La denuncia de Puigdemont contra Llarena será juzgada por tres jueces en Bélgica

Que un juez español sea juzgado en Bélgica en relación a hechos sucedidos en España no es habitual. Y como tal lo ha reconocido el tribunal francófono belga que se hace cargo de la denuncia interpuesta por Carles Puigdemont contra el juez Pablo Llarena. El magistrado ha escuchado la petición de la defensa de Llarena: el proceso será juzgado por tres jueces, en lugar de uno. Los abogados del político catalán y sus ex consellers se han mostrado a favor también de ello, según ha podido saber El Confidencial.

Más difícil ha sido llegar a un acuerdo sobre los tiempos durante esta primera vista formal. La sala de tres jueces tendrá ahora que tomar una decisión sobre el calendario que se aplicará en el proceso. Según informa la agencia Efe, el Tribunal de Primera Instancia se ha dado seis semanas para decidir si es competente para juzgar el proceso. El abogado de Llarena, Hakim Bourlabah, lo niega y se agarra para ello a la inmunidad del magistrado español. Boularbah alega que la jurisprudencia belga no es la correcta para enmarcar estos hechos, acontecidos fuera del territorio de este país.

Por su parte, los abogados de los demandantes, entre los que se encuentran el belga Christophe Marchand y el argentino Gonzalo Boyé, defienden que Llarena sea condenado a indemnizarles con un euro simbólico por su supuesta falta de imparcialidad en unas declaraciones que han levantado toda una polvareda, por la imprecisión de la traducción al francés que en un principio presentaron junto a la demanda.

Una vez más, Llarena, juez del Tribunal Supremo, no se ha personado en Bruselas y ha dejado su defensa en manos de Bourlabah. El proceso llevará aún meses y por el momento se encuentra en sus fases más pre-eliminares, centrada en las cuestiones procedimentales. Pero el diablo se encuentra en los detalles y es precisamente en las cuestiones procedimentales -calendario, número de jueces, competencias- donde la defensa de Llarena pretende dar batalla.