Nueve españoles 'atrapados' en un hotel en Trípoli por el estallido de varias luchas armadas en la ciudad
Entre las personas atrapadas se encuentra Begoña Costales, directora general de la compañía Bego Costa África y presidenta de la Federación de Mujeres Empresarias de Asturias
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El estallido del último episodio de violencia en Libia ha pillado de pleno a un grupo de españoles que estaban en el país. Al menos nueve nacionales están atrapados en un hotel de Libia, la capital, intentando mantenerse a salvo de los enfrentamientos armados entre las guerrillas de la zona, que estallaron el lunes tras la muerte "en misteriosas circunstancias" de uno de los principales líderes milicianos. El aeropuerto ha sido clausurado, clases y negocios clausurados, y los combates se mantienen en algunos barrios de la ciudad.
Entre las personas atrapadas está Begoña Costales, directora general de la compañía Bego Costa África y presidenta de la Federación de Mujeres Empresarias de Asturias, según ha confirmado a El Confidencial Diana Llamazares, vicepresidenta de la misma organización. Según ha detallado la empresaria, que sigue de cerca la situación, el viaje de los españoles estaba enmarcado en un viaje empresarial para detectar nuevas oportunidades de negocio en Libia organizado por la Cámara de Comercio de Tarragona. Entre el resto de españoles atrapados habría empresarios de Madrid, Cataluña, Málaga y Valencia.
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La violencia estalló en las calles de Trípoli el pasado lunes, cuando el líder de una importante milicia, Abdel Ghani al Kikli (conocido como 'Ghniwa'), fue asesinado, justo cuando llegaba la misión comercial española al país. “La situación entonces estaba bien, con una calma tensa, como siempre está aquí, pero bueno”, afirmó Costales, que cuenta con una larga experiencia trabajando en África, a El Comercio de Asturias.
Entonces, se cerró el aeropuerto y esta madrugada, a las 7 de la mañana, el hotel habría decidido trasladar a los españoles al sótano del mismo para su seguridad. Desde allí, "oyendo los disparos" y pese a la poca conexión, Begoña ha sido capaz de enviar varios mensajes a su familia. Según esos mensajes, la situación en este momento es que los españoles atrapados están en contacto con la embajada española en Libia, que estaría intentando extraerlos del país. En permanente contacto con ellos, la legación española les recomendó que no salieran del hotel, después que no se acercaran a las ventanas y, finalmente, que se dirigieran al sótano hasta ser evacuados.
La embajada española en Libia solo ha emitido un comunicado público, en el que advierte que "ante situación actual que vive el país, se recuerda a todos los españoles que la Embajada tiene a su disposición los siguientes teléfonos de emergencia 24h: +218 91 320 39 04 y +216 29 174 445. Se recomienda extremar precauciones y seguir instrucciones de autoridades libias".
El epicentro de los combates es el bastión de la milicia Aparato de Apoyo a la Estabilidad (SSA), que opera bajo control del Consejo Presidencial --uno de los organismos que conforman el Gobierno de unidad, con sede en Trípoli y las autoridades reconocidas internacionalmente. La Misión de Apoyo de Naciones Unidas en Libia (UNSMIL) confirmó la muerte de al menos seis personas por los combates registrados después de la muerte de al Kikli.
La crisis, sin embargo, podría estar a punto de calmarse, lo que permitiría la salida de los españoles. El Gobierno de Unidad informó la mañana del miércoles que había tomado "control total" de Abu Salim, el distrito de la capital de Trípoli más afectado por los combates. En un comunicado en sus redes sociales, el primer ministro Abdulhamid Dbeibah aseguró que las batallas contra otras milicias habían "acabado en éxito".
El estallido del último episodio de violencia en Libia ha pillado de pleno a un grupo de españoles que estaban en el país. Al menos nueve nacionales están atrapados en un hotel de Libia, la capital, intentando mantenerse a salvo de los enfrentamientos armados entre las guerrillas de la zona, que estallaron el lunes tras la muerte "en misteriosas circunstancias" de uno de los principales líderes milicianos. El aeropuerto ha sido clausurado, clases y negocios clausurados, y los combates se mantienen en algunos barrios de la ciudad.