"Golpe contra Rusia": ¿por qué la detención del fundador de Telegram ha dado miedo en Moscú?
Tras el arresto de Pável Dúrov, los medios pro-Kremlin critican el "doble rasero" de Occidente para defender la libertad de expresión y aseguran que solo en Rusia "se puede respirar libremente"
Según la policía francesa, el fundador de Telegram, Pável Dúrov, está acusado de "inacción en relación con crímenes financieros y cibernéticos” cometidos utilizando la aplicación de mensajería. Pero para la mayoría de los medios pro-Kremlin rusos, propagandistas y funcionarios, no hay duda de que la detención de Dúrov indica que los gobiernos occidentales están tratando de tomar el control de la plataforma, centrada en la privacidad, para usarla contra Rusia.
“Todos los que están acostumbrados a usar el chat para conversaciones sensibles deben eliminarlas de inmediato y no hacerlo de nuevo”, dijo la editora en jefe de RT, Margarita Simonyan. “Porque lo arrestaron para tomar las llaves. Y él las entregará”, continuó, refiriéndose a las claves criptográficas que permiten acceder a la comunicación privada en Telegram.
Pável Dúrov siempre ha tenido una relación complicada con su patria, Rusia. Por un lado, es uno de los empresarios más exitosos del país, tras haber fundado la mayor plataforma de redes sociales de Rusia, VKontakte, y luego la aplicación de mensajería Telegram. Por otro, cuando en 2014 los servicios de seguridad rusos le pidieron que compartiera información sobre los organizadores de las protestas de Maidán en Ucrania, se negó y dejó el país poco después.
Mientras que anteriormente Durov fue criticado por negarse a colaborar con las autoridades, ahora los medios rusos lo defienden activamente, presentándolo como un rehén que Occidente está utilizando en su conflicto con Rusia.
“Creía que sus mayores problemas estaban en Rusia”, afirmó el vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, Dmitry Medvedev. “Se equivocó. Para todos nuestros enemigos comunes ahora, él es ruso y, por lo tanto, impredecible y peligroso”, escribió Medvedev en Telegram.
Otros propagandistas están usando la detención de Dúrov como el último intento de señalar los “dobles raseros” de Occidente cuando se trata de proteger la libertad de expresión. “La detención de Pável Dúrov confirmó que no existe libertad de expresión en Europa ni a nivel global (pro occidental)”, dijo Sergei Mironov, un veterano político ultranacionalista.
“Solo en Rusia se puede respirar libre y fácilmente”, dijo el pop star y propagandista ruso Shaman, dirigiéndose directamente a Durov. “Vuelve a casa. Aquí siempre te recordamos, te esperamos y te amamos”. Los medios pro-Kremlin, en su mayoría, no han mencionado que las autoridades rusas intentaron bloquear Telegram en 2018, cuando Durov se negó a compartir las claves criptográficas con las autoridades para “luchar contra el terrorismo”. El intento de bloqueo finalmente fue infructuoso y se terminó en 2020.
Mientras que la mayoría de los medios y comentaristas rusos se apresuraron a tomar una postura sobre la detención de Durov, la posición oficial del Kremlin ha sido más cautelosa: “Antes de decir algo, es necesario esperar a que se aclare la situación: ¿qué es lo que exactamente intentan imputar a Durov?”, declaró el portavoz de Putin, Dmitry Peskov.
Peskov también ha negado los rumores sobre una supuesta reunión entre Durov y el presidente ruso, Vladímir Putin, en Azerbaiyán, justo antes del arresto del empresario.
La detención de Dúrov es una de las raras ocasiones en que las opiniones de los políticos y medios pro-Kremlin tienden a coincidir con los líderes de la oposición rusa en el exilio. “No considero a Pável Dúrov un criminal y espero que pueda probar su inocencia en los tribunales”, indicó el líder opositor Ilya Yashin, quien definió las acusaciones contra Durov como “por decirlo de manera suave, dudosas”.
En el pasado, Telegram se utilizó como herramienta por la oposición rusa para difundir información, evitando la censura de los medios controlados por el Kremlin y como plataforma para coordinar protestas masivas.
“Estoy seguro de que Dúrov será liberado hoy (ya sea bajo fianza, con una promesa escrita, o incluso simplemente así), y eso sería lo correcto”, coincidió Ivan Zhdanov, director de la Fundación Anticorrupción de Aleksey Navalny.
Influencia de blogueros ultranacionalistas rusos
Pero quizás las reacciones más acaloradas sobre la detención de Dúrov provienen de los blogueros ultranacionalistas rusos, 'blogueros Z', que han adquirido una enorme popularidad en Telegram tras la invasión rusa de Ucrania. Boris Rozhin, autor del popular canal militar Colonel Cassad, publicó una imagen de un cohete con la frase “Para Durov” escrita en él. “Sabemos quién será definitivamente responsabilizado por Pasha”, refiriéndose a los ucranianos y a sus aliados occidentales.
Telegram ha permitido a los 'blogueros Z' eludir tanto el filtro de la propaganda estatal oficial como el de las plataformas occidentales como YouTube o Facebook, que frecuentemente han prohibido contenido que promueva o justifique la invasión de Ucrania. Pero la discusión en torno a la detención de Dúrov va más allá del tema de la libertad de información y se convierte en un asunto de seguridad: el ejército ruso ha estado utilizando extensamente Telegram como un canal de comunicación cerrado en el campo de batalla en Ucrania.
Algunos observadores están preocupados de que las claves privadas de la aplicación de mensajería cifrada podrían ser entregadas a los servicios de inteligencia occidentales y utilizadas contra Rusia en la guerra en Ucrania. “De hecho, este es el principal mensajero de la guerra actual”, señaló el periodista Andrey Medvedev. “Probablemente, a partir de hoy, el tema de crear un mensajero militar para nuestro ejército se está volviendo de vital importancia”, continuó.
Según Baza, un canal de Telegram conectado a las fuerzas de seguridad, se ha ordenado a los funcionarios de la administración presidencial rusa, altos funcionarios del Ministerio de Defensa de Rusia y empleados de algunas agencias de seguridad que eliminen las conversaciones de trabajo de Telegram.
Según la policía francesa, el fundador de Telegram, Pável Dúrov, está acusado de "inacción en relación con crímenes financieros y cibernéticos” cometidos utilizando la aplicación de mensajería. Pero para la mayoría de los medios pro-Kremlin rusos, propagandistas y funcionarios, no hay duda de que la detención de Dúrov indica que los gobiernos occidentales están tratando de tomar el control de la plataforma, centrada en la privacidad, para usarla contra Rusia.
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