Francia comenzará a usar el reconocimiento facial de forma obligatoria

"Simplificar las relaciones administrativas y gestionar mejor las fronteras externas del espacio Schengen". Así justifica Francia el desarrollo de un sistema de reconocimiento facial, que el país comenzará a usar a finales de noviembre y que todo ciudadano, lo quiera o no, estará obligado a usar.

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Para ello, como explica un informe del Senado galo, cada francés deberá contar con un teléfono inteligente, descargar gratuitamente la 'app' de Alicem —el nombre del sistema—, subir a la plataforma una foto suya, a fin de que la aplicación verifique si los rasgos coinciden con la del pasaporte, y ya contará con una 'digital ID' registrada y legal.

Según indica el documento de la Cámara Alta, este será "el primer paso hacia una identidad digital fiable", que esperan "que se popularice rápidamente para que los ciudadanos puedan usarlo en su vida diaria". Por el momento, el ejecutivo comenzará a probar este sistema a partir del próximo mes, que se espera que comience a ser obligatorio a partir de 2020.

Por el momento, solo estará disponible en los dispositivos con sistema operativo Android que ya tengan incorporado el sistema de pago por contacto, que permite efectuar una compra acercando el terminal a un datáfono.

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Este sistema complementará el escaneo de huellas dactilares hasta conformar un "carné de identidad biométrico —el pasaporte electrónico habitual— más completo". Entre sus principales usos: evitar las colas en aeropuertos "sin imponer de manera sistemática pasar por arcos de seguridad"; bastará con que el ciudadano se coloque frente a un aparato con una cámara, que le hará una foto y comprobará los datos de la 'app' y de sus documentos coinciden.

Además, se prevé que este método no tarde en extenderse al pago de impuestos a la seguridad social o a operaciones bancarias.

Sin embargo, el gobierno francés matiza que —a diferencia de China— no creará un registro con las caras de los ciudadanos —se eliminarán tras los vuelos—, aunque eso no ha impedido que tanto grupos activistas como la propia Comisión Nacional de Informática y Libertades (CNIL) expresen su preocupación ante un posible mal uso de estos datos.

Pionero en Europa

Francia no es el único país que cuenta con sistemas administrativos de reconocimiento facial; sí será el primero en el continente en aplicarlo, de forma obligatoria, a las relaciones entre ciudadanos y Administración.

Ya en febrero de 2017, la compañía Eurostar —une Londres, París y Bruselas— lo empleó en la Gare du Nord, en la capital francesa. En otras partes de Francia, se utiliza en los institutos desde principios de este año.

Además, durante 2020, la aerolínea Air France y Aéroports de Paris —la compañía portuaria que coordina las terminales del país— comenzarán a usar el "embarco por biometría" de forma experimental, según ha revelado este jueves el semanario L'Express.