Poca broma con la monarquía marroquí: una ama de casa a la cárcel por un chiste del gas
Rachida Jalali, madre de cuatro hijos, cumple dos años de prisión por guasearse en Facebook de que con un billete con la figura de los tres últimos reyes alauíes ya no se podrá comprar una bombona de butano
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F07a%2F410%2Fe64%2F07a410e6473a89a5ffcb0b135ee74802.jpg)
Cuando supo que el precio de la bombona de gas de 12 kilogramos iba a subir por encima de 50 dirhams (4,82 euros), Rachida Jalali, ama de casa marroquí, hizo una pequeña broma en su página de la red social Facebook. “Ya ni con tres reyes se podrá comprar el gas”, comentó. Acompañó su mensaje con un billete de 50 dirhams ilustrado con la efigie de los tres reyes que ha tenido Marruecos desde su independencia en 1956: Mohamed V, Hassan II y el actual, Mohamed VI.
Su comentario se hizo viral en un país en el que se multiplican las manifestaciones contra la carestía de la vida y que el miércoles 5 vivió su primera huelga general en 9 años, aunque no fue muy secundada, excepto en el sector de la educación.
La popularidad de la chanza de Rachida Jalali acabó despertando, antes de que la borrara, el interés de la policía que se presentó en su domicilio de Khouribga, en el centro del país, donde vive ahora esta madre de cuatro hijos. Emigró hace años a Italia, pero había decidido volver para montar un negocio en su ciudad natal. Los agentes la interrogaron primero sobre sus intenciones al subir ese post, sobre si suponía una crítica a las autoridades. Después la pusieron a disposición judicial.
La semana pasada Rachid Jalali fue condenada por un tribunal de Khouribga a dos años por “ofensa a las instituciones del Estado”que el código penal marroquí castiga, si se formulan en público, con entre uno y cinco años de cárcel y una multa. Habría sido peor si los jueces la hubiesen condenado, como estuvieron a punto, por ofensas al rey.
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2Fe3f%2F25c%2F9bf%2Fe3f25c9bfcd540b230ef719e057f75b2.jpg)
“Mi cliente no tenía ninguna intención malintencionada”, explicó el abogado de Rachida Jalali a la poca prensa que se interesó en Marruecos por el juicio. “Hizo un chiste como se hacen cientos a diario en las redes sociales”, añadió. “Condenarla es mandar un mensaje inquietante a la sociedad”, concluyó.
Rachida Jalali ha empezado a cumplir su condena en la cárcel de mujeres de Oukacha (Casablanca) desde donde logró sacar el fin de semana un mensaje de audio que también ha circulado mucho por las redes sociales. En él anuncia que empieza una huelga de hambre en protesta por una condena que considera injusta, pero acaba también dando “Vivas al rey” como para hacerse perdonar.
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2Fb0e%2F617%2Fe17%2Fb0e617e1728e6262bff5f0e5228733a7.jpg)
La bombona de gas cuesta ahora 50 dirhams en Marruecos, pero después del Ramadan, a finales de marzo, subirá a 60, según ha anunciado la prensa, y el año próximo a 70. Se trata de “aligerar los desembolsos de la Caja de Compensación”, según el diario oficialista Le 360, con la que el Estado subvenciona muchos productos básicos. Hoy en día, cerca de la mitad del precio de la bombona corre por cuenta del Estado.
Los tribunales marroquíes siguen pronunciando condenas de índole política a activistas, pero la de una ama de casa es excepcional. La más leve de las recientes condenas fue la impuesta a Ismael Lghazaoui, un año de cárcel y una multa de 5.000 dirhams (482 euros) por manifestarse contra la invasión de Gaza ante el Consulado de EEUU en Casablanca. La más severa, la pena de cinco años, que recayó en abril sobre Abderrahmane Zankad, culpable de denunciar en las redes sociales la estrecha relación de Marruecos con Israel, cuya responsabilidad achacó a Mohamed VI.
Cette Marocaine a dit en public sur les réseaux sociaux ( Facebook) que le billet de banque marocain de 50 dirhams a les photos de 3 rois mais n'achète pas une bonbonne de gaz.
— Nadeem Ali Bey (@BenHafsoun) February 4, 2025
Le 8 janvier 2025 au tribunal de Khouribga au Maroc, elle a été condamnée à deux ans de prison ferme.… https://t.co/6XZMztW9q4 pic.twitter.com/sh9I5eR1mN
Tampoco los periodistas se libran, aunque tres de ellos fueron parcialmente indultados por el rey en julio y salieron en prisión. El último que se sentó en el banquillo ha sido Hamid El Mahdaoui, pero quizás se libre de acabar detrás de los barrotes. Ha recurrido una sentencia que le condenó en noviembre a 18 meses de cárcel y una cuantiosa multa por "difusión de falsas alegaciones" y "difamación", según el Código Penal. Debería haber sido juzgado según la Ley de Prensa y Publicaciones, recalcó Reporteros Sin Fronteras en un comunicado.
Cuando supo que el precio de la bombona de gas de 12 kilogramos iba a subir por encima de 50 dirhams (4,82 euros), Rachida Jalali, ama de casa marroquí, hizo una pequeña broma en su página de la red social Facebook. “Ya ni con tres reyes se podrá comprar el gas”, comentó. Acompañó su mensaje con un billete de 50 dirhams ilustrado con la efigie de los tres reyes que ha tenido Marruecos desde su independencia en 1956: Mohamed V, Hassan II y el actual, Mohamed VI.