Una mujer china de 103 años se recupera del coronavirus y sale del hospital

Una anciana de 103 años llamada Zhang Guangfen ha salido del hospital de Wuhan en el que se encontraba ingresada después de recuperarse del coronavirus de China del que se encontraba infectada. La mujer recibió un tratamiento de seis días de duración que ha servido para recuperarse y ha recibido el alta hospitalaria.

A sus 103 años, Zhang Guangfen se convierte en la mujer más anciana que se ha recuperado del Covid-19, al superar en dos años al paciente anterior. En declaraciones que recoge el Daily Mail, su médico, Zeng Yulan, explicó a la prensa local que la señora Zhang se curó en menos de una semana "porque no tenía muchas afecciones de salud subyacentes".

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El Confidencial

La anciana fue escoltada fuera del hospital por un grupo de médicos que la habían atendido desde que el pasado 1 de marzo fuera diagnosticada con el Covid-19 en el Hospital Liyuan de la Facultad de Medicina de Tongji. Cuando ingresó en el centro hospitalario, Guangfen se encontraba en estado crítico y apenas podía comunicarse con los médicos.

Recuperación milagrosa

Sin embargo, la anciana recibió cuidados las 24 horas del día y, poco a poco, fue mejorando. Las enfermeras se turnaban para alimentarla con una cuchara y cambiarle los pañales, algo a lo que la mujer siempre respondía con una sonrisa, según una de las profesionales que la atendió: "A la abuela le encantaba que las enfermeras le felicitaran. Ella sonreía y asentía cada vez que le decían que estaba muy guapa".

Se convierte en la persona más anciana que se ha recuperado del Covid-19

Finalmente, Zhang Guangfen se recuperó completamente y pudo abandonar el hospital para terminar de mejorar en su propia casa. No es la primera persona centenaria que consigue superar el coronavirus: un hombre, que acababa de cumplir 101 años, también ha conseguido recuperarse después de pasar una semana en el hospital.

En su caso, fue dado de alta la semana pasada después de pasar siete días en el centro hospitalario. Según la médico que lo atendió, Dai, que es como se llamaba el anciano, se encontraba "muy enérgico" cuando abandonó el hospital.