¿Por qué el té es más tóxico en UK? El peligro de la regulación post-Brexit con los pesticidas

Cliché o no, el té es un sello de identidad para los británicos. El problema es que, desde el Brexit, es más tóxico, ya que los niveles de residuos de pesticidas que presenta se han incrementado por 4.000. Y algunos de ellos tienen riesgo de causar cáncer. El histórico divorcio europeo se votó en 2016, se ejecutó en 2020, pero sigue acaparando titulares. Y los últimos afectan a la cantidad de residuos de pesticidas permitidos en decenas de tipos de alimentos en Inglaterra, Gales y Escocia.

Los cambios en las regulaciones significan que ahora se permite que más de 100 productos contengan más pesticidas cuando se venden al público, desde patatas hasta cebollas, uvas y aguacates, y café y arroz. En el caso del té, contiene tanto insecticida clorantraniliprol como fungicida boscalida, clasificado como “probable carcinógeno humano” por la Organización Mundial de la Salud.

“En un momento en que los tumores y otras enfermedades crónicas están en aumento, deberíamos hacer todo lo posible para reducir nuestra exposición a sustancias químicas. En realidad, no tenemos idea de qué está haciendo esta exposición continua a decenas, o incluso cientos, de sustancias químicas diferentes a nuestra salud a largo plazo”, asegura Nick Mole de la ONG Pesticides Action Network UK (Pan UK), responsable de la investigación que ha publicado en exclusiva en The Guardian.

Los plaguicidas son sustancias químicas utilizadas para controlar, prevenir o destruir las plagas que afectan a las plantaciones agrícolas. La mayoría de estas sustancias son fabricadas por el hombre. El objetivo del régimen de 'nivel máximo de residuos' (LMR) es proteger la salud pública, la vida silvestre y el medioambiente natural. Y, según la investigación, que ha utilizado la base de datos de autoridades nacionales e internacionales, en Escocia, Inglaterra y Gales se están reduciendo las protecciones para los consumidores. La provincia británica de Irlanda del Norte no está afectada, ya que, tras el 'Marco de Windsor', aplica la normativa comunitaria.

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Los cambios regulatorios para Gran Bretaña se llevaron a cabo entre 2022 y 2024 bajo el anterior gobierno conservador y sustituyeron a los LMR más estrictos de la UE. En este sentido, los activistas piden ahora al Gobierno laborista de Keir Starmer, que ha prometido “resetear las relaciones con la UE”, que revierta las medidas adoptadas por los tories y siga el ejemplo de la regulación comunitaria.

A día de hoy, en Gran Bretaña se han debilitado las restricciones de niveles máximos de residuos para 49 pesticidas diferentes, 15 de los cuales están en una lista de “pesticidas altamente peligrosos” recopilada por Pesticides Action Network UK (Pan UK). El análisis fue realizado utilizando datos de la Health and Safety Executive (HSE), organismo que regula los pesticidas en Reino Unido.

Como ejemplo, los LMR para aguacates y granadas del insecticida bifentrina, un disruptor hormonal, han aumentado un 50%. El pesticida está prohibido tanto en Reino Unido como en la UE, pero no en muchos países importadores como Estados Unidos, Canadá y Australia.

Un portavoz de la HSE afirmó: “Tomamos decisiones independientes basadas en una cuidadosa evaluación científica de los riesgos, con el objetivo de lograr un alto nivel de protección para las personas y el medioambiente. La decisión de cambiar cualquier LMR debe estar respaldada por una evaluación de riesgos para garantizar que se cumplan los requisitos de seguridad reconocidos internacionalmente”. Con todo, reconoce que los LMR británicos están por debajo del nivel considerado seguro para las personas que consumen el alimento.

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Los nuevos LMR más débiles adoptados por Gran Bretaña provienen del Codex Alimentarius, un conjunto de normas alimentarias internacionales elaborado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura y la OMS. Los activistas han criticado al Codex por “un historial de establecer normas de seguridad más débiles que sus homólogos europeos debido a la influencia de los grupos de presión estadounidenses y corporativos”.

Sorprendentemente, según The Guardian, Reino Unido optó por adoptar los LMR del Codex solo cuando ofrecían una menor protección a los consumidores. En los casos en que la norma del Codex era más estricta, la HSE decidió mantener el LMR británico más débil. “El nuevo gobierno laborista necesita urgentemente revertir esta situación”, demandas de la ONG responsable de la investigación.

The Guardian ya reveló en enero que Reino Unido había abandonado una serie de protecciones ambientales derivadas de la UE, a pesar de que Michael Gove, Boris Johnson y otros arquitectos del Brexit habían prometido que se reforzarían después de que Reino Unido abandonara el bloque. En particular, la UE ha prohibido 30 pesticidas dañinos desde el Brexit; Reino Unido no ha prohibido ninguno de ellos.

15 de los pesticidas para los que se han aumentado los LMR están prohibidos tanto en Reino Unido como en la UE, incluidos dos neonicotinoides, conocidos por su daño a los insectos polinizadores. La ONG Pan UK señala que esto dio una ventaja competitiva a los productores en países donde estos pesticidas siguen siendo legales, como Estados Unidos, Canadá y Australia, en el caso de los neonicotinoides.

"Estamos exportando nuestra huella de pesticidas al extranjero”

El LMR de un neonicotinoide, el tiametoxam, para la avena se ha incrementado 25 veces con respecto a la norma anterior de la UE, mientras que el LMR de la clotianidina para el trigo se ha incrementado 7,5 veces. En cambio, la UE va a reducir sus LMR para estos insecticidas hasta en un 80% en 2026.

“Básicamente, estamos exportando nuestra huella de pesticidas al extranjero”, dijo Mole. “Por el bien de la crisis mundial de la biodiversidad, el nuevo gobierno necesita urgentemente deshacer este desastre. Deberíamos adoptar un enfoque precautorio, que priorice la salud y el medioambiente por encima de las preocupaciones económicas”, matiza.

Un portavoz del ministerio de Medioambiente y Agricultura matizó que “las decisiones sobre los LMR solo se toman después de rigurosas evaluaciones de riesgos para asegurarse de que los niveles sean seguros para el público”. “Este gobierno cambiará las políticas existentes para prohibir el uso de pesticidas que matan a las abejas y establecerá planes para minimizar los riesgos e impactos de los pesticidas mediante una mayor adopción de la gestión integrada de plagas”, recalcó.

Reino Unido, sin datos

Los grupos de agricultores afirman a menudo que el peso total de los pesticidas aplicados a las tierras de Reino Unido se ha reducido a la mitad desde 1990. Esto es cierto, pero los tipos de pesticidas utilizados son cada vez más tóxicos, con un aumento del uso de productos químicos más nocivos y también de la superficie de tierra en la que se aplican.

En cualquier caso, no existe una imagen completa de la cantidad de pesticidas que se utilizan en Reino Unido porque, a diferencia de lo que ocurre en los países europeos, incluida Irlanda, los británicos no disponen de datos obligatorios sobre las ventas, por lo que no puede saber cuánto se vende a las empresas agrícolas.

Desde que se inventaron en la década de 1940, la toxicidad de los pesticidas se ha disparado. Algunos sostienen que esto es bueno, porque significa que es necesario utilizar menos y que se puede dirigir a determinadas especies en lugar de aplicarse de forma generalizada a toda una zona cultivada. Sin embargo, también significa que en el Reino Unido se están aplicando ampliamente productos químicos altamente tóxicos que matan insectos y otras formas de vida. En definitiva, significa que los seres humanos y la vida silvestre no están necesariamente menos expuestos a la toxicidad que cuando se aplicaba una mayor cantidad de pesticidas más débiles.