Prorrogan 18 años la prisión provisional de King por la muerte de Sonia Carabantes

La Audiencia Provincial de Málaga ha acordado que al británico Tony Alexander King, condenado por la muerte de la joven de Coín Sonia Carabantes, se le prorrogue la prisión hasta el límite máximo de 18 años de cárcel mientras se resuelve su recurso de casación presentado en el Tribunal Supremo. La Sección Segunda de la Audiencia Provincial ha acordado esta prórroga de cárcel "por la gravedad de los hechos y la alarma social", según el auto.

El tribunal señala en los fundamentos jurídicos que "está justificado" que se pueda hacer uso de la facultad excepcional de prolongar la prisión provisional del acusado "por la complejidad de algunas de las cuestiones que se plantearon en la instrucción y en el enjuiciamiento de la causa". Esta sala destaca que "sin perjuicio de que deba dilatarse lo menos posible la prisión provisional", en este caso "está justificada su reclusión por la gravedad de los hechos y la alarma social", se reitera en la resolución.

King fue condenado a 23 años de prisión por el delito de asesinato, ocho por el de agresión sexual y otros cinco años por detención ilegal y se le impuso el pago de una indemnización de 300.000 euros a los padres de la joven -150.000 para cada uno-, por daños morales. Por ello, los magistrados entienden que se puede prorrogar la prisión provisional hasta el máximo legal, que es la mitad de la pena impuesta en la sentencia y que en este caso es de 18 años como máximo.

En su día, la sentencia consideró probado que King esperó, escondido, a la joven en las proximidades de su casa de Coín y la abordó y golpeó "en todo el cuerpo" hasta dejarla semiinconsciente, tras lo que la introdujo en el maletero de su vehículo y la trasladó hasta un paraje solitario del término municipal de Monda (Málaga).

Una vez en el lugar, sentó a la joven en el asiento trasero del coche, la desnudó y realizó tocamientos a la vez que la golpeaba en la cabeza y tronco, ocasionándole numerosas lesiones "capaces por sí solas de causarle la muerte". Posteriormente, la estranguló con la camiseta que llevaba la joven ya inconsciente, lo que le produjo la muerte, y trasladó su cadáver a una explanada próxima, donde lo ocultó entre unas rocas.

Sonia Carabantes, de 17 años, desapareció en la madrugada del 14 de agosto de 2003 cuando regresaba a su casa tras asistir a la Feria de Coín y su cadáver fue encontrado semienterrado en el término municipal de Monda tras cinco días de intensa búsqueda en la que participaron centenares de personas.

Casi un mes después, el 18 de septiembre de 2003, King -natural de Londres y que el pasado agosto cumplió 40 años- fue arrestado en Alhaurín El Grande (Málaga) después de que su compañera sentimental informara a la Policía Judicial de la Guardia Civil que vio restos de sangre en la ropa del británico y arañazos en la cara la noche en que desapareció Sonia y que él había estado en la feria de Coín.

El perfil genético de Tony King, obtenido a partir de unos calzoncillos y de una colilla que estaban en su casa, coincide con las muestras obtenidas en la investigación del asesinato de Sonia Carabantes y en la de la muerte de Rocío Wanninkhof, desaparecida el 9 de octubre de 1999 en Mijas (Málaga).