El compositor brasileño Moa do Katendé, asesinado tras discutir por las elecciones

El compositor y maestro de capoeira Romualdo Rosário da Costa, de 63 años ha fallecido este lunes víctima de un apuñalamiento en un bar después de haber mantenido una discusión sobre el resultado de las elecciones presidenciales en Brasil en las que ha resultado vencedor el ultraderechista Jair Bolsonaro, líder del Partido Social Liberal, con un 46% de los votos.

Según la Secretaría de Seguridad Pública del estado de Bahía, el agresor, identificado como Paulo Sérgio Ferreira de Santana, de 36 años, se acercó al grupo en el que se encontraba la víctima y empezó "una discusión política" con el compositor y maestro de capoeira Romualdo Rosário da Costa, más conocido por su nombre artístico, Moa do Katendê.

Moa do Katendê era considerado uno de los principales nombres del medio artístico de Bahía y varias de sus composiciones musicales fueron grabadas por aclamados artistas como el de Caetano Veloso y Clara Nunes, dos de los cantautores más expresivos de la música brasileña actual.

El asesino se decaró seguidor de Bolsonaro

En la denuncia registrada por la Policía brasileña, los testigos afirman que el agresor habría declarado su simpatía por el ultraderechista Jair Bolsonaro, vencedor de la primera vuelta de los comicios que tuvieron lugar el pasado domingo en el país, y empezó una calurosa discusión después de que el compositor y sus amigos declarasen su apoyo al candidato del Partido de los Trabajadores, Fernando Haddad.

"Tras la discusión, el autor de la agresión salió del establecimiento, fue por un arma blanca en su domicilio y regresó al bar", aclaró la Secretaría de Seguridad Pública en un comunicado en el que explican que el hombre apuñaló a Da Costa doce veces en la espalda e hirió en el brazo a uno sus parientes, quien también ha tenido que ser ingresado en un hospital de la región y cuyo estado de salud se desconoce por el momento.

La Policía Militarizada ha explicado cómo ha sido la detención del asesino. Al llegar al lugar de los hechos, los agentes detectaron un rastro de sangre que les condujo hasta la casa de Pablo Sergio Ferreira, a quien arrestaron de inmediato cuando "ya tenía preparada una mochila con ropas con el objetivo de darse a la fuga".