Elecciones EEUU 2020: el mapa por estados pintado con los resultados de un país en vilo

Una éxito de participación, un recuento de votos larguísimo y unos resultados muy estrechos: el pasado 3 de noviembre comenzaron las elecciones de Estados Unidos y se presuponían tres posibles escenarios, y aunque todavía no hay ninguno claro, todo apunta a una dirección: aún quedan algunos estados por terminar su conteo de votos (con varios estados clave), pero aún así, el candidato del Partido Demócrata, Joe Biden, está cada vez más cerca de los 270 votos electorales necesarios para hacerse con la Casa Blanca. Mientras, Donald Trump ha seguido la estrategia de generar dudas en torno al conteo de los votos y al "mágico" cambio de color de algunos de los estados clave. Era de esperar que los resultados definitivos podrían demorarse varios días, debido, principalmente, al voto adelantado y por correo. A causa de la pandemia de coronavirus, muchos ciudadanos han optado por depositar sus papeletas con antelación, especialmente los de tendencia al voto demócrata, frente a los republicanos que han preferido personarse el mismo 3-N ante las urnas.

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La mayor parte de los estados ya tienen a un vencedor definitivo, mientras que en otros —varios estados clave, por ejemplo— la distancia entre ambos candidatos es tan pequeña que no es posible definir un claro vencedor. En Pensilvania, por ejemplo, un estado que entrega directamente 20 votos electorales al candidato ganador, quedan a penas un 1% de los votos por adjudicar, dio un vuelco para teñirse de color azul en favor de Biden, que lleva una ventaja de casi 29.000 votos; en Carolina del Norte, con el escrutinio al 99%, mantiene el republicano cierta ventaja, con algo más de 76.000 votos por delante de Biden.

¿Cómo han variado los estados desde 2016?

En las elecciones de 2016 el resultado fue quizás no inesperado pero al menos sí sorprendente: Donald Trump se impuso ante Hillary Clinton al superar la barrera de los 270 compromisarios necesarios para conseguir la mayoría, aunque no en lo que a voto popular se refiere. En los pasados comicios, más de 65,8 millones de personas votaron a la candidata demócrata, mientras que el republicano recibió algo menos de 63 millones de votos; no obstante, el sistema electoral en el país es indirecto, es decir, no son los ciudadanos los que eligen al presidente, sino que designan a un número de electores (los compromisarios) en cada estado. Así pues, para hacerse con la victoria lo que alguno de los candidatos debe conseguir es superar la barrera de los 270 compromisarios. Así están variado los resultados estado por estado con respecto a 2016:

Última actualización: 7 de noviembre a las 14:27
*En cursiva, los estados cuyos resultados no son definitivos

*De los resultados que se han ido adelantando, hay varios estados que han cambiado de color: Tennessee y Alabama han pasado del voto demócrata en 2016 al voto republicano en 2020: en ambos casos la última vez que el voto había sido mayoritariamente republicano fue en 2004, cuando George W. Bush inició su último mandato previo a la llegada de Barack Obama a la Casa Blanca. Otros tres lo han hecho en sentido opuesto: pasando de ser estados que venían del voto republicano al voto demócrata. AP ha dado la victoria al candidato demócrata en el estado de Arizona, ofreciendo un balón de oxígeno a Biden en una jornada un tanto ajustada. Se trata de la primera vez que el estado se tiñe de azul desde 1996. También Michigan y Wisconsin han virado hacia el color azul, con Wisconsin para los demócratas por una ligera diferencia de poco más de 20.000 votos a favor de Biden.

Los 'swing states' o estados clave de 2020

Aunque es un común en todos los procesos electorales de Estados Unidos, no siempre son los mismos los denominados 'swing states', estados clave o estados bisagra: se trata de algunos estados que en ocasiones dan la victoria a los republicanos y en otras, a los demócratas, siempre de manera ajustada, es decir, los que ninguno de los dos partidos tienen voto asegurado. En 2020 entre esos territorios a los que hay que prestar atención se encuentra Arizona, que ha pasado a manos de los demócratas, pero también Florida, donde ha sido Trump el que ha salido victorioso gracias al voto latino. Según 'The Cook', este año los estados clave son los siguientes, aunque algunos tienen algo más clara la tendencia hacia qué formación podrían decantarse:

• Florida: en 2020 Donald Trump repite victoria y se hace con los 29 votos del estado, gracias al apoyo de la comunidad latina. En los comicios de 2012 y 2008 el estado se decantó por Barack Obama, justo después de haber votado mayoritariamente republicano en los dos procesos anteriores.
• Georgia:el resultado está bastante ajustado, aunque con los datos algo más decantados por el actual mandatario republicano. Por Georgia precisamente ha entrado en el Congreso la primera persona simpatizante del movimiento QAnon, que difunde la teoría conspirativa de una guerra secreta satánica y pedófila asentada en la Casa Blanca y cuyo objetivo, dicen, es derrocar a Trump. Georgia votó por Trump en 2016, como vino haciendo en los anteriores procesos, siempre por el candidato republicano, desde 1996, la última vez que ganó un demócrata en el estado (Bill Clinton).
• Iowa: otro estado del Cinturón del Óxido que ha sido para Trump en las pasadas elecciones. En 2020, los resultados dan la victoria de nuevo al republicano.
• Carolina del Norte: con más del 90% de los votos escrutados, el republicano mantiene cierta ventaja con respecto al demócrata, aunque todavía no se ha confirmado que haya ganado el estado, dado que la diferencia entre ambos candidatos es de apenas unos miles de votos. Eso sí, si bien Biden esperaba conquistar este territorio, hasta ahora parece que acabará teñido de color rojo.
• Ohio: en 2016 Trump ganó el estado con mucha diferencia, ocho puntos. Lo hizo gracias al voto de los blancos de clase obrera de las zonas rurales y la región de los Apalaches, entre los que ya había arrasado en las primarias. Hasta entonces, Barack Obama se había adjudicado el estado las dos últimas elecciones, gracias al voto urbano y afroamericano. En 2020, repite Donald Trump. Hay que recordar que Ohio es el considerado 'termómetro' de las elecciones, ya que desde 1896 y salvo en dos ocasiones, el partido ganador en este estado ha sido el que se ha hecho con la Casa Blanca.
• Texas: aunque en su época fue un bastión demócrata, desde 1980 ha tendido algo más hacia el voto republicano —la última vez que votó demócrata fue en 1976, a Jimmy Carter—. Fue uno de los estados claramente rojos en la llegada de Trump a la Casa Blanca y en 2020 repite su voto a favor del magnate.
• Arizona: con el resultado de este estado Joe Biden se hace con 11 delegados más, tiñendo de color azul un estado que ha sido rojo desde la última legislatura de Bill Clinton.
• Michigan: es uno de los tres estados más importantes de estos comicios; aunque el recuento de votos iba a ser algo más tardío, la secretario de estado, Jocelyn Benson, mostró su confianza en la posibilidad de que se pudieran publicar los datos poco después del cierre de urnas, incluidos los entregados por correo. Desde los años noventa en este estado ha prevalecido el voto demócrata, hasta la irrupción de Trump, cuando se convirtió en la 'propina' del actual presidente. Hasta entonces y desde Bush en 1988, Michigan siempre había optado por los candidatos del Partido Demócrata. También este año, cuando Biden ha tenido una ventaja de unos 150.000 votos.
• Minnesota: este también es de los estados, con una historia reciente tradicionalmente demócrata, en 2020 también se lleva Biden. Si bien tuvo un inicio electoral con tendencia republicana, en 1932 ya se revirtió para votar, en cuatro ocasiones seguidas, por Franklin D. Roosevelt; desde el mandato de Harry Truman solo en tres ocasiones el estado ha votado republicano: en 1952 y 1956, a Eisenhower, y en 1972, a Richard Nixon.
• Nevada: es otro de los estados en los que Biden busca aguantar el embiste republicano. Tras votar por Hillary Clinton en 2016 (y por Obama en las dos elecciones anteriores), el demócrata mantiene cierta ventaja, aunque todavía quedan votos por contar.
• New Hampshire: el año 2000 fue la última vez que el estado se decantó por el candidato republicano (Bush), y 2020 no ha sido excepción: los demócratas mantienen este estado.
• Pensilvania: en estas elecciones ha sido el estado más relevante. Biden luchará la batalla por hacerse con su estado natal, pero aún quedan unos 800.000 votos por contar.
• Wisconsin: es el último de los tres estados más importantes para los comicios de 2020, junto a Pensilvania y Michigan. La derrota demócrata de 2016 (a pesar de que las encuestas predecían la victoria de Hillary Clinton) supuso un golpe para el partido que venía ganando desde mediados de la década de los ochenta; Trump se impuso en Wisconsin con una corta ventaja, inferior a un punto. En esta ocasión, se ha producido una victoria demócrata, lo que entrega a Joe Biden una decena más de votos electorales.