Los curiosos nichos de mercado del negocio funerario

En una sociedad acostumbrada a vivir de espaldas a la muerte, el Día de Todos los Santos ha quedado marcado para el recuerdo de aquellos que ya no están entre nosotros. Y es que la vida, en palabras del filósofo Séneca, no es otra cosa que “el camino hacia la muerte”, un destino inexorable que no entiende de ciclos económicos, avances técnicos ni modas pasajeras. Se podría decir que, a nivel empresarial, la muerte es el más sólido de todos los negocios, y siempre hay nichos de negocio por explotar.

Manteniendo limpios los recuerdos

Una pequeña empresa de Murcia se ofrece para facilitar al ciudadano una de las tareas más macabras que existen: limpiar lápidas. Con la ayuda de las “nuevas tecnologías”, Eternalia mantiene nichos, panteones y fosas en el mejor estado de conservación posible, además de un eventual arreglo floral si el cliente así lo quisiera.

Sus servicios se ofrecen en prácticos paquetes que van desde la limpieza única de nicho (22,90€) hasta el mantenimiento mensual del panteón familiar (359,90€). Eternalia, además, oferta un servicio revolucionario que pasa por la colocación de paneles solares en la tumba para generar energía sobre un foco que ilumina la lápida… a perpetuidad.

El mejor amigo, el final más digno

Los entierros de mascotas están en su máximo auge, no solo por el vínculo emocional que une a dueño y mascota, sino porque la ley prohíbe tratar los restos animales como si de basura común se tratase. En España, en cuyo censo figuran casi 20 millones de mascotas, ya existen varios cementerios y empresas dedicadas, como Hadescan, que ofrece un servicio integral tras la muerte de un animal querido. Recogen el cuerpo, lo transportan, ponen una sala de velatorio al servicio del cliente para  incinerarlo y entregar a los dueños los restos en una urna. Disponen de un amplio catálogo de recipientes clasificados por material, ya sea alabastro, bisutería, cerámica, latón o porcelana.

El único cementerio para animales domésticos de Madrid se encuentra a la altura de Arganda, en el kilómetro 30 de la carretera de Valencia. Conocido como "El último parque", su web muestra imágenes de mascotas recientemente fallecidas sobre los recuerdos por escrito de sus sentidos dueños, que por poco más de 200 euros se benefician de la recogida, la lápida y la fosa donde descansarán los restos del animal. Las tarifas no solo varían con respecto a los materiales empleados, también cuenta el tamaño del animal, dado que no es lo mismo enterrar a una serpiente que a un caballo.

Un diamante con las cenizas del abuelo

Si los recuerdos son preciosos, ¿por qué no convertirlos en piedras preciosas? La empresa suiza Algordanza extrae el carbono de las cenizas fúnebres para crear diamantes sintéticos, únicos e inigualables. Hasta ahora empresas de Estados Unidos habían desarrollado métodos similares añadiendo aditivos a la piedra final.

Sin embargo, Algordanza ha partido de estudios de la Academia de Ciencias de Moscú para conseguir un proceso óptimo de purificación que permite que la joya esté 100% compuesta por cenizas. El proceso toma entre cinco y seis semanas y su precio oscila entre los 3.000 y los 11.000 euros dependiendo del quilataje de la piedra.

El Facebook de los muertos

Epilogable es una nueva red social, con sede en Barcelona, que tiene por objeto "organizar la propia despedida, recordar y compartir el duelo por la desaparición de un ser querido o rendir un tributo especial a alguien memorable", explica la organización. Se trata de una suerte de Facebook que, en lugar de estar enfocado a las amistades, se centra en rendir tributo a personas fallecidas.

Pero no solo funciona a nivel contactos, sino que también se puede compartir el recuerdo de famosos. En Epilogable han creado un perfil de Steve Jobs a modo de muestra donde los usuarios le envían no solo comentarios de afecto, sino también imágenes y vídeos relacionados con episodios de su vida.

Una cremación respetuosa con el medio ambiente

La última tendencia consiste en mantener los ideales ecológicos hasta el último suspiro. Y para que se cumpla esta voluntad están empresas aseguradoras como ERGO, del grupo DKV, que ofrece una póliza de decesos ecológica que incluye recordatorios en papel reciclado, ataúdes en madera certificada y la utilización de tanatorios con homologación medioambiental. Según los creadores de la póliza, esta "nace de la creciente demanda por parte de la sociedad de soluciones que minimicen el impacto ambienta de la actividad humana".