Unos padres de EEUU demandan a su hijo de 30 años porque no se marcha de casa

Michael Rotondo no ayuda a pagar el alquiler de la vivienda familiar y no participa en las tareas domésticas. A sus 30 años, sus padres, Mark y Christina, han dicho basta y le han pedido que se vaya de casa. Hasta el punto de que han tenido que recurrir a los tribunales de Estados Unidos para lograr su deseo.

Todo comenzó el pasado 2 de febrero cuando la madre de Michael escribió una carta a su hijo en la que aparece una frase clara y directa: "Hemos decidido que debes abandonar esta casa de inmediato". El joven ignoró la misiva y siguió viviendo en la casa. Ante esto, los padres acudieron a su abogado, que les redactó un aviso de desalojo con fecha del 13 de febrero en el que le dieron un mes para que recogiera sus cosas y se marchara."Estás desalojado. Si no te vas antes del 15 marzo de 2018 se iniciará un procedimiento legal inmediatamente", decía este escrito.

Viendo que Michael Rotondo no tenía intención de mudarse y seguía haciendo normal en la vivienda familia, los padres le ofrecieron 1.100 dólares para ayudarle en la búsqueda de casa y le pidieron que buscara trabajo para poder costearse. "Hay trabajos disponibles incluso para aquellos con un historial de empleo tan pobre como el tuyo. Consigue uno. ¡Tienes que trabajar!", le escribieron en otra carta... que no obtuvo (de nuevo) respuesta.

Pide un plazo de 6 meses y el juez lo rechaza

Llegó el 30 de marzo y Michael seguía en casa. Desayunaba en la cocina, veía la tele en el salón y dormía en la misma habitación que en los últimos 30 años. Estaba claro que no tenía ninguna intención de marcharse de casa y cumplir con la petición de sus padres. Fue en este momento cuando Mark y Christina Rotondo decieron acudir a los tribunales. En abril fueron a la corte municipal local del estado de Nueva York para tratar de desalojar a su hijo, pero les dijeron que, al ser un familiar, debía de ser un juez de la Corte Supremo el que ordenara a Michael hacer las maletas y abandonar la vivienda familiar.

Y dicho y hecho. Los Rotondo llevaron el