Desarticulan una banda criminal de origen chino que blanqueó 105 millones de euros
Hay 15 detenidos y otros 15 investigados tras los 29 registros realizados en domicilios, asesorías fiscales y en naves y locales comerciales de varios puntos de Madrid y Barcelona
La operación CAISHENG ha permitido desarticular una organización criminal de origen chino que habría defraudado y blanqueado unos 105 millones de euros entre los años 2010 y 2017. En esa operación han participado agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, personal de EUROPOL y de la Oficina Nacional de Investigación del Fraude (ONIF) de la Agencia Tributaria.
La Fiscalía Especial contra la Corrupción y la Criminalidad Organizada y el Juzgado Central de Instrucción núm. 3 de la Audiencia Nacional coordinaron el operativo. Se ordenó la realización de 29 registros en domicilios, asesorías fiscales, locales comerciales y naves industriales, al igual que requerimientos de documentación dirigidos a varias sociedades y 24 sucursales bancarias.
La investigación se inició en el año 2018 en la Fiscalía Especial contra la Corrupción y la Criminalidad Organizada, y tiene su origen en un expediente sancionador que el Comité Permanente del Servicio de Prevención de Blanqueo de Capitales inició contra una entidad bancaria por una posible infracción a la Ley de Prevención de Blanqueo de Capitales.
Los ingresos en efectivo
Tal y como explica la Guardia Civil a través de un comunicado, en ese expediente se denunciaba la operativa llevada a cabo por cientos de clientes que realizaban ingresos en efectivo de fondos de origen desconocido. Acto seguido, transferían esos fondos principalmente a China, todo ello por un importe superior a los 2000 millones de euros.
Descubrieron un entramado de personas físicas y jurídicas relacionadas entre sí
De entre estos clientes, la investigación realizada por la Guardia Civil ha permitido identificar un entramado de personas físicas y jurídicas relacionadas entre sí, que contaban con asesoramiento fiscal especializado siempre de la misma persona.
Hasta el momento han sido 30 las personas investigadas, habiéndose procedido a la detención de 15 de ellas. Todo ello en los 29 registros practicados, en los que también se han intervenido cerca de 500.000 euros en efectivo, joyas y otros efectos de gran valor económico y de interés para la investigación.
A lo largo de la investigación, los agentes han podido corroborar la existencia de una organización criminal que, entre los años 2010 y 2017, y desde cuentas bancarias de sociedades instrumentales abiertas en siete entidades bancarias diferentes, se han estado transfiriendo al extranjero cantidades de fondos previamente ingresados en efectivo, por un valor superior a los 105 millones de euros.
Blanqueo de capitales
Para la comisión de los fraudes detectados, la organización habría creado sociedades instrumentales vinculadas al sector textil, sin actividad comercial alguna durante el periodo investigado, las cuales presentaban declaraciones tributarias fraudulentas aportando facturación falsa. Al frente de las mismas situaban a testaferros que realizaban los ingresos del dinero en efectivo que previamente había sido recaudado por parte de la organización.
Debido a las restricciones que encuentran en el sistema bancario vigente, los investigados estaban utilizando el método denominado "de compensación". Se trata de un sistema basado en la confianza entre las partes que, entregando una determinada cantidad de dinero, en este caso en España, a turistas, negocios, etc., esa cantidad es ingresada a la organización en China, sin necesidad de pasar por los controles bancarios ni fiscales nacionales.
Otra operativa detectada es una variante de este método de compensación denominada "Shopper", a través de la cual los investigados conseguían repatriar su dinero a China adquiriendo en España artículos de lujo para ciudadanos chinos, los cuales ingresaban el pago de dichos artículos en cuentas bancarias del país asiático titularidad de los residentes en nuestro país.
Enviaban dinero a China por medio de empresas y turistas que les ayudaban
La organización contaba también con un chalet utilizado para la explotación sexual de compatriotas chinas, llevándose a cabo esta parte de la investigación por la Sección de Trata de Seres Humanos de la UCO y consiguiéndose liberar a 6 mujeres de esa nacionalidad. Vivían hacinadas todas juntas en una sola habitación en unas condiciones de salubridad bastante precarias y vigiladas por cámaras de seguridad las 24 horas del día por sus explotadores, los cuales residían en otra parte del mismo chalet.
Estas mujeres han quedado bajo la tutela de una ONG, apoyadas en todo momento por intérpretes de su mismo idioma.
La operación CAISHENG ha permitido desarticular una organización criminal de origen chino que habría defraudado y blanqueado unos 105 millones de euros entre los años 2010 y 2017. En esa operación han participado agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, personal de EUROPOL y de la Oficina Nacional de Investigación del Fraude (ONIF) de la Agencia Tributaria.