Una treintena de afectados por Air Comet se unen en una protesta en Barajas

Una treintena de argentinos y colombianos, afectados por el cierre de Air Comet y con billetes para volar estas Navidades a sus respectivos países, se unieron hoy en el aeropuerto de Madrid-Barajas para protestar por haberse quedado en tierra. El Gobierno español dio ayer por cerrada la operación de vuelos especiales hacia Argentina y Colombia, después de que los aviones fletados desde Madrid hacia Buenos Aires y Bogotá el miércoles despegasen con 83 y 100 plazas libres, respectivamente.

Los afectados argentinos cortaron hoy durante cinco minutos el tráfico en un tramo del vial de llegadas del aeropuerto, al tiempo que golpeaban carteles de la compañía Air Comet, que previamente habían descolgado de los mostradores de facturación.

Estos viajeros manifestaron su enfado por no ser informados del avión fletado por el Ejecutivo español a Buenos Aires, igual que los quince colombianos concentrados hoy en Barajas, que tampoco se enteraron de su vuelo por "la falta de información y descoordinación" de la que responsabilizan al ministerio de Fomento, según explicaron los afectados.

"Queremos volar, queremos volar, a Buenos Aires y Bogotá", corearon hoy los afectados argentinos y colombianos sentados en el suelo del aeropuerto, mientras algunos del grupo también lanzaban aviones de papel.

Mientras, ciudadanos peruanos que se han visto obligados a celebrar la Nochebuena en el aeropuerto madrileño se mostraban hoy más optimistas ante la perspectiva de salir este sábado en el último avión que fletará el ministerio de Fomento, con destino a Lima.

También hoy llegaron a Barajas, en uno de los vuelos fletados por Fomento, los viajeros que quedaron atrapados en Argentina. En declaraciones a Efe, manifestaron su desilusión por no poder compartir la Navidad con sus familias y se quejaron de haber pasado la Nochebuena en el avión.

Los viajeros, que aseguraron que el avión volaba medio vacío, indicaron que muchos tenían previsto el regreso los días 30 ó 31, pero que si no aprovechaban este vuelo, estaban obligados a pagarse otro billete de vuelta. Horas antes, la práctica totalidad de los ecuatorianos, que tenían billetes de salida a Quito en estas fechas navideñas, recibieron sus tarjetas de embarque para volar hacia su país.

La aerolínea Air Comet canceló sus operaciones el lunes 21, dejando en tierra a unas 7.000 personas, presentó un expediente regulador de empleo para la totalidad de la plantilla, 666 trabajadores, y anunció la presentación de un concurso de acreedores (suspensión de pagos), para afrontar deudas estimadas en torno a los 100 millones de euros (unos 144 millones de dólares).