No solo en fútbol: Luz Rello es la mejor científica joven de Europa

Luz Rello es lingüista, máster en procesamiento de lenguaje natural y -casi- doctora en informática. Puede resultar una mezcla un tanto extravagante, pero gracias a ella -y a una ingente cantidad de trabajo de investigación- la Unión Europea la ha concedido el European Young Research Award (EYRA), un galardón que la distingue como la mejor científico joven del año en el ámbito comunitario. El jurado internacional se ha decantado por su candidatura entre las decenas presentadas por lo revolucionario de su idea: aplicar la tecnología más avanzada para medir objetivamente los problemas que genera la dislexia, uno de los temas más abordados por la literatura científica.

"La dislexia tiene un montón de estudios publicados, porque es un problema que tocan muchas ramas, como la medicina, la pedagogía, la psicología... lo novedoso de mi trabajo es que he empleado técnicas como el facial expression analysis y el eye tracking para localizar con precisión los elementos que dificultan la lectura de estas personas", explica a Teknautas esta madrileña de 28 años que investiga en la Universidad Poumpeu Fabra de Barcelona. La dislexia es un trastorno que dificulta la lectura y comprensión de textos. Médicos y neurólogos ponen el foco de estudio en el cerebro, mientras que la pedagogía se centra en la rehabilitación del sujeto. 

Rello, por su parte, ha empleado sus conocimientos técnicos para determinar en qué puntos del texto se atascan los disléxicos y corregirlos. El uso del eye tracking, o tecnología de seguimiento de la mirada, le ha servido para conocer las partes conflictivas. Diversos estudios han demostrado que el ser humano no lee todas las letras de cada palabra, sino que las revisa contextualmente hasta que da con su significado. Es por etso que comrpenedmos etsa farse, anuque las palbaras etsén mal ecsritas. 

No obstante, Luz ha comprobado que los "saltitos" entre palabras de las personas con dislexia son más cortos en espacio y más largos en el tiempo. "Hay unos cambios significativos en la forma de leer de los disléxicos. Leen más despacio y comprenden peor, es una cuestión visual que se puede corroborar objetivamente gracias al eye tracking. -sostiene la investigadora- También hemos descubierto que elementos como la tipografía, los colores o el tamaño de la letra influyen en su velocidad lectora y el contenido, ya que los disléxicos tienen dificultades con las palabras nuevas". 

En el vídeo inferior se puede seguir el recorrido tipo que hacemos con la mirada al enfrentarnos a un documento.

Todas estas conclusiones están avaladas con el uso de los sistemas de reconocimiento de expresiones faciales, que denotan las partes que causan mayor estrés durante la lectura. "Ha sido revelador, porque la tecnología nos dice donde lo pasan peor al leer. De hecho muchas personas experimentan dificultades con elementos del texto que, luego al preguntarles, no identifican como problemáticos", sostiene la madrileña.

Pero Rello no se ha conformado con esto, sino que ha creado un modelo, DysWebxia, que implementa cambios en los elementos relevantes para el disléxico. El proyecto se articula en tres apps. Dos están financiadas por la universidad: ideal GROUP Reader, un lector para Android que permite la lectura del texto y la sustitución de palabras por sinónimos entre otras características y text4all, un servidor que ofrece una versión accesible para disléxicos de cualquier sitio web. Tiene por último un proyecto personal junto a dos amigas que pronto cristalizará en la app para iOS Dyseggxia: "Es de base lingüística. Hemos pedido a los niños que nos envíen textos; de ahí he podido obtener un patrón de sus errores, de modo que podemos ofrecer ejercicios divertidos y con recompensas", dice Rello. Las tres aplicaciones son gratuitas.

La que es hoy una referencia entre los investigadores jóvenes de Europa pudo haberse marchado del país hace dos años. Lo impidió Ricardo Baeza-Yates, vicepresidente de Yahoo! Research Europa y a la sazón supervisor de su investigación, que la convenció para que permaneciese en Europa descartando ofertas mucho más lucrativas de Estados Unidos. Actualmente apura los últimos meses de una beca que le concedió la Generalitat y de la que le han recortado el 10%. Rello, que se reconoce una "amante de España", no sabe si podrá seguir investigando aquí: "Podría ir a trabajar para IBM en Brasil, por ejemplo, pero no quiero irme. Lo que me temo es que no voy a tener otra opción. En algún momento querré formar una familia... y bueno, mi objetivo es seguir haciendo cosas que ayuden a las personas, desde el campo profesional que sea", concluye.

Precisamente en esta semana que tanto hemos celebrado poseer los mejores futbolistas jóvenes del continente, sería de recibo acordarnos también de nuestras otras promesas de élite, ésas que juegan para hacer mejor la vida de todos.