La OTAN activa su defensa contra ataques químicos o nucleares ante la retórica de Putin
Los aliados renuevan su compromiso con el aumento del gasto militar, el envío de armas y apoyo a Ucrania y han advertido a Pekín sobre el posible apoyo a Rusia
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Los líderes de la Alianza Atlántica, reunidos en una cumbre extraordinaria en Bruselas, han analizado lo que este miércoles el secretario general, Jens Stoltenberg, calificaba de “ruido de sables nuclear” por parte del Kremlin. Y, en consecuencia, han decidido encargar que se activen “los elementos de defensa química, biológica, radiológica y nuclear de la OTAN”, ha señalado el noruego.
La Alianza Atlántica se ha mostrado preocupada desde hace semanas ante la posibilidad de que Moscú esté preparando un pretexto para el uso de armas de este tipo en Ucrania. El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, ha asegurado que hay un “riesgo real” de ataque químico en Ucrania, por lo que han anunciado el envío de equipamiento a Kiev para hacer frente a ese escenario. Pero la OTAN también se prepara para cualquier escenario ante la escalada retórica del Kremlin, incluso en suelo aliado. “También mejoraremos nuestra preparación para las amenazas químicas, biológicas, radiológicas y nucleares”, se comprometen los líderes en una declaración conjunta.
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La cumbre buscaba un “reseteo” de la defensa común, confirmando el refuerzo de la presencia de la alianza en el flanco oriental. En la cumbre de este jueves han anunciado el envío de cuatro nuevos batallones multinacionales a Bulgaria, Rumanía, Hungría y Eslovaquia como parte de un esfuerzo más amplio de despliegue y refuerzo de la presencia en el este ante la amenaza de Rusia. También han confirmado que se trata de un movimiento de largo recorrido y no de una simple respuesta a la situación actual: será la nueva normalidad de la Alianza, con más presencia, entrenamientos y botas sobre el terreno.
Además, los jefes de la Alianza han escuchado una intervención de Volodímir Zelenski, presidente ucraniano, que ha vuelto a solicitar una mayor implicación de la OTAN. Los aliados seguirán enviando armas a Kiev, seguirán asistiendo y apoyando a los ucranianos, pero dejado claro que no pretenden tomar ninguna decisión que pueda desembocar en un enfrentamiento directo del bloque con Rusia. Por otro lado, en la declaración conjunta que han aprobado los líderes, se vuelve a avisar a China de que no apoye a Rusia y se muestran “preocupados por los comentarios públicos recientes de los funcionarios de la República Popular China". "Pedimos a China que deje de amplificar las narrativas falsas del Kremlin”, sentencia el texto.
Aumento de gasto en defensa
En los últimos días, han sido muchos los miembros que han anunciado aumentos importantes en su inversión en defensa, y en la declaración final los líderes han señalado que todos los países presentarán planes renovados para cumplir con sus objetivos de gasto militar cuando se reúnan en verano en Madrid.
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“Hemos decidido acelerar nuestros esfuerzos para cumplir con el compromiso de inversión en defensa en su totalidad. De acuerdo con nuestro compromiso en el Artículo 3 del Tratado de Washington, fortaleceremos aún más nuestra capacidad individual y colectiva para resistir todas las formas de ataque. En nuestra reunión en Madrid, presentaremos planes adicionales sobre cómo cumplir con el Compromiso”, subraya la declaración aprobada este jueves. Ese compromiso señala que los miembros deben gastar al menos el equivalente al 2% del PIB en defensa.
Desde hace años, Estados Unidos se queja de que los socios transatlánticos no arriman suficientemente el hombro y que Washington lleva demasiado el peso de toda la alianza. De la queja estadounidense surgió ese compromiso del 2%, que en realidad muy pocos miembros han cumplido. El expresidente Donald Trump lo convirtió en una obsesión durante su tiempo en la Casa Blanca. Ahora la invasión rusa de Ucrania, la percepción de un aumento del riesgo para Europa y la certidumbre de que el gasto en defensa es necesario han dado un nuevo impulso al compromiso.
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Además, los líderes han anunciado que extienden el mandato de Stoltenberg, cuyo periodo al frente de la OTAN finalizaba en principio en septiembre de 2022. El antiguo primer ministro noruego había sido anunciado como próximo gobernador del banco central del país a partir de diciembre de este año. La noticia llegó el 4 de febrero, ya en plena escalada previa a la invasión rusa de Ucrania. Muchos entendieron que no era el momento de ese tipo de anuncios, aunque el noruego explicó que finalizaría su mandato. Se escogería a un sucesor o sucesora en la cumbre de Madrid.
Pero precisamente porque no era el momento, con una tensión sin precedentes desde hace décadas, los líderes han decidido prorrogar el mandato de Stoltenberg hasta septiembre de 2023. “Los aliados agradecieron al Secretario General por su liderazgo y dedicación, particularmente en este momento crítico para la seguridad internacional”, señala el breve comunicado con el que se ha anunciado la decisión al finalizar el encuentro.
Los líderes de la Alianza Atlántica, reunidos en una cumbre extraordinaria en Bruselas, han analizado lo que este miércoles el secretario general, Jens Stoltenberg, calificaba de “ruido de sables nuclear” por parte del Kremlin. Y, en consecuencia, han decidido encargar que se activen “los elementos de defensa química, biológica, radiológica y nuclear de la OTAN”, ha señalado el noruego.