Es noticia
La batalla paralela rusa: ¿está preparando Putin una puñalada trapera contra Wagner?
  1. Mundo
'No tienen táctica ni estrategia'

La batalla paralela rusa: ¿está preparando Putin una puñalada trapera contra Wagner?

Algunos informes apuntan que el Ministerio de Defensa ruso quiere dejar de lado al Grupo Wagner en la nueva ofensiva en Ucrania por las luchas internas de poder

Foto: Funeral de un miembro de Grupo Wagner en San Petersburgo, el 24 de diciembre de 2022. (Reuters/Igor Russak)
Funeral de un miembro de Grupo Wagner en San Petersburgo, el 24 de diciembre de 2022. (Reuters/Igor Russak)
EC EXCLUSIVO Artículo solo para suscriptores

El "ejército privado" de Vladímir Putin en Ucrania se está alejando cada vez más de la persona menos esperada: el propio Putin. El Grupo Wagner ha tenido un papel clave en la ofensiva rusa, sobre todo en la batalla de Bakhmut, una de las más sangrientas para los dos bandos y con un objetivo más simbólico que militar. Sin embargo, algunos informes apuntan a que el número de efectivos ha bajado considerablemente justo antes del inicio de la escalada del Kremlin. El propio líder del grupo, Yevgeny Prigozhin, ha reconocido que dejarán de reclutar a prisioneros, una de sus tácticas para engordar el número de miembros. "Se ha detenido. Todas las obligaciones con nosotros han sido cumplidas", dijo Prigozhin. ¿Está Putin allanando el terreno para deshacerse de Wagner?

Las relaciones entre Rusia y los contratistas militares han sido cercanas, pero no siempre de puertas afuera. Los "mercenarios" han estado presentes en conflictos como en Siria, Libia y la República Centroafricana y han sido descritos por expertos como la fuerza en la sombra del Kremlin porque ejercían una influencia en lugares donde a Rusia no le interesaba estar oficialmente presente. A las afirmaciones altos mandos rusos y del propio Putin negando el vínculo con Wagner (llegó a decir que "si hay ciudadanos rusos en Libia, lo están a título personal"), la invasión lo cambio todo. "Durante el curso de la operación militar especial [en Ucrania], los guerreros del Grupo Wagner se han convertido en símbolos genuinos del valor militar", anunció el presentador Ruslan Ostashko en la televisión estatal rusa.

Foto: Protesta a favor de Vladímir Putin y Rusia, en abril de 2022. (Reuters/Zorana Jevtic)

A finales de 2022, el grupo incluso inauguró el Centro PMC (compañía militar privada, por sus siglas en inglés) Wagner en San Petersburgo, un bloque de edificios presentado como una sede para "inventores, desarrolladores de proyectos, especialistas en TI, fabricantes experimentales y varias empresas emergentes" en el sector de la defensa rusa. Ahora, esta época dorada de las relaciones entre Wagner y Rusia está empezando a ennegrecerse. "El grupo Wagner ya no necesitaría a un gran número de voluntarios porque el Ministerio de Defensa ruso podría tener la intención de dejar de lado al Grupo en futuras ofensivas en Ucrania", apuntaba un informe del Institute for the Study of War.

El Ministerio de Defensa británico calcula que Wagner está formado por cerca de 50.000 personas, frente a las 5.000 de antes de febrero de 2022. Sin embargo, el consejo de seguridad de Estados Unidos calcula que el 80% de sus fuerzas en Ucrania son antiguos prisioneros, la mayoría condenados por delitos que van desde el robo hasta el asesinato, que han sido liberados para luchar. En las últimas semanas, este reclutamiento ha bajado drásticamente, teniendo en cuenta las estadísticas del Servicio Penitenciario Federal de Rusia que muestran que la población de prisioneros rusos disminuyó en 6.000 en los últimos tres meses. En los meses anteriores, cuando Wagner estaba en medio de su campaña de reclutamiento en las cárceles, la disminución llegó a los 23.000 prisioneros.

La disminución de las fuerzas de Wagner responde a varias hipótesis y una de ellas apunta directamente al líder, el llamado chef de Putin. "El escenario es complicado, porque Wagner ha dado victorias militares, pero a la vez Prigozhin se ha convertido en un problema para los oficiales", apunta Ruslan Trad, investigador principal de seguridad de Atlantic Council y experto en las operaciones del Grupo Wagner, a El Confidencial. "En Rusia, la lucha por el poder es hasta más importante que la del frente", subraya.

De 'chef de Putin' a... ¿enemigo de Putin?

El líder de Wagner ha sido muy crítico con la estrategia militar de Moscú, y se ha enfrentado en varias ocasiones a los jefes de defensa por las pérdidas en el frente y por lo que ha considerado retiradas humillantes durante la guerra. Estas declaraciones, así como el anunciar a bombo y platillo triunfos en el frente, han provocado muchas molestias en Moscú. El mejor ejemplo fue la batalla de la ciudad de Soledar, que Wagner afirmó que había conquistado. Sin embargo, el Kremlin fue mucho cauteloso antes de anunciar la victoria y desmintió las afirmaciones de los "mercenarios", lo que puso en evidencia un conflicto o, como mínimo, una falla de comunicación entre el "ejército de Putin" y Rusia.

