Bruselas amenaza a Londres con los tribunales por no elegir un comisario

Las condiciones por las que el Reino Unido obtenía la prórroga del Brexit hasta el 31 de enero de 2020 eran claras. Una de ellas era que el Gobierno británico debía nominar a un comisario para que forme parte del futuro Ejecutivo comunitario mientras siga dentro de la UE y cuyo mandato comienza, en principio, el próximo 2 de diciembre. Pero Londres se ha negado a hacerlo, y Bruselas ha anunciado este jueves la apertura de un procedimiento de infracción que, si llega a las últimas consecuencias, podría acabar en la alta corte de justicia europea.

Para que la nueva Comisión Europea, bajo el mando de la presidenta electa Ursula von der Leyen, pueda echar a rodar, los Tratados requiere que todos los Estados miembros nominen a un comisario, que debe pasar un proceso de aprobación del Parlamento Europeo junto al resto del colegio de comisarios. Por eso, cuando la UE garantizó a Londres una prórroga del Brexit, pidió que cumpliera con su obligación y enviara a un comisario. Pero el Gobierno de Boris Johnson no ha cumplido y eso amenaza con retrasar la puesta en marcha del Ejecutivo comunitario.

Ante la falta de propuestas, Von der Leyen envió la semana pasada una carta a Johnson, pidiéndole el nombre. Nadie contestó a la primera misiva de la alemana, que tuvo que enviar a comienzos de esta semana una nueva carta. Este miércoles por la noche, Tim Barrow, embajador permanente británico ante la UE, informaba a Bruselas de que el Reino Unido, al encontrarse en un proceso electoral que culminará con los comicios del próximo 12 de diciembre, no puede hacer nombramientos a puestos internacionales.

Apertura de expediente

Este jueves al mediodía la Comisión Europea anunciaba que estaba estudiando al detalle el mensaje de Londres, y que analizaba con el resto de instituciones qué decisión tomar. Esta tarde ha enviado una notificación formal al Gobierno británico informando de la apertura de expediente por violar los Tratados europeos. El Ejecutivo de Johnson puede responder a esta misiva hasta el próximo viernes 22 de noviembre.

"Un Estado miembro no puede invocar disposiciones vigentes en su sistema jurídico nacional para justificar el incumplimiento de las obligaciones derivadas del Derecho de la Unión", escribe el Ejecutivo comunitario en un corto comunicado en el que ha anunciado su decisión.

El proceso podría concluir con el Reino Unido ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) de Luxemburgo, una de las dianas más comunes por parte de los euroescépticos durante la campaña del Brexit, en caso de que Londres se niegue a cumplir con sus obligaciones y no nomine a un comisario.

Von der Leyen espera que su Comisión Europea pueda ponerse en marcha el próximo 2 de diciembre, pero para ello antes debe andar con pies de plomo. Por un lado el candidato húngaro a comisario requiere todavía de la luz verde del Parlamento Europeo, que debería votar la aprobación del equipo de la presidenta durante el próximo Pleno en Estrasburgo. Por otro, tanto Bruselas como los Estados miembros deben cuidar hasta el más mínimo detalle el procedimiento legal en la exploración de las posibilidades para constituir el Ejecutivo comunitario con un miembro menos, un acto que requiere de la decisión unánime del Consejo Europeo.