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Cuando sus grandes mujeres les hacen sombra
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Muchos famosos, eclipsados por sus parejas

Cuando sus grandes mujeres les hacen sombra

Paula Echevarría, Sara Carbonero o Blanca Suárez son algunas de las mujeres que han logrado eclipsar a sus maridos y rentabilizar al máximo su noviazgo

Foto: Paula Echevarría en una imagen de archivo (I.C.)
Paula Echevarría en una imagen de archivo (I.C.)

El mundo del cuore despedía el mes de agosto con las cifras que se embolsa Sara Carbonero como periodista y como imagen publicitaria. Se calcula que la manchega podría ganar unos 300.000 euros al año fruto de su labor en Telecinco, pero sobre todo, por prestar su imagen a grandes marcas como Pantene o Ford. Unas estratosféricas cantidades que incitan a la reflexión de si su nombre cotiza en alta por sí mismo, es decir, por su faceta como presentadora deportiva y de su belleza, o si su pareja, Iker Casillas, tiene algo que ver en ese ascenso comercial fulgurante.

Si bien es innegable que el físico de Sara reúne todos los requisitos para ser reclamo publicitario, ser novia del mejor portero del mundo (digan lo que digan) le ha servido como trampolín para catapultar su fama. Según la agencia Personality Media, que se dedica a asesorar a las agencias de medios y a los anunciantes a la hora de tomar una decisión adecuada al contratar un personaje famoso, siempre basándose en un estudio de mercado que justifique su inversión, Sara “esta en un momento mediático complicado por la injusta situación de su chico, pero desde el punto de vista de oportunidad, entre una posible boda y el embarazo, se da una situación muy concreta para las marcas (y prensa rosa) que van a tratar de aprovechar al máximo. Ella tiene un perfil concreto de productos de belleza, en el que da buen resultado, a pesar de haber perdido otras condiciones muy valiosas para las marcas, que mantenía con su perfil de periodista”.

Desde que su romance saliera a la luz, Sara Carbonero es ya un personaje por sí mismo, capaz, incluso, de protagonizar portadas en solitario y acaparar los flashes que ya no ponen su objetivo en Iker Casillas sino en la madre de su futuro hijo. La periodista se ha convertido en el punto fuerte de esta exitosa pareja y así se refleja en los reportajes de los paparazzi.

Como Carbonero, Paula Echevarría también lleva el peso de la fama en su matrimonio. Aunque la guapa asturiana ha logrado convertirse en una reputada actriz gracias al esfuerzo y al trabajo que lleva desempeñando desde hace muchos años, su unión con David Bustamante terminó de colocarla en la posición que hoy día ocupa. Cuando empezaron a salir, el cantante era más conocido que ella y su imagen de chico humilde había conquistado los corazones de los españoles tras su paso por la primera edición de Operación Triunfo. Sin embargo, con el tiempo el de San Vicente de la Barquera ha pasado a un segundísimo plano a pesar de que su cuerpo escultural bien podría hacerle copar todas las portadas. Pero Paula es la 'it girl' española y contra eso no se puede competir.

Los dos han trabajado como imagen de varias marcas pero en este aspecto el reclamo de Paula es mucho mayor. Es el sueño de toda campaña publicidad. Según datos facilitados por Personality Media, la de Candás es conocida por el 83% de las mujeres y está muy bien valorada. Para el sector femenino destaca en multitud de atributos como la cercanía, modernidad, confianza, atractivo (es la sexta mujer más atractiva entre 585 mujeres españolas analizadas) y elegancia (también ocupa la sexta posición en este ránking). Hay que tener en cuenta que se puede ser atractiva como lo es Pilar Rubio (considerada por la mujeres igual de guapa que Paula, ocupando el cuarto puesto), pero no transmitir elegancia como hace Echevarria ,y esto el consumidor lo diferencia a la perfección. Un 72% de las mujeres consideran que la mujer de David Bustamante marca mucha tendencia.