Otra señal del empeoramiento de las relaciones fue el nombramiento de Valeri Gerásimov como nuevo jefe de Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Rusia. El general ruso es un aliado fiel a Putin y los analistas del Institute for the Study of War apuntaron a que la promoción de Gerásimov puede buscar el refuerzo de las estructuras de poder tradicionales como el Ministerio de Defensa contra desafíos como el de Prigozhin y otros críticos con Moscú. "El nombramiento probablemente promueve dos esfuerzos del Kremlin: un intento de mejorar el comando y control ruso para un esfuerzo militar decisivo en 2023, y un movimiento político para fortalecer el Ministerio de Defensa ruso contra los desafíos de los blogueros (una de las voces más importantes de la guerra por la censura rusa) y siloviki (hombres fuertes) como el Grupo Wagner", apuntaba el informe publicado a finales de enero.

Foto: Putin y Gerásimov en un evento de 2022. (Mikhail Kuravlev Kremlin/Reuters)

Por otro lado, Putin podría estar insatisfecho con los avances tácticos de Wagner en Ucrania. A pesar de avances en frentes como el de Soledar, el triunfo de la batalla de Bakhmut, calificada por una "trituradora de carne" por el líder de Wagner, se está alargando más de lo que a Moscú le gustaría.

El desempeño y táctica militar de los "mercenarios" han sido descritos por antiguos exmiembros de Wagner como uno de los principales problemas del grupo. Andrei Medvedev es uno de los voluntarios de Wagner que consiguió huir de Ucrania después de luchar en la zona de Donetsk, uno de los puntos clave de los planes de Putin en el Donbás. La historia de Medvedev, publicada en CNN, muestra las tácticas "despiadadas" del grupo y de Prigozhin. "Reunían a los que no querían pelear y les disparaban frente a los recién llegados", afirma. Pero detrás de esta imagen sangrienta, el exmercenario muestra la otra cara de Wagner. "No tienen tácticas reales, ni órdenes definidas sobre qué debíamos hacer. Solo planeábamos quién abriría fuego y los turnos. Ese era nuestro problema".

placeholder Andrei Medvedev, el 1 de febrero de 2023. (Reuters/Janis Laizans)
Andrei Medvedev, el 1 de febrero de 2023. (Reuters/Janis Laizans)

La falta de estrategia contrasta con las misiones en otros conflictos donde estuvo presente, como Siria, Libia y la República Centroafricana. "Allí era más una fuerza de apoyo, una fuerza de entrenamiento y una unidad que interviene como último recurso", afirma Ruslan Trad, a este periódico.

Antes de la invasión de Ucrania, la mayoría de miembros de Wagner eran soldados y veteranos de las fuerzas especiales, hasta que apostaron por integrar a exconvictos para aumentar el número de efectivos. "Los criterios de inclusión se redujeron y las operaciones de Wagner en Ucrania se convirtieron en una parte cada vez más integrada del comando militar ruso, continúa el analista. "En mi opinión, en gran medida, la calidad ha disminuido en Ucrania debido a la inclusión de reclutas y prisioneros mal entrenados, así como al débil mando del mando ruso".

A pesar de la falta de estrategia en el frente que describe Andrei Medvedev, Wagner tiene un amplio acceso a las armas y hasta a aviones de ataque Su-25 y tanques T-90. "Ninguna otra empresa militar privada en el mundo opera sistemas de misiles estratégicos como el S-300. En dos regiones rusas cercanas a Ucrania, Belgorod y Kursk, Prigozhin ha establecido estructuras militares paralelas, incluidas instalaciones de entrenamiento y centros de reclutamiento. En diciembre, inauguró un importante centro de tecnología de defensa en San Petersburgo", sostienen los analistas Peter Rough y Can Kasapoglu en un artículo de Foreign Policy.

Al respecto, el analista Ruslan Trad aclara a este periódico que una parte del armamento de Wagner proviene del ejército ruso porque forma parte de la red militar del Kremlin. "Adicionalmente, el grupo cuenta con el poder financiero de su principal donante, Yevgeny Prigozhin, quien, a través de sus empresas, logra financiar las operaciones", sostiene. Adicionalmente, el grupo de mercenarios también se apoya en campañas de donaciones y voluntarios para el envío de drones y otros equipos.

"Sigue adelante hasta que te maten"

Wagner tiene el armamento para luchar en Ucrania, pero sus avances en este frente distan mucho en lo que consiguió en otros frentes. En África y Siria, afirma Trad, los Wagner operaron detrás de las líneas del frente, utilizando guerra electrónica y operaciones especiales que tuvieron un gran éxito. "Este se debió en gran parte a la participación de unidades bien entrenadas, soldados con experiencia de combate de otros conflictos y de los primeros días de la invasión rusa en 2014. En este sentido, cuando operaba como una unidad separada y en coordinación con otras fuerzas Spetsnaz, ha tenido logros", añade el investigador principal de seguridad de Atlantic Council.

Al incorporarse a las fuerzas rusas, Wagner ha reducido la calidad de sus acciones militares y se ha convertido en un destacamento dependiente de Rusia. Ruslan Trad concluye que el grupo Wagner no puede avanzar solo, aunque se le proporcionara la libertad de acción y decisión. "No puede lograr milagros", sentencia. Primero, porque el número de soldados no es lo suficiente importante como para poder actuar en solitario y, segundo, por la falta de organización y profesionalización de sus equipos.

Más allá de las tácticas militares, la caída del reclutamiento de Wagner a la que apuntaba ISW también respondería a los comportamiento de los altos mandos en el frente. Andrei Medvedev describió en sus entrevistas con medios internacionales un sistema de incentivos construido por Wagner, basado en intentar atraer a nuevos miembros para sus filas con métodos éticamente cuestionables y que rozan la ilegalidad. El exmercenario estaba a cargo de un destacamento de prisioneros que fueron enviados a misiones casi suicidadas alrededor de Bakhmut. "Nos dijeron: 'Sigue adelante hasta que te maten'", recordó.

Foto: Ucranianos en la línea de frente de Bajmut. (Reuters/Oleksandr Ratushniak)
TE PUEDE INTERESAR
Rusia mueve sus piezas para recuperar la iniciativa: jaque a Kiev en cuatro jugadas
Mónica Redondo Infografía: Emma Esser

Muchos prisioneros rusos, así como otros posibles voluntarios, son conscientes de la reputación de Wagner y de su líder para usarlos en "ataques de oleadas humanas altamente desgastantes", un motivo para evitar unirse al grupo.

Esta es una de las apuestas del ejército ruso: el despliegue masivo de soldados. Con esta estrategia, en la que participan tanto efectivos rusos como efectivos de Wagner, han conseguido ganar terreno en Bakhmut y poner en peligro el control de Ucrania en esta ciudad que Moscú ha convertido en su objetivo militar más inmediato. El general ucraniano Mykhailo Koval describió esta táctica como una señal de debilidad y dijo que mientras las fuerzas de Kiev utilizan cohetes de alta precisión para destruir reservas de municiones, Rusia utiliza a soldados sin entrenamiento como carne de cañón. "Quieren aterrorizarnos con ellos, pero los Wagner son igual de vulnerables a las balas", dijo a Wall Street Journal.

Sin embargo, funcionarios ucranianos reconocieron que, a pesar de sus soldados están mejor entrenados, se han visto abrumados por el número de personas que se enfrentaron contra ellos. Michael Kofman, director de estudios rusos del instituto de investigación CNA, aclaró a The New York Times que esta situación puede obstaculizar las ofensivas de Ucrania en un futuro, sobre todo porque ya no tiene una ventaja en lo que respecta al número total de tropas.

El objetivo de Wagner en África

Es posible que Vladímir Putin esté allanando el terreno para que, a diferencia de lo que pasó en Soledar, las futuras victorias sean solamente atribuibles a sus fuerzas y no a su "ejército privado". Sin embargo, Wagner está muy lejos de disminuir su influencia en los otros flancos que tiene abiertos con Rusia.

Las actividades del grupo son especialmente activas en el Sahel, sobre todo en República Centroafricana, Libia, Malí y Mozambique. James Kariuki, embajador adjunto de Gran Bretaña ante las Naciones Unidas, advirtió en enero sobre el "papel desestabilizador que juega el Grupo Wagner". Un artículo de Foreign Policy recalcó que en la región se han registrado abusos contra los derechos humanos y que el trabajo del grupo de "mercenarios" del Kremlin se basa en brindar seguridad a los regímenes cleptocráticos a cambio del acceso a productos valiosos, como oro, diamantes, uranio y otros recursos preciosos.

Este tipo de acciones son las que les han puesto en el punto de mira desde hace años y la guerra de Ucrania los ha convertido en "enemigos conocidos" para los países occidentales. Kariuki resumió en una frase la que seguramente sea la esencia de Wagner. Se refería a la presencia del grupo en el Sahel, pero puede trasladarse también a la guerra de Ucrania. "Son parte del problema, no de la solución".

El "ejército privado" de Vladímir Putin en Ucrania se está alejando cada vez más de la persona menos esperada: el propio Putin. El Grupo Wagner ha tenido un papel clave en la ofensiva rusa, sobre todo en la batalla de Bakhmut, una de las más sangrientas para los dos bandos y con un objetivo más simbólico que militar. Sin embargo, algunos informes apuntan a que el número de efectivos ha bajado considerablemente justo antes del inicio de la escalada del Kremlin. El propio líder del grupo, Yevgeny Prigozhin, ha reconocido que dejarán de reclutar a prisioneros, una de sus tácticas para engordar el número de miembros. "Se ha detenido. Todas las obligaciones con nosotros han sido cumplidas", dijo Prigozhin. ¿Está Putin allanando el terreno para deshacerse de Wagner?

Conflicto de Ucrania Vladimir Putin
El redactor recomienda