Es noticia
Reino Unido cruza el Rubicón chino: así opera el 'lobby' de Pekín en Londres
  1. Mundo
  2. Europa
EL 48 GROUP CLUB

Reino Unido cruza el Rubicón chino: así opera el 'lobby' de Pekín en Londres

Hasta hace bien poco, en el Reino Unido no existía una preocupación sobre el poder y la influencia de China. Pero ahora, cualquier intento de persuasión y de 'lobby' es examinado con lupa

Foto: Bandera del Partido Comunista chino. (Reuters)
Bandera del Partido Comunista chino. (Reuters)

“Nunca he oído hablar de ellos”, contestaba recientemente Jack Straw (ministro de Interior y luego de Exteriores con el Gobierno laborista) cuando le preguntaban cuál era su relación con una entidad llamada 48 Group Club. El nombre está inspirado en una misión comercial de 48 empresarios en la década de 1950 a China. Tras publicarse una fotografía en la que aparece en un evento celebrado por este grupo en 2007, el que fuera titular de la diplomacia británica mantiene la misma postura: “¿Cómo me iba a acordar de algo a lo que asistí hace 13 años? Insisto, no tengo relación con ellos y no tengo ni idea de por qué me incluyen en su lista de miembros”. Respuestas similares se han repetido a lo largo de los últimos días, cuando los periodistas han ido preguntando a políticos de todo signo y rango por su vinculación con este club. Desde el 'tory' Richard Graham hasta el mismísimo Tony Blair.

Son miles de actos los que se acumulan en la agenda de un diputado. Ya no hablemos de un ministro o exinquilino de Downing Street, por lo que no se les puede culpar por no recordar uno en particular. Por otro lado, el Reino Unido es el país del 'lobby' por excelencia y no son pocas organizaciones que incluyen en su página web una larga lista de parlamentarios para dar caché a su carta de presentación cuando, en realidad, han podido coincidir con ellos tan solo en un par de ocasiones.

Foto: Un hongkonés, durante las protestas del año pasado. (Reuters)
TE PUEDE INTERESAR
Occidente ya ha perdido Hong Kong. Y te debería preocupar más de lo que imaginas
Carlos Barragán Alicia Alamillos Ricardo Medrano. Hong Kong Enrique Andrés Pretel

Entraría dentro de una normalidad que diputados y lores hubieran podido acudir en los últimos años a eventos organizados por 48 Group Club, cuyo cofundador es Lord Heseltine, figura importante con los gobiernos conservadores de Margaret Thatcher y John Major. Hace 13 años, no había ninguna polémica por acercarse a un club que dice querer potenciar las relaciones comerciales entre Londres y Pekín. Es más, nadie habría preguntado por ello hace apenas cinco meses.

Por qué China preocupa en Europa

Hasta hace bien poco, en el Reino Unido no existía una preocupación aparente sobre el poder global y la influencia del Partido Comunista de China (PCCh) ni el Gobierno se había visto obligado a ofrecer facilidades a los ciudadanos de Hong Kong para adquirir la nacionalidad británica, después de que sus libertades hayan quedado mermadas con la nueva ley de seguridad nacional que China ha promulgado para la antigua colonia. Tampoco había presiones para alejar a Huawei de la red 5G ni advertencias a las universidades para proteger a los estudiantes e investigadores del influjo del gigante asiático en los campus.

Sin embargo, el mundo entero se encuentra ahora en una 'nueva normalidad' y todo lo relativo a Pekín protagoniza titulares. Por lo tanto, cuando hay una entidad llamada 48 Group Club que durante décadas ha tejido una importante red que ha facilitado el acceso del PCCh a políticos, empresarios, medios y universidades británicas… es relevante. Más aún cuando quiere prohibir ahora la publicación en el Reino Unido y Canadá de un libro que lo presenta como una poderosa organización que está “entrenando” a las élites británicas con propaganda china.

“Las redes de influencia [china] están tan arraigadas que el Reino Unido ha pasado el punto de no retorno y cualquier intento de salir de la órbita de Pekín probablemente fracasará”, recoge en sus páginas 'Hidden Hand' ('La mano oculta'), escrito por el australiano Clive Hamilton, profesor en la Universidad Charles Sturt, y la alemana Mareike Ohlberg, experta en Asia en el 'think tank' German Marshall Fund.

placeholder Xi Jinping y David Cameron, en una imagen de archivo. (EFE)
Xi Jinping y David Cameron, en una imagen de archivo. (EFE)

“El Reino Unido siempre ha sido un país importante para Pekín. Primero por su papel estratégico en Europa y segundo por sus vínculos con los Estados Unidos. Uno de los grandes objetivos del Partido Comunista de China siempre ha sido aislar Estados Unidos, alejarlo de sus aliados, por lo que el Reino Unido, Canadá, Nueva Zelanda son objetivos relevantes”, explica Ohlberg a El Confidencial.