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Otra de las guapas patrias que han seducido a los anunciantes y que ha visto crecer su agenda profesional a raíz de su romance es Carolina Cerezuela. Su salto a la fama como actriz le llegó de la mano de Cámara Café donde demostró que además de belleza tenía talento. Sin embargo, su popularidad se disparó cuando inició su noviazgo con el extenista Carlos Moyá. Juntos han formado una familia de cuentos de hadas y mientras él vive una nueva etapa de su vida desde que se retirase del tenis profesional en 2010, ella goza de una gran popularidad que la ha llevado a ser imagen de varias marcas como Morellato o Dodot y a participar en importantes proyectos televisivos de gran audiencia como ha sido su papel como jurado en Tu cara me suena de la que ya se ha anunciado que habrá una tercera edición. Según las encuestas realizadas por la agencia anteriormente citada, Cerezuela es más valorada que su marido, tanto en hombre como en mujeres. La actriz y presentadora transmite una imagen más cercana y genera más confianza entre los encuestados. La alicantina ha sabido compaginar a la perfección su vida como personaje del cuore tras su unión con el tenista con su faceta profesional, sacándole el máximo partido a esta última.

Blanca Suárez vs. Miguel Ángel Silvestre

Pero son más las que han sabido rentabilizar y llegar incluso a eclipsar a sus famosos maridos –o parejas-. Es el caso de Blanca Suárez. Poco a poco ha ido escalando posiciones hasta convertirse en una de las actrices más cotizadas de nuestro país. Debutó en la serie de Antena 3 El Internado, donde capítulo a capítulo fue ganando protagonismo a medida que se iba demostrando su talento como intérprete. En apenas unos años la médium de la serie juvenil se ganó su puesto como chica Almodóvar, lo que en España se considera ya todo un triunfo, dada la gloria de la que goza el manchego en el cine patrio. En 2011 Blanca se convertía en una de las protagonistas de La piel que habito y además junto a Mario Casas congregaba frente al televisor a la gran audiencia que consiguió El Barco. Un 2011 que también le hizo triunfar en el amor gracias al noviazgo que inició con Miguel Ángel Silvestre. Sin embargo, a la misma velocidad con la que Blanca llegaba a lo más alto –estuvo nominada a mejor actriz revelación por su papel en el film de Almodóvar- El Duque veía caer su carrera inmerso en proyectos de baja audiencia y, como consecuencia, baja rentabilidad. Aunque en su momento Telecinco quiso blindar al actor, luego le dejó marchar visto el fiasco. Sus películas Verbo y Lo mejor de Eva no lograron el millón de euros de recaudación. Sólo Los Pelayos alcanzó esa cifra, film en el que casualmente conoció a Blanca Suárez porque ella también formaba parte del elenco.

El que fuese el icono masculino español por excelencia tras su paso por Sin tetas no hay paraíso tampoco despuntó en Alacrán enamorado. Su reencuentro con el éxito cinematográfico le llegó al convertirse en chico Almodóvar en la última película del director, Los Amantes pasajeros donde otra vez repite con su chica como compañera de rodaje. Veremos si lo nuevo de Antena 3, Galerías Velvet, le devuelve a Silvestre lo que ha ido perdiendo desde su debut en la exitosa serie de Telecinco. Precisamente en este nuevo proyecto comparte protagonismo con Paula Echevarría.

En la actualidad, aunque M.A.S. sigue gozando de la tranquilidad que da tener miles de fans, el ascenso de Blanca Suárez está a punto de eclipsarle. Las marcas se la rifan y su sensualidad y belleza hace que haga sus pinitos como modelo y se haya convertido en el caballo ganador para las portadas de todas las revistas de moda y tendencias.

El icono de los ochenta

Pero el fenómeno que nos ocupa no es reciente. Si hay una mujer en nuestro país que ha logrado invertir la fama en su matrimonio, relegando a su marido a un plano secundario ella ha sido Isabel Preysler, la reina de las portadas del papel cuché de los ochenta y los noventa. Ella allanó el camino de las anteriores al crecer a la sombra de Julio Iglesias hasta convertirse en todo un icono de nuestro país. Su elegancia y eterna juventud le han hecho ser la protagonista de grandes campañas publicitarias como Porcelanosa y Ferrero Rocher y con el afamado cantante fuera de nuestro país, Isabel se postuló como una gran estrella por sí misma, haciendo que un exitoso marqués y hasta el mismísimo ministro de economía pasasen a ser “maridos de”.

El mundo del cuore despedía el mes de agosto con las cifras que se embolsa Sara Carbonero como periodista y como imagen publicitaria. Se calcula que la manchega podría ganar unos 300.000 euros al año fruto de su labor en Telecinco, pero sobre todo, por prestar su imagen a grandes marcas como Pantene o Ford. Unas estratosféricas cantidades que incitan a la reflexión de si su nombre cotiza en alta por sí mismo, es decir, por su faceta como presentadora deportiva y de su belleza, o si su pareja, Iker Casillas, tiene algo que ver en ese ascenso comercial fulgurante.

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