Amenaza en 80 ciudades de Ucrania: las imágenes de cómo ha quedado la presa de Kajovka en Jersón

La presa de Nova Kajovka, una de las más grandes de Ucrania e infraestructura energética clave para el país, ha quedado destruida por una explosión la madrugada del martes, en lo que las autoridades regionales y militares de Ucrania han calificado como un “ecocidio, atentado terrorista, y tragedia devastadora”, pues supondrá un desastre humanitario y medioambiental a gran escala en el sur del país.

“Morirán decenas de miles de toneladas de peces y una biosfera única. Los nidos de millones de pájaros en los humedales a lo largo de la margen izquierda del río Dniéper se han inundado”, ha afirmado Anton Gerashchenko, asesor del ministro del Interior de Ucrania, quien aseguró, además, que “el canal del norte de Crimea ahora se secará y permanecerá así durante mucho tiempo, y la gente del sur y de Crimea se quedará sin agua potable”.

Situada en el río Dnipro, a su paso por la región de Jersón, esta presa fue construida en 1956 y abastece de agua a la península de Crimea, alimenta la central hidroeléctrica de la región y a la central nuclear de Zaporiyia, ambas bajo control ruso desde el inicio de la invasión. Tiene 30 metros de altura y 3,2 kilómetros de largo.

"Se derrumbó como un castillo de naipes"

Las imágenes de un vídeo difundido en redes sociales muestran claramente una brecha importante en la sección de la presa más cercana a la orilla oriental del río ocupada por los rusos. Según un residente de un asentamiento cercano citado por Ukrainska Pravda, hubo una sola explosión, después de lo cual la presa “se derrumbó como un castillo de naipes”. Además, 11 de las 28 válvulas de la central hidroeléctrica cercana han sido destruidas.

La policía nacional de Ucrania ha pedido la evacuación urgente de los residentes de ocho aldeas (Tiahinka, Lvove, Odradokamianka, Ivanivka, Mykilske, Tokarivka, Poniativka, Bilozerka) y el distrito de Ostriv en Jersón, situadas todas ellas a lo largo de la orilla del río Dnipro, ya que estaban “total o parcialmente inundadas”. No obstante, se estima que en apenas unas pocas horas el agua podría inundar al menos 80 asentamientos cercanos a la orilla del río.

“La destrucción de la presa de la central hidroeléctrica Kajovka solo confirma al mundo que los rusos deben ser expulsados de todos los rincones de la tierra ucraniana. No se les debe dejar ni un solo metro, porque lo usan para el terror. Solo la victoria de Ucrania devolverá la seguridad”, escribió el presidente, Volodímir Zelenski, en Twitter en respuesta al ataque. El Consejo de Defensa y Seguridad Nacional de Ucrania ha sido convocado para una reunión de emergencia, según el jefe del consejo, Oleksii Danilov.