Cómo una fábrica se convirtió en el mayor foco de contagio de coronavirus de EEUU

El coronavirus se ha convertido en la gran pandemia del siglo XXI. La gran facilidad de propagación que tiene esta nueva enfermedad ha provocado que cientos de países en todo el mundo hayan dictado órdenes de confinamiento para tratar de limitar los daños humanos. Sin embargo, en muchas ocasiones no se ha podido -o no se han sabido- establecer medidas que llegaran a tiempo de frenar el contagio... provocano extraños focos de propagación.

Eso es lo que ha ocurrido en Estados Unidos. Uno de los países más grandes del mundo, con una de las poblaciones más numerosas del planeta, era consciente de las elevadas cifras con las que contaría, por una simple cuestión de número de habitantes. Pero lo que nadie podía ni imaginar es que el mayor foco de contagio del coronavirus de todo el país se iba a concentrar en una fábrica de carne de cerdo de Dakota del Sur, precisamente uno de los estados, con menor densidad de población.

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EFE

Todo comenzó hace poco menos de un mes en la fábrica de Smithfield, una de las plantas de procesamiento de carne de cerdo más grande de Estados Unidos pues, no en vano, cuenta con un edificio de ocho alturas con más de 3.700 trabajadores. Y, como buena gran cadena de producción que podamos imaginar, los empleados ocupan puestos de trabajo a poco menos de 30 centímetros uno de otros. Un foco de contagio difícil de frenar, según explica 'BBC'.

El principal problema llegó en las últimas semanas de marzo. Fue entonces cuando se detectó el primer caso de coronavirus en la empresa, lo que dio lugar a que el trabajador en cuestión fuera enviado en casa, donde cumplió una cuarentena de 14 días. La empresa aseguró,a través de un comunicado, que había procedido a desinfectar las zonas en las que dicho empleado había estado, pero previamente podía haber estar en contacto con otras personas.

Pero, ¿por qué no cerró la fábrica ante la situación que se venía encima? Por un lado, según las órdenes dictadas por el gobierno de Donald Trump, esta enorme fábrica de carne no podía cerrar ni que sus trabajadores formaran parte del confinamiento, pues se encuentra dentro de la 'industria crítica' que debe seguir trabajando para abastecer al país. Y, además, Dakota del Sur es uno de los cinco estados que no han implementado medidas de cuarentena obligatorias. El caldo estaba listo.

El número de infectados por coronavirus pronto comenzó a crecer, hasta que el pasado 15 de abril, la fábrica de Smithfield decidió cerrar por la presión social ante la que se estaba encontrando. En esa fecha, el número asustaba: 644 casos confirmados entre empleados de la fábrica y personas contagiadas por ellas, suponiendo el 55% de los casos de todo el estado de Dakota del Sur. E, incluso, yendo mucho más allá: convirtíendose en el mayor foco de Covid-19 de EEUU.

Tal y como informa 'The New York Times', el número de infecciones generados por la planta cárnica supera incluso a los datos del barco naval USS Theodore Roosevelt y los de la cárcel de Cook County, en Chicago. Así es como una fábrica cárnica de Dakota del Sur se convirtió en el mayor foco de contagio de coronavirus de todo Estados Unidos, una empresa situada en un remoto paraje en el que el número de casos generados por sus empleados ya superan los seis centenares.