Primero, el caramelito: Bruselas convierte a Montenegro en su 'liebre' de los países candidatos a la UE
La Comisión Europea ha desvelado su análisis de progreso de los países candidatos, destacando que Montenegro es el más avanzado. Costa asegura que podría ser miembro en 2028
¿A quién le va a caer mal Montenegro? El país se independizó de Serbia en 2006, candidato a ingresar en la UE desde el año 2010, y en 2017 se integró en la OTAN. Es un país sin demasiadas tensiones regionales en los Balcanes Occidentales, que no destaca demasiado ni hace ruido. Quizás por todos esos motivos, la Comisión Europea ve en Podgorica su alumno más aventajado, su "liebre" en un proceso de nueva ampliación del este. Este martes, el Ejecutivo comunitario ha presentado su paquete de adhesión, y ha destacado que Montenegro es el más avanzado en el proceso. "Pronto tendremos que empezar a trabajar en el Tratado de Adhesión", ha destacado en rueda de prensa Marta Kos, comisaria de Ampliación. Bruselas también ha destacado los avances de Albania, Ucrania y Moldavia.
Montenegro ha hecho muchos progresos en las negociaciones, que consisten en una serie de capítulos que se van cerrando a medida que el país candidato va alineándose con los estándares europeos. "Completar las negociaciones en 2027 es realista", ha apuntado una fuente comunitaria. El país balcánico es uno de los que está también al 100% alineado con la política exterior de la Unión Europea. El tono de Bruselas es mucho más positivo que en el informe publicado en 2024. Más allá de que Montenegro sea el país más avanzado, ¿por qué le viene tan bien a la Comisión Europea el progreso de Podgorica? Lo dicho: ¿a quién le va a caer mal Montenegro? Es el segundo país que, según las encuestas, los europeos más apoyan que entre en la UE, es pequeño, tiene solamente algo más de 600.000 habitantes, sin una agenda geopolítica propia marcada que entre en conflicto con los intereses europeos o sin un sector agrícola importante que pueda preocupar a los principales receptores de la Política Agraria Común (PAC).
La Unión Europea tiene un problema de credibilidad muy serio con el proceso de adhesión, y Podgorica puede ser muy útil. El último país que entró en el club fue Croacia en el 2013, y desde entonces no ha habido ninguna ampliación de la UE, mientras que los países de los Balcanes Occidentales llevan esperando desde hace mucho tiempo. Son dos procesos que se retroalimentan: la UE no es creíble cuando dice que si los países hacen las reformas necesarias pueden llegar a acceder al club, y al mismo tiempo estos mismos socios no sienten incentivos de tomarse en serio las agendas de reformas, por lo que su proceso se estanca todavía más.
El proceso de adhesión de Montenegro permite recuperar la credibilidad, sin generar demasiados efectos colaterales que puedan provocar oposición por parte de los Estados miembros que ya están en la UE y que deben dar la luz verde a su ingreso. Su entrada no tiene un impacto significativo ni político ni tampoco presupuestario. Y, en cambio, ofrece ventajas geopolíticas y de mensaje. António Costa, presidente del Consejo Europeo, el foro de jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea, también ha destacado a Montenegro como la ‘liebre’. "Creo que Montenegro puede ser el ‘28’ (Estado miembro) en el 28 (por el año 2028)", ha asegurado el portugués.
Y es clave la vertiente política porque ahí es donde los Balcanes Occidentales han criticado a la Unión Europea. Tras la invasión rusa de Ucrania, Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, convirtió en prioridad absoluta - y política - el proceso de adhesión de Ucrania y también de Moldavia, otro país bajo la amenaza permanente de desestabilización por parte de Moscú. Los líderes balcánicos fueron muy duros con los europeos en una cumbre celebrada en junio de 2022, calificándola de "histórica en lo negativo".
Albania es otro de los países que reciben palmadas en la espalda por parte de la Comisión Europea, que considera que se han hecho progresos muy significativos en el último año. Menos positiva es con Macedonia del Norte, Serbia y Bosnia-Herzegovina. En el caso de Georgia, el Ejecutivo comunitario se muestra extraordinariamente duro con el Gobierno de Sueño Georgiano, que ha alejado por completo a Tbilisi del camino hacia la UE. El otro país candidato es Turquía, pero las negociaciones llevan congeladas desde el año 2018.
Todos los ‘peros’ de Bruselas
Pero no son solamente los países candidatos los que deben llevar a cabo reformas. La Unión Europea también es consciente de que debe cambiar muchos elementos de su funcionamiento interno antes de lanzarse a una nueva ampliación hacia el este. "La Comisión está trabajando en revisiones y reformas de las políticas previas a la ampliación, que evalúan el impacto de la ampliación en áreas políticas clave", señala el Ejecutivo comunitario en el documento central del paquete. Aunque se esperaba que ese documento se presentara junto al análisis de progreso de los países candidatos finalmente se ha visto retrasado.
En una entrevista con el Financial Times, Kos ha señalado la posibilidad de que haya una integración paulatina de los nuevos países, con la posibilidad de algo parecido a un periodo de prueba o transición. La comisaria de Ampliación ha querido matizar después sus palabras en rueda de prensa, y también en una comisión parlamentaria en la que ha subrayado que las propuestas en este sentido se harán en un documento que todavía está realizándose, pero ha confirmado que esa es una posibilidad que hay sobre la mesa para evitar "caballos de Troya" dentro de la UE.
¿A quién le va a caer mal Montenegro? El país se independizó de Serbia en 2006, candidato a ingresar en la UE desde el año 2010, y en 2017 se integró en la OTAN. Es un país sin demasiadas tensiones regionales en los Balcanes Occidentales, que no destaca demasiado ni hace ruido. Quizás por todos esos motivos, la Comisión Europea ve en Podgorica su alumno más aventajado, su "liebre" en un proceso de nueva ampliación del este. Este martes, el Ejecutivo comunitario ha presentado su paquete de adhesión, y ha destacado que Montenegro es el más avanzado en el proceso. "Pronto tendremos que empezar a trabajar en el Tratado de Adhesión", ha destacado en rueda de prensa Marta Kos, comisaria de Ampliación. Bruselas también ha destacado los avances de Albania, Ucrania y Moldavia.