Las monterías, heridas por la crisis: menos cazadores y pagando mucho menos dinero

Azuaga, Badajoz. 8.205 habitantes, según el Instituto Nacional de Estadística. Hoy, 7 de diciembre. Para este municipio pacense(centro neurálgico de una zona denominadaCampiña Sur, que engloba a33.000 personas) es una jornada especial en su calendario. Es la Gran Montería de la Sierra de Azuaga.

“Es una de las monterías más conocidas de España; sobre todo por sus características, ya que el recinto no está vallado y la superficie para montear es de más de 2.900 hectáreas, una de las más grandes, o la más grande, del país”, dice Martín Sánchez. Será o no la de más extensión de cuantas se celebran en en el país, pero para Azuaga es un importante motor económico.

Sánchez, del Ayuntamiento de Azuaga, se lamenta de que no sea el mejor momento para la celebración de una jornada como ésta. “Este año habrá menos monteros. Esta actividad cuesta dinero, es cara y muchos se han visto obligados a apretarse”. Un daño colateral más de la traída y llevada crisis económica que ha hecho mella en los bolsillos.

Pero, ante la acción, reacción; ante los problemas, soluciones.Los organizadores de la Montería -el Ayuntamiento de Azuaga pone a disposición su coto, la inmensa superficie de terreno en la que se desarrolla la actividad- han decidido bajar los precios: de los 500 euros por puesto del año pasado, a los 250 para los monteros locales y los 350 para los foráneos. “La cuestión es ajustarse en estos momentos, que no son los mejores, para ver si el próximo año los monteros pueden volver a meterse de lleno”.

“En estos días el pueblo se llena de todoterrenos.Siempre habían venido a participar algunos grupos de andorranos y de portugueses, pero este año, por los apellidos al menos, parece que no ha sido así”, certifica Martín Sánchez a El Confidencial.

La previsión es que hoy se den cita unos 170 monteros, distribuidos en distintas zonas del coto, frente a los 180 o 190 participantes que ha habido en los mejores tiempos. “Si una persona llega a fin de mes con lo justito… Antes había dinero, pero hoy no hay siquiera seguridad económica, por lo que los participantes se retraen más”, sentencia Sánchez.

El hecho de que esta montería sea abierta le da cierto alicente sobre otras, dado que supone una mayor dificultad para los cazadores pues los animales pueden moverse libremente a otras fincas colindantes.

La Gran Montería de la Sierra de Azuaga es “la cara del pueblo hacia el exterior. Antes se acababan rápidamente las plazas hoteleras disponibles enlos alojamientos del municipio y también de los cercanos. Ahora hay más retraimiento en el visitante. La montería siempre ha traído impulso económico, cenas, ventas en los comercios, adquisición de productos de la zona, animación en las calles…”, se lamenta Martín Sánchez.

De negocio, a casi un comido por lo servido. La Montería contrata para su buen desarrollo, según Sánchez, 50 realas, personal para sacar las carnes, mulas… Mucha inversión para, hoy, pocos ingresos.

La situación de la Gran Montería de Azuaga difiere poco de lo que sucede en el mundo de la caza nacional. Según fuentes de la Real Federación Española de Caza, el negocio para las empresas que se dedican a organizar cacerías "ha descendido en algunos casos hasta en un 60%, y algunas hasta han cerrado".

La Real Federación Española de caza tiene más de 370.000 federados (cifras de 2012), aunque "también se está notando cierto descenso en el número de federados. La caza, como todos los sectores, se está resintiendo de la crisis, entre otras cosas por una falta de relevo generacional", matizan las mismas fuentes.