Italia reclutará a 60.000 voluntarios para evitar aglomeraciones en la desescalada

El Gobierno italiano iniciará esta semana el reclutamiento de 60.000 voluntarios cuya tarea será evitar aglomeraciones y recordar la obligación de cumplir con el distanciamiento físico en las zonas de ocio de diferentes ciudades. La iniciativa, anunciada por el ministro de Asuntos Regionales, Francesco Boccia, llega después de la indignación que produjeron este fin de semana las escenas de multitud de jóvenes en las playas, los bares o las plazas sin cumplir con la separación requerida para evitar el contagio del coronavirus.

Protección Civil será el organismo responsable de incorporar como "asistentes cívicos" a desempleados y perceptores de la renta mínima u otras ayudas sociales. La idea es que trabajen 16 horas a la semana y que entren en acción a mitad de junio, para quedarse ya todo el verano. "Podrán actuar con la fuerza de la persuasión, de la razón y de sus sonrisas"; y sólo en el caso de encontrar resistencia violenta acudirán a la Policía Municipal, ha explicado Boccia en una entrevista a 'La Stampa'.

El alcalde de Bari y presidente de la Asociación de Alcaldes de Italia (ANCI), Antonio Decaro, aclaró al diario 'La Repubblica' que los voluntarios no ejercerán como vigilantes, sino que se encargarán difundir las normas de buen comportamiento. Además de estas tareas, estarán a disposición de los ayuntamientos para apoyar a la parte más débil de la población con acciones como llevar la compra a casa a ancianos o enfermos.

Italia, que ha sido uno de los países europeos más afectados por la pandemia del coronavirus, comenzó a rebajar las restricciones el pasado 18 de mayo. Boccia asegura que la clave de que hasta ahora el desconfinamiento vaya por buen camino ha sido seguir la estrategia del "palo y la zanahoria", pero advierte de que el alivio podría revertirse si la población incumple las normas.

El mismo enfoque tiene el anuncio promovido por el Gobierno de la región italiana del Véneto para advertir sobre los riesgos de eludir las medidas de prevención ante al coronavirus en la desescalada. El vídeo, que se hizo viral a las pocas horas de su publicación, muestra imágenes de reuniones de jóvenes en terrazas y espacios públicos sin respetar las medidas necesarias para evitar contagios. De esta manera, todo se para y los efusivos saludos se contraponen con las imágenes de un enfermo de covid-19 intubado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de un hospital.