Los ingresos por otra parte, serán de 26.000 millones de dólares.

Hacerlas sin embargo, es otra historia.

Las aplicaciones son programas que se instalan en los dispositivos móviles y proveen acceso instantáneo a contenido específico de manera fácil y sin necesidad de buscar en internet. Las hay de todos los tipos. Desde juegos como el famoso Angry Birds (una de las que más descargas ha tenido), hasta corporativas. El sitio de subastas en línea eBay por ejemplo, asegura que 15 millones de personas en el mundo descargan su aplicación para iOS en 190 países y en ocho idiomas diferentes.

Pero no todas cuestan lo mismo. Un simple vistazo en internet sirve para darnos cuenta de que los precios varían, y mucho. Hacer una aplicación más o menos sencilla puede costar en algunos sitios la friolera de 32.000 euros. Este precio se multiplica si se decide lanzarla en varios sistemas operativos. En este sentido, hay que tener en cuenta que en España, Android es la plataforma predominante. A mucha distancia se encuentra iOS y por debajo Windows Phone y BlackBerry.

La duda de muchos usuarios que se quieren aventurar en este mercado es, ¿se puede hacer por cuenta propia?

"¿Quieres una 'app'? No tienes que ser un experto"

"Crea tu propia aplicación sin necesidad de tener conocimientos de tecnología". "Cómo hacerte tu propia app". "Diseña tu aplicación totalmente gratis". "¿Quieres una app? No tienes que ser un experto". Bajo este tipo de lemas, decenas de páginas web se anuncian en internet para ayudar a los usuarios a tener su propia aplicación.

Un ejemplo lo tenemos en apps-builder.com. Esta página está teniendo tanto éxito que ya ha salido en medios tan prestigiosos como Wired, The Next Web o Cnet. Desarrollan más de 6.000 apps al mes y generan alrededor de 12 millones de leads a sus clientes. En esta página el usuario puede probar a hacer su propia herramienta gratis durante 14 días o, acceder a las tarifas, que cuestan desde 19 dólares al mes para los servicios más básicos, hasta los 799 dólares para otros más avanzados.

"Generalmente, este tipo de páginas crean aplicaciones genéricas muy útiles para muchas cosas, pero que sin embargo no son muy específicas. Una misma plantilla puede servirte para hacer una carta para un restaurante o una lista de productos como por ejemplo ropa. Estas webs son poco flexibles pero para aquellos usuarios que solo quieran una aplicación básica, puede servir", explica a Teknautas Carlos García de la Barrera, desarrollador de Lextrend, empresa española especializada en soluciones de movilidad, desarrollo de aplicaciones y páginas web.

"Lo primero que tiene que saber el usuario es qué es lo que quiere hacer", añade Manuel Maldonado, director técnico de la misma compañía. "Si quiere algo estándar ésta es su página. Aunque también puede acudir a un freelance. En este caso, lo normal es que le cueste como mucho 2.000 euros" explica.

'Apps', un negocio del que muchos se están lucrando

Todos los expertos coinciden en que el precio de una app depende del tiempo que conlleve hacerla. Sin embargo, en internet las cifras varían y mucho dependiendo de qué empresa se trate.

"Los precios suelen ir de acuerdo a las horas de trabajo, aunque sí es cierto que no todos cobran lo mismo. Para evitar problemas se recomienda seguir el método scrum. Este método de trabajo que llevamos a cabo en Lextrend, permite que el cliente vaya viendo todo el desarrollo del proyecto. El desarrollador lo desglosa en pequeñas funcionalidades y todas las semanas realiza entregas parciales para que vaya observando cómo se construye desde el principio hasta el final. De esta forma está más al tanto y puede llevar un mayor control", concluye Manuel Maldonado.

Pero tampoco hay que olvidarse de que todo lo que suponga añadir utilidades a la herramienta, supone tiempo. Y tiempo es dinero. Hay aplicaciones que se basan simplemente en plantillas que no tienen detrás un modelo de datos complicado, pero otras incluyen algoritmos matemáticos o una comunicación avanzada entre usuarios. Por no mencionar la innovación.

"Hacer un Candy Crush no es gratis. Hacer un WhatsApp tampoco. Si quieres un desarrollo innovador tienes que pagarlo porque lleva mucho tiempo. Si está en una plantilla predeterminada, malo. Porque significa que no es innovador", explica al respecto Carlos García de la Barrera.

De cualquier forma, no hay que olvidar que crear una aplicación no es sinónimo de éxito en los distintos markets. Más bien todo lo contrario. Cerca de dos tercios del software presente en la tienda de aplicaciones de Apple no se ha descargado nunca. Un total de 400.000 apps son invisibles para los usuarios, no aparecen en el ranking y nunca han obtenido una sola descarga.