Llega el 'súper reloj'

¿Un reloj que sólo da la hora? Un desperdicio inasumible por parte de un geek, pero por fortuna, hay fabricantes dispuestos a ocupar ese preciado espacio en la muñeca con propuestas mucho más ambiciosas. Hasta la fecha, nos hemos hecho eco de relojes futuribles, o experimentos realizados por fabricantes sin un horizonte claro de comercialización. No es el caso, desde luego, del reloj que les proponemos hoy. Se trata del conocido fabricante Fossil, que ha anunciado al mundo la inminente comercialización de un innovador reloj que hará las delicias de los más tecnófilos. Ha sido bautizado como MetaWatch, y proporciona mucha más información que un simple reloj, en un producto que ha hecho de la practicidad su principal bandera.

Un centro de información

Poco a poco los fabricantes van entendiendo que los smartphones -cada vez más potentes y capaces- se han convertido en el centro neurálgico de datos de su propietario. Son pequeños ordenadores más que teléfonos, y siempre acompañan a su dueño allá donde vaya. Pese a ser compactos y cada vez más ligeros, uno de sus principales inconvenientes es que siempre los llevamos en el bolsillo, y para consultar el correo o la predicción meteorológica necesitamos acceder a ellos. En realidad ya no. A este mercado comodón y vanguardista se dirige MetaWatch: se trata de un reloj con una generosa pantalla que nos ofrece diversa información de gran utilidad. Su principal ventaja es que proporciona la información al instante y para acceder a ella únicamente tendremos que girar la muñeca.

Lo cierto es que el reloj es una pantalla tonta que replica el contenido del smartphone, auténtico cerebro del conjunto. Además de la hora, la predicción meteorológica y las llamadas, podremos conocer el número de correos y SMS recibidos, así como las primeras líneas de su contenido. Ciertamente, un tiempo ganado si lo comparamos con el que se requiere para sacar el móvil del bolsillo, desbloquear la pantalla y consultar esta información. Para los más despistados, buenas noticias: el móvil vibra con la llegada de una llamada y nos indica la identidad del interlocutor. Pero lo mejor del asunto es que todas las alertas son configurables desde una aplicación en el móvil (por el momento, únicamente Android), y la conexión se lleva a cabo de forma inalámbrica mediante Bluetooth.

Decíamos que este reloj es mucho más que humo, y de hecho puede ya reservarse en la propia web del fabricante por un precio de 200 dólares. Hay dos versiones: una completamente digital y una segunda analógica (con una pantalla más pequeña), para los más preocupados por la estética. Es sumergible, su batería se espera que aguante una semana lejos del enchufe, y lo más interesante es lo que pueda llegar en un futuro, ya que los desarrolladores tienen las puertas abiertas para crear sus propias aplicaciones para este peculiar dispositivo. Su éxito o fracaso en el mercado es todavía una incógnita, pero saldremos de dudas a partir del 22 de agosto, fecha prevista para su comercialización.