Argelia anuncia represalias contra Marruecos tras el "asesinato" de tres argelinos

Argelia ha acusado a Marruecos de haber matado a tres ciudadanos argelinos en un aparente bombardeo contra el Frente Polisario saharaui el pasado primero de noviembre. En un comunicado de la oficina de la presidencia de la República argelina, se añade, además, que "su asesinato no quedará impune", dando a entender que tomará represalias contra Marruecos, con quien Argel rompió relaciones el pasado agosto y mantiene una creciente tensión en la frontera. La muerte de los tres ciudadanos argelinos, camioneros y presuntamente confundidos con operativos polisarios por las fuerzas de Rabat, puede ser la espita que termine por desatar el conflicto abierto entre ambos países.

Los tres camioneros argelinos fueron “cobardemente asesinados mediante un bombardeo salvaje de sus camiones” por el Ejército de Marruecos, según señala el comunicado, que no precisa dónde exactamente sufrieron el ataque del Ejército marroquí. En un vídeo distribuido en las últimas horas y que corresponde al momento del incidente, se puede ver los restos carbonizados de al menos dos camiones, después de haber recibido el impacto de un misil.

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Ignacio Cembrero

Los camiones se desplazaban desde Nuakchot (Mauritania) hasta Ouargia, en el sureste de Argelia, y para hacer ese recorrido por pista pudieron quizás adentrarse por el extremo este del Sáhara Occidental. Esa franja del territorio está controlada por el Frente Polisario y parece probable que el Ejército marroquí les haya confundido con vehículos pertenecientes al movimiento independentista saharaui. Este está en guerra con Marruecos desde el 13 de noviembre de 2020.

El comunicado argelino precisa que los camioneros fueron atacados con “armas sofisticadas” dando así a entender que las Fuerzas Armadas marroquíes quizás utilizaron drones que les ha vendido recientemente Israel. Marruecos e Israel establecieron relaciones diplomáticas en diciembre de 2020.

La muerte de estos tres civiles es el incidente más grave entre los dos “pesos pesados” del Magreb desde que en 1963 concluyó la llamada “guerra de las arenas” que desencadenó Marruecos. La relación entre Rabat y Argel no ha parado de deteriorarse desde que en 1994 quedó cerrada la frontera terrestre entre los dos países.

El nuevo incremento de la tensión entre Argel y Rabat se veía venir desde que, en noviembre pasado, se rompió el alto el fuego en el Sáhara Occidental. El reconocimiento por parte de Donald Trump de la soberanía marroquí sobre el territorio en disputa terminó de sacudir el delicado equilibrio de poder en la región entre Argelia y Marruecos, que mantienen la frontera terrestre cerrada desde 1994. En agosto, Argel rompió relaciones diplomáticas con Rabat y, más tarde, prohibió a los aviones marroquíes —civiles y militares— entrar en su espacio aéreo. El último golpe contra Marruecos ha sido el cierre este domingo del gasoducto Magreb-Europa, que exporta gas argelino a España a través de Marruecos. La muerte ahora de tres ciudadanos argelinos presuntamente a manos del Ejército marroquí, y las represalias anunciadas por Argel, hace temer que la escalada de tensión desemboque de nuevo en un conflicto abierto.