Las élites 'abrazapandas'

La experta prefiere no hablar en concreto del 48 Group Club por cuestiones legales. Aunque destaca que el libro —que ha sido publicado ya en Alemania, donde se ha convertido en un 'bestseller'— no se centra exclusivamente en las actividades de este 'lobby', sino en la estrategia que desde hace años viene desempeñando el PCCh para influir en otros países. “En el caso específico del Reino Unido, creo que han sido muy exitosos, porque consiguieron implantar en las élites la idea de que para crear un Reino Unido global, Londres tenía que estrechar sus lazos con Pekín”, recalca.

En la era posBrexit, ese concepto cobraba más sentido que nunca. De ahí que, a principios de este año, pese a la presiones de Washington, el primer ministro Boris Johnson abriera de par en par las puertas a Huawei para que participe en el desarrollo de la red 5G. Cierto es que al gigante tecnológico se le excluyó de todos los elementos críticos del sistema y se limitó a un máximo del 35% su presencia en el resto de funciones de la infraestructura. Pero lo relevante era que el régimen de Xi Jinping ya tenía un pie dentro.

Foto: Foto de archivo de la celebración del Año Nuevo chino frente a Downing Street. (Reuters)

“El Partido Comunista de China no quiere acabar igual que la Unión Soviética. De ahí que quiera intentar hacer ver al resto del mundo que lo mejor para China es que ellos estén en el poder. Pero no busca exactamente amigos, sino alianzas que cumplan sus intereses. Y lo que tienen que tener en cuenta el resto de países es que tienen que cuidar sus propias instituciones”, señala la experta. “No es que la pandemia haya cambiado el mundo, simplemente ha acelerado los procesos que ya tenían lugar. Y a los gobiernos no les gusta ahora que el suministro de sus equipos médicos dependa de un sistema que ha estado ocultando información”, añade.

El Confidencial se puso en contacto con 48 Group Club para saber exactamente cuáles son actividades y sus miembros, pero no obtuvo respuesta. Durante días, su web ha estado cerrada “por reforma”. En su reciente reapertura, han publicado un comunicado en que especifican que sus asesores legales han escrito a los editores del libro después de que “quedara claro que contenía una serie de declaraciones inexactas y potencialmente difamatorias relacionadas con el papel y la función del club y algunos de sus miembros”.

“Tenemos también miembros asociados y otorgamos honores a aquellos que han hecho una contribución positiva a las relaciones entre el Reino Unido y China. Estos miembros asociados no tienen conexión con el club que no sea ese honor, a menos que se haya establecido una contribución separada”, afirman. “Somos un organismo independiente que promueve la comprensión de China y las relaciones sino-británicas positivas, que creemos que son de interés nacional para el Reino Unido. Cualquier sugerencia de lo contrario es falsa”, añaden.

Foto: La sede del Parlamento británico, a finales de abril. (EFE)

El actual presidente es Stephen Perry. Tiene una consultora en la City llamada London Export Corporation y ha sido nombrado miembro honorario de la Escuela de Negocios “en reconocimiento a su trabajo durante los últimos 40 años para abrir el comercio y promover el entendimiento entre China y Occidente”. El empresario —que a principios de este año pronunció un discurso en apoyo a los intentos de Huawei de proporcionar infraestructura para las redes británicas 5G— conoce personalmente a Xi Jinping. En 2018, se convirtió en el único británico entre los 10 extranjeros galardonados con la medalla de la Reforma y la Amistad de China.

Como parte de su agenda, en 2012, Perry ayudó también a financiar un viaje a China para los parlamentarios del llamado APPG for China (en Westminster, se pueden crear grupos para discutir sobre materias de interés, aunque no dejan de ser 'lobbies', como el actual grupo sobre Cataluña). Entre los participantes, estaban el independentista escocés Angus MacNeil, la laborista Kerry McCarthy, el 'tory' David Rutley y el laborista Nick Smith.

Las relaciones entre Londres y Pekín se habían ido acercando en los últimos años. Es más, en 2015, el entonces 'premier', David Cameron, llegó a invitar a Xi Jinping a tomar una cerveza en el pub local cerca de Chequers, la residencia campestre del inquilino del Número 10, que se convirtió en el escenario para revelar al mundo que comenzaba “una nueva era dorada”.

placeholder Banderas del Reino Unido y China. (Reuters)
Banderas del Reino Unido y China. (Reuters)

Pero los ánimos ahora no pueden ser más distintos en el Partido Conservador. Son los propios 'tories' los que demandan al Gobierno de Boris Johnson que endurezca su postura ante China, ya que existe una gran preocupación por el poder global y la influencia del régimen comunista autoritario. Alrededor de 50 diputados han llegado a formar el 'lobby' China Research Group. Su cabecilla es Tom Tugendhat, actual presidente del comité parlamentario para Asuntos Exteriores.

Sus actividades son seguidas ahora muy de cerca por el rotativo 'The Telegraph'. Pero el que es considerado “biblia para los 'tories”, hasta hace apenas dos meses estaba publicando una sección llamada 'China Watch', financiada y escrita por 'China Daily' —controlado por el PCCh—.

Durante más de una década, los lectores han podido leer tanto en la edición de papel como 'online' unos reportajes con puntos de vista implacablemente optimistas sobre la posición de China en el mundo. Aunque sin confirmar, en los corrillos periodísticos se dice que 'The Telegraph' llegó a embolsarse 750.000 libras anuales (alrededor de 832.000 euros). El 'New York Times' también ha dejado de publicar a principios de este año una sección similar. No son casos aislados. Se repiten en los rotativos de Australia, Francia, España y Alemania.

Foto: Kishore Mahbubani. (Imagen cedida)

Uno de los principales objetivos ahora para el China Research Group es que el Gobierno cierre por completo las puertas a Huawei. Los 'tories' quieren fuera del Reino Unido al gigante tecnológico chino. Y si el primer ministro no les da una fecha concreta para la partida, un grupo de cerca de 60 rebeldes amenaza con hacerle la vida imposible las próximas semanas en la Cámara de los Comunes, donde deben tramitarse importantes leyes, entre ellas, la de Infraestructura de Telecomunicaciones. En un principio, Johnson había planeado retirar al gigante asiático de la red 5G en 2029, pero ahora que ha sugerido que China podría ser vista como un “vendedor estatal hostil”, el cambio podría ejecutarse tan pronto como en 2023.

El futuro de Huawei en Londres

Huawei niega en todo momento las acusaciones de que representa un riesgo de espionaje. La compañía se encuentra en un ambiente un tanto hostil. Sin embargo, pese a las presiones, ha conseguido luz verde para construir un laboratorio de investigación, con una inversión de 1.000 millones de libras, cerca de Cambridge (donde se encuentra la prestigiosa universidad). La petición se realizó en enero. El “China Research Group” había pedido al Gobierno que, antes de tomarse cualquier decisión, se tenía que esperar a la publicación del documento que estaba preparando el Centro Nacional de Seguridad Cibernética. Tras examinar el impacto potencial de las nuevas sanciones de los Estados Unidos, ha concluido finalmente que los productos de la com.pañía tecnológica china no son seguros.

El debate sobre la construcción del laboratorio en la aldea de Sawston ha involucrado a algunos de los políticos más poderosos del mundo, incluidos el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, y el embajador de Estados Unidos en el Reino Unido. Pero la semana pasada, el comité de planificación del Consejo del Distrito del Sur de Cambridgeshire dejó de lado las cuestiones de geopolítica y ciberseguridad para centrarse en el impacto potencial de la solicitud en la vida silvestre local, de ciclovías y ríos.

Foto: El embajador chino en Reino Unido, Liu Xiaoming. (Reuters)

Huawei planea ahora convertir una superficie de 200 hectáreas, que compró por alrededor de 37,5 millones de libras, en una oficina que albergue a más de 400 empleados cerca del centro de tecnología Silicon Fen, de Cambridge. Quiere utilizar la instalación para desarrollar nueva tecnología de banda ancha, así como para trabajar en 'software' de inteligencia artificial.

Tras las recientes tensiones por Huawei y el ofrecimiento a los ciudadanos de Hong Kong para obtener la ciudadanía británica, el embajador de China en el Reino Unido, Liu Xiaoming, mandó este lunes a Downing Street un mensaje que no da lugar a equívocos: “Queremos ser vuestros amigos, vuestros socios, pero si queréis hacer de China un enemigo, tendréis que lidiar con las consecuencias”.

“Nunca he oído hablar de ellos”, contestaba recientemente Jack Straw (ministro de Interior y luego de Exteriores con el Gobierno laborista) cuando le preguntaban cuál era su relación con una entidad llamada 48 Group Club. El nombre está inspirado en una misión comercial de 48 empresarios en la década de 1950 a China. Tras publicarse una fotografía en la que aparece en un evento celebrado por este grupo en 2007, el que fuera titular de la diplomacia británica mantiene la misma postura: “¿Cómo me iba a acordar de algo a lo que asistí hace 13 años? Insisto, no tengo relación con ellos y no tengo ni idea de por qué me incluyen en su lista de miembros”. Respuestas similares se han repetido a lo largo de los últimos días, cuando los periodistas han ido preguntando a políticos de todo signo y rango por su vinculación con este club. Desde el 'tory' Richard Graham hasta el mismísimo Tony Blair.

Reino Unido Partido Comunista Partido Conservador Británico Tony Blair Boris Johnson Hong Kong Xi Jinping Margaret Thatcher
El redactor recomienda