El reencuentro de varios ex protagoniza la boda de Israel Bayón y Cristina Sainz

La boda de Israel Bayón y Cristina Sainz alborotó el pueblo segoviano de Vega de Matute este sábado. La gente que se acercó hasta una iglesia, la de Santo Tomás, totalmente adornada de flores blancas (nardos, lilas, rosas, camelias) y velas pudo ver en vivo y en directo a muchos de los personajes que, con sus historias de amores y desamores, han ocupado los titulares de las portadas del colorín en los últimos años. Una celebración endogámica donde muchos de los invitados eran exnovios, exmatrimonios, examigos, exsocios… y, a pesar de ello, y ahí reside lo más llamativo, podían ejercer hasta de testigos los unos con los otros, como Fonsi Nieto y Alba Carrillo.

Una vez superados los conflictos surgidos tras la separación inicial, ahora se tratan con normalidad y no hay atisbo de enfrentamientos por la custodia del hijo que tienen en común. Alba no pone impedimentos para que su ex lo vea cuando quiera. El novio actual de la modelo, Feliciano López, estaba en París y no pudo acompañarla, pero según los demás invitados, la modelo lo pasó igualmente bien.

Lo mismo le ocurrió a Eugenia Silva, que acudió al enlace con Alfonso de Borbón. Fueron pareja, después lo dejaron y ella se fue con Diego Osorio, también presente en la boda. Su relación duró muy poco y Eugenia se emparejó con otro muchacho desconocido en el mundo de la farándula. Aunque llegó junto a Alfonso, no posaron del mismo modo para las cámaras. Tampoco posaron hombro con hombro Ariadne Artiles y José María García Fraile. Aunque en este caso, la decisión tenía que ver con la discreción con la que intenta llevar su vida el hijo del periodista José María García. Tampoco se perdieron la fiesta Chenoa y Curi Gallardo, recién separados hace unas semanas, tal y como adelantó Vanitatis y según ha reconocido la propia cantante. La pasión desapareció y, en estos momentos, cada uno sigue su propio camino. Ahora sólo son amigos.

La ceremonia religiosa contó con la actuación estelar de Juan Peña, testigo e íntimo del novio. Cantó una ‘Salve Rociera’ acompañado de la Hermanad del Rocío de Huelva. Fue tal la emoción de los invitados que hasta el oficiante pidió un aplauso para él una vez finalizó su intervención.  El cantante también ‘adornó’ el posterior baile nupcial con una bulería  compuesta para los novios.

Un ramo de novia para Amaia Salamanca

Tras el habitual desfile de caras conocidas y la ceremonia eclesiástica, uno de los momentos más esperados del enlace fue la entrega del ramo por parte de la novia. Nadie tenía ni idea de la chica elegida por la novia para recoger el ramo y, mucho menos, Amaia Salamanca, que finalmente fue la que se lo llevó. De hacer caso a la tradición, la siguiente boda podría ser la de la actriz con su novio, Rosauro Baro. El noviazgo de ambos empezó con muy poca credibilidad para algunos y ahora parece totalmente consolidado para todos.

Después de la iglesia, llegó el momento en que familiares e invitados se trasladaron a una finca cercana, donde se sirvió un cóctel que duró dos horas y, a continuación, una cena compuesta por gazpacho con langosta y bogavante, solomillo con boletus y patatas panaderas y, de postre, la habitual tarta con el consabido corte nupcial. Después hubo baile hasta el amanecer y fue Fonsi Nieto el que ejerció de DJ junto a Caty, hermana de la novia, y la modelo Cristina Tosio.

Entre los muchos invitados que acudieron a la boda estaban Jesús Cabana, exmarido de Marta Sánchez y ‘soltero de oro oficial’, Luján Argüelles y su nueva pareja, el representante de Juan Peña, Fernando Candela, Arancha de Benito, Boris Izaguirre, Mónica Martín Luque, Pedro Trapote y Begoña García Vaquero. El empresario habló a sus amistades de la exportación de las churrerías San Gines y el buen funcionamiento de las mismas. Abrió franquicias en Pekin, Sanghai y la última de ellas en Bogotá, mostrando su expansión dentro y fuera de España. La discoteca Barceló (antes Pacha) y Joy Eslava continúan siendo punto de referencia de la noche madrileña.