'Love Island': la mansión mallorquina de la que todo el mundo habla en Reino Unido
Durante este verano, 12 solteros y solteras han convivido aislados del mundo en una lujosa villa de Sant Llorenç des Cardassar para el reality más visto de Reino Unido
El reality 'Love Island' se ha convertido en el mayor éxito televisivo de Reino Unido entre los espectadores jóvenes de entre 16 y 34 años. Durante los últimos dos meses, 12 solteros y solteras han convivido aislados del resto del mundo en una lujosa villa localizada a las afueras de Sant Llorenç des Cardassar (Mallorca). El objetivo no ha sido otro que encontrar el amor.
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Lo cierto es que todo el mundo en Reino Unido ha visto el programa o ha terminado hablando de él. Tras el Mundial de Rusia 2018, 'Love Island' ha sido uno de los espacios con mayor seguimiento y repercusión en las redes sociales. No es, por tanto, extraño el interés que ha despertado la villa que durante los últimos meses ha acogido a los protagonistas de este reality show.
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'Love Island' se ha convertido en el escaparate perfecto para promocionar esta villa, propiedad de un rico alemán. El complejo entero está en alquiler, aunque no resulta fácil cerrar su reserva. Según el diario 'The Sun', el precio mínimo para una estancia de una semana ronda las 3.000 libras (unos 3.300 euros).
Sin embargo, la villa ha sido especialmente personalizada para 'Love Island', por lo que muchas de las comodidades y de los lujos que se han visto en el reality no forman realmente parte de la casa, como por ejemplo la cocina exterior.
Finalizado el programa, los responsables del programa han tenido que devolver la villa a su estado original, por lo que han desaparecido algunos de los rincones y, por supuesto, el sistema de 72 cámaras que ha seguido todos los movimientos de los concursantes.
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Una de las partes que más llama la atención de la villa es su fachada principal, con un enorme tabique de vidrio que va desde el suelo al techo, permitiendo ver el hall de entrada. Las habitaciones son otras de las estancias que tampoco pasan desapercibidas.
Pero, sin duda, si hay una zona estrella en esta villa es su espectacular jardín, con un gran jacuzzi y una infinity pool que capta al instante la atención de cualquier turista. 'Love Island' ha hecho la zona todavía más atractiva con asientos exteriores y camas de día, situadas alrededor de la zona de la piscina. La guinda la pone el bar al aire libre al que tanto juego han sabido sacar los concursantes del programa.
Otro de los rincones que nos ofrece esta villa mallorquina es la zona de asientos semicircular que se completa con un fuego de exterior y una sala de estar de planta abierta.
El premio para los ganadores
En total, 4,3 millones de personas no quisieron perderse la gran final del reality, a pesar de emitirse en pleno verano. En su adiós, este pasado 30 de julio, 'Love Island' logró batir todos sus récords de audiencia. Y es que, a pesar de las críticas que ha recibido el programa por algunos de sus contenidos, los espectadores han convertido esta cuarta edición en un verdadero éxito.
Durante los dos meses que se ha mantenido en parrilla, el formato ha promediado cerca de cuatro millones de espectadores, otorgándole al canal ITV2 unos impresionantes resultados. El debate por los comentarios o las acciones de los concursantes ha traspasado la pantalla y ha llegado a la calle, algo que no sucedía desde hacía tiempo.
La actriz Dany Dyer, de 22 años, y Jack Fincham, de 26, se han alzado con el triunfo. Ambos se repartirán un premio en metálico de 50.000 libras (56.000 euros); una cifra que seguramente crecerá, y de forma abultada, gracias a los bolos que habitualmente protagonizan los ganadores o los concursantes más polémicos de este tipo de formatos televisivos.
El reality 'Love Island' se ha convertido en el mayor éxito televisivo de Reino Unido entre los espectadores jóvenes de entre 16 y 34 años. Durante los últimos dos meses, 12 solteros y solteras han convivido aislados del resto del mundo en una lujosa villa localizada a las afueras de Sant Llorenç des Cardassar (Mallorca). El objetivo no ha sido otro que encontrar el amor.