La Generalitat emprenderá acciones legales contra la ONG española acusada de ‘traficar’ con niños del Congo

La Generalitat de Cataluña anunció que emprenderá acciones legales contra la ONG ADIC, encargada de gestionar las adopciones internacionales en Congo, por posibles delitos en su gestión, tras la noticia publicada este miércoles en El Confidencial, en la que se informaba de que esta organización catalana había sido denunciada por ‘robar’ niños del Congo para entregarlos en España. “Estamos recogiendo toda la información suficiente por si es oportuno presentar una denuncia contra esta entidad", aseguró el miércoles la consellera de Acción Social y Ciudadanía, Carme Capdevila.

ADIC funcionó como entidad colaboradora del Gobierno catalán entre febrero y junio de 2006, momento en que fue suspendida por el departamento de Acción Social por supuestas “irregularidades en su gestión”. A partir de entonces la Generalitat se hizo cargo de las adopciones pendientes y la resonancia del caso se fue apagando.

Sin embargo, el diario francés Liberation destapó el caso de Cherlin, un niño cuya adopción a un padre español había sido autorizada por las autoridades congoleñas. Cuando estaba a punto de viajar a España en mayo, el supuesto padres biológico denunció la situación e impidió que se le otorgara el visado para viajar a España. Según aseguró a El Confidencial el responsable de la ONG congoleña Adhuc, Loamba Moaré, quien denunció este caso en su país, ADIC se dedicaría a sustraer niños, haciéndolos pasar por huérfanos, para trasladarlos a España y darlos en adopción sin el consentimiento de sus padres biológicos.

La directora de ADIC, Cintia Andreu, rechazó a preguntas de El Confidencial cualquier acusación de tráfico de niños, y afirmó que la adopción de Cherlin se hizo con todas las autorizaciones necesarias del Gobierno congoleño y el aval de la Generalitat.

Seis familias todavía esperan a su hijo

Un año y medio después de la suspensión de ADIC, todavía hay seis familias a la espera de su hijo adoptivo. Además, la situación se ha agravado desde que el pasado jueves el Gobierno congoleño decretara la prohibición de las adopciones internacionales. “De momento, ha sido un anuncio del presidente de Congo, pero nosotros no tenemos constancia de que se hayan paralizado. De todas formas, estas adopciones estaban ya cerradas, y lo que se intenta es finalizar con los trámites que faltan y que las familias logren tener a sus hijos en casa”, explicaron fuentes de la Generalitat. “Seguramente esta decisión ha sido motivada por la situación internacional y el recelo de las autoridades congoleñas”, añadieron.

Este complicado proceso de adopción suele durar alrededor de un año y los papeleos acarrean grandes costes económicos. Primero, el país de origen debe constatar por medio de una resolución judicial que el niño que va a ser adoptado está abandonado, o bien no tiene familia, o su entorno está desestructurado. Una vez acreditada esta situación, la Embajada española da el visado al niño para que pueda viajar a España. “Es el gobierno del lugar de origen el que fija lo que cuesta los trámites, es decir, certificados, las pruebas sanitarias, etc. Y a esto hay que añadir los viajes, normalmente dos, que los padres adoptivos tienen que hacer al país para conocer al niño, su manutención cuando todavía esta allí, etc”, informaron desde el departamento de Acción Social.

Pero, en este caso, el proceso se ha alargado exageradamente. “Las familias son las que realmente han sufrido toda esta situación”, reconocieron desde el Gobierno catalán. Y la odisea todavía no se ha acabado para seis de esas familias, que tendrán que esperar, no se sabe hasta cuándo, para ver a su hijo en casa.