Manifestantes contra el racismo en EEUU decapitan a Colón: "Representa el genocidio"

La estatua de Cristóbal Colón situada en la céntrica calle Atlantic Avenue de Boston ha amanecido decapitada esta mañana después de una nueva jornada de protestas contra el racismo en Estados Unidos. Varias horas antes, un grupo de manifestantes ha derribado, incendiado y arrojado a un lago otra escultura en homenaje al navegante más célebre de la historia en el parque Byrd de Richmond, en el estado de Virginia. En la base, un cartel pintado con espray marcaba su sentencia: "Representa el genocidio".

Del acto de Boston no se conocen demasiados detalles, más allá de las imágenes captadas por cadenas como '7News' o 'CBS', pero todo parece indicar que el 'modus operandi' fue parecido al de Richmond. Como cada tarde desde que la brutalidad policial acabara con la vida de George Floyd, en esta importante ciudad del este del país se concentraron cerca de un millar de manifestantes, que confluyeron ante una efigie de Colón que la comunidad italoamericana erigió en 1927. No había presencia policial en la zona cuando los participantes ataron cuerdas para echar abajo la obra. Después, le prendieron fuego y la hicieron rodar hasta un lago del parque, según informa el diario local 'Tichmond Times Dispatch'.

Acto seguido, la activista Chelsea Higgs-Wise se dirigió a la multitud y reivindicó la lucha de los pueblos indígenas y afroamericanos. "Tenemos que empezar por donde comenzó todo. Tenemos que comenzar con las personas que primero se asentaron en esta tierra", recoge sus palabras 'The Washington Post'. No fue la única que intervino, la cantante de ascendencia nativoamericana Vanessa Bolin explicó que no se trata de "secuestrar" las protestas contra la brutalidad policial, sino de solidarizarse con otros problemas raciales. Otro de los oradores, Joseph Rogers, declaró el área tierra Powhatan, en referencia a la tribu que dominaba el estado de Virginia durante los primeros encuentros con los ingleses.

Causa abierta contra Colón

Ya hace tiempo que Colón está en el punto de mira. Una imagen suya en el parque neoyorquino de Yonkers apareció sin cabeza en 2017, tras los disturbios racistas de Charlottesville. Pocos meses después, el colectivo People's Power se manifestó en Columbus Circle para pedir la retirada de la representación del marino que se exhibe en Central Park y, un tiempo más tarde, el monumento de la discordia sufrió pintadas con mensajes como "el odio no va a tolerarse" o "algo está a punto de pasar".

Bajo el mismo pretexto, el Ayuntamiento de Los Ángeles decidió retirar en noviembre de 2018 una estatua del explorador que llevaba 45 años en el Gran Parque de la urbe. Lo hizo en el marco de una moción aprobada un año antes para sustituir el antiguo Día del Descubrimiento —equivalente del Día de la Hispanidad al otro lado del Atlántico— por el Día de los Pueblos Indígenas.