"¡Soy un nazi negro!": el líder republicano en un estado clave para Trump revienta la carrera

Mark Robinson, candidato republicano a gobernador de Carolina del Norte, se encuentra en el epicentro un terremoto político a raíz de una investigación de CNN que saca a la luz comentarios explosivos que hizo en un foro pornográfico hace más de una década. En ese espacio, Robinson se describió como un "nazi negro", abogó por el regreso de la esclavitud y lanzó insultos antisemitas y homofóbicos. A pesar de la presión pública para que abandone la carrera, Robinson se aferra a su candidatura, alimentando una controversia que podría arrastrar a Donald Trump en Carolina del Norte, el estado identificado como más importante en su camino hacia la Casa Blanca.

Entre 2008 y 2012, Robinson publicó en el foro "Nude Africa" una serie de mensajes incendiarios, donde proclamó "¡Soy un NAZI negro!", y afirmó: "La esclavitud no es mala. Algunas personas necesitan ser esclavas. Ojalá la trajeran de vuelta. Definitivamente, compraría unas cuantas". También dijo preferir a Adolf Hitler antes que a Barack Obama, llamo “maldito bastardo comunista” a Martin Luther King y confesó su gusto por la pornografía transgénero, en contradicción con su postura pública de rechazo a los derechos de las personas trans, a quienes ha descrito públicamente como "abominaciones" y "parte de la agenda del diablo".

CNN decidió publicar solo una parte de los mensajes atribuidos a Robinson debido a su naturaleza sexualmente explícita y gráfica. Para confirmar que el candidato era el autor de los mensajes, la cadena estadounidense identificó al usuario "minisoldr", un alias que Robinson utilizaba habitualmente en línea. El informe también reveló que Robinson había registrado su nombre completo y una dirección de correo electrónico que utilizó en varios sitios web durante décadas, lo que permitió a CNN vincularlo con las publicaciones en el foro pornográfico​.

Robinson ha rechazado las evidencias, calificándolas de "mentiras sensacionalistas". En un video publicado antes de que CNN difundiera la noticia, Robinson aseguró que esas no eran sus palabras y desestimó los informes como un ataque orquestado por sus rivales políticos. Además, acusó a su contrincante demócrata, Josh Stein, de estar detrás de la filtración para desacreditarlo de cara a las elecciones.

Carolina del Norte es absolutamente crucial para Trump porque, sin sus 16 votos electorales, su camino hacia la Casa Blanca se vuelve extremadamente difícil. Este estado ha sido un bastión republicano en la mayoría de las elecciones recientes, pero los márgenes de victoria se han estrechado considerablemente, lo que lo convierte en un campo de batalla esencial. Perder aquí obligaría a Trump a compensar en otros estados clave todavía más inciertos, como Georgia o Arizona, complicando enormemente las posibilidades de ganar la presidencia​.

Mark Robinson es el último ejemplo de una serie de candidatos extravagantes y vulnerables que han ascendido en el Partido Republicano por adular e imitar a Donald Trump. Muchos de estos candidatos han replicado el estilo bronco y plagado de teorías de la conspiración de Trump, respaldando sus falsas afirmaciones de fraude electoral y ganándose el apoyo de su misma base de votantes. Sin embargo, muchos altos cargos del partido culpan a estos mismos candidatos de haber entregado el poder a los demócratas en recientes elecciones legislativas, senatoriales y de gobernaciones, debilitando la posición del partido en momentos clave.

El respaldo de Trump a Robinson, quien lo ha elogiado en múltiples ocasiones y descrito como "Martin Luther King en esteroides", podría poner en riesgo el apoyo de votantes moderados a nivel nacional, vitales en una elección tan polarizada. Por ello, la campaña del candidato presidencial se ha distanciado rápidamente del político de Carolina del Norte, aunque no ha llegado a pedir su renuncia.