El Gobierno llega a la UE pisando fuerte: “España está de vuelta”

Primer encuentro del Gobierno de Pedro Sánchez con sus homólogos europeos. Y llega pisando fuerte. La ministra de Transición Energética, Teresa Ribera, ha sido la encargada de estrenar la agenda europea del nuevo Ejecutivo, con una reunión de responsables europeos de Energía que se celebra hoy en Luxemburgo. A su llegada, Ribera ha querido marcar un antes y un después.

“El mensaje más importante (para sus socios) es que España está de vuelta”, ha asegurado Ribera a los medios de comunicación, antes del encuentro. “España es un actor fundamental de la Unión Europea y un actor progresista”, ha añadido la ministra, que ha anunciado que el país hace ahora un “cambio de posición” en materia energética.

“Dejamos de ser un lastre y nos alineamos con aquellos países que tienen una vocación de futuro”, ha asegurado Ribera. Más allá de las palabras, la nueva ministra -que ya ha dado muestras de su clara inclinación hacia una transición a energías más limpias que las tradicionales con la sola elección del nombre de su Ministerio- ha defendido adoptar posiciones más ambiciosas a escala europea en materias como los objetivos nacionales de energías renovables y eficiencia energética (35%, en ambos casos).

Ribera se ha mostrado también a favor de "prohibir que cualquier Estado introduzca cualquier dificultad al autoconsumo", en línea con su defensa del fin del peaje a las renovables que se aplica en España. La posición de la ministra española contrasta con las de varios de sus socios que, encabezados por Alemania, quieren lo contrario: extender las cargas impositivas a todas las instalaciones de autoconsumo a partir de 3 kilovatios de potencia (en España están exentos hasta los 10).

Saludo conciliador con su predecesor

Con dos besos la ha recibido el comisario europeo de Acción por el Clima y Energía, Miguel Arias Cañete, con el que Ribera tendrá ahora que gestionar varios expedientes abiertos a España por la inacción de anteriores gobiernos. Arias Cañete, que precedió en el cargo a Ribera, no ha llegado a escuchar sus promesas de renovación política y se ha mostrado prudente, a la par que conciliador.

“Yo me entiendo bien con todos los gobiernos de la UE”, ha zanjado el comisario, miembro del Partido Popular, sobre cómo encara las relaciones con el nuevo Ejecutivo tras la moción de censura que derrocó a Mariano Rajoy. De cara a las cuestiones abiertas a España, ha dicho que espera lo que “siempre espero con todos los gobiernos: no acudir al Tribunal de Justicia” de la Unión Europea porque el incumplimiento de normas europeas persevere.

Ribera, presente, ha mostrado su confianza en llegar a este acuerdo. Al fin y al cabo, según ha defendido la ministra a su llegada, con el nuevo gobierno "España va a dejar de arrastrar los pies". O eso promete.