Liberan, tras 12 horas, a los rehenes de un secuestrador con explosivos en Ucrania

Un hombre armado y pertrechado con explosivos secuestró este martes un autobús con unas veinte personas a bordo en la ciudad de Lutsk, en el noroeste de Ucrania. Tras 12 horas de secuestro en el interior del autobús en la ciudad de Lutsk, en el noroeste de Ucrania, y negociaciones entre la policía ucraniana y el secuestrador, todos los rehenes han sido liberados. "Lutsk.Todos están a salvo", escribió en Twitter el ministro de Interior ucraniano, Arsén Avákov.

El secuestrador, que respondía a nombre de Maxim Krivosh según las autoridades policiales ucranianas, retuvo el autobús durante más de doce horas con las cortinas echadas en la plaza del Teatro de Lutsk, rodeada por efectivos policiales.

La Policía local ha pedido a los ciudadanos que "no se acerquen a la zona".

Según un portavoz de las fuerzas del orden, citado por la agencia de noticias Ucrinform, el secuestrador publicó sus exigencias en sus redes sociales, que han sido estudiadas ahora por los agentes de la Policía durante la duración del secuestro.

El presidente Vladímir Zelenski ha expresado que se está haciendo todo para que la situación se resuelva sin víctimas. "Mantengo el curso de los acontecimientos bajo control personal", ha señalado el dirigente.

El ministro del Interior ucraniano, Antón Gueráschenko, ha precisado que el secuestrador se presentó como Maxim Plojói (el Malo) cuando llamó a la Policía y que en la red hay un libro firmado por una persona con el mismo nombre en la que se describe su experiencia en la cárcel y su visión de la vida.

Gueráschenko ha confirmado que los agentes negocian con el secuestrador para no poner en peligro la vida de los pasajeros del autobús, que cubre la ruta entre las localidades de Berestechko y Krasílovka cuando fue interceptado por el hombre armado.

La ciudad de Lutsk, con unos 220.000 habitantes, está a cerca de 60 kilómetros del vértice que forman las fronteras con Polonia y Bielorrusia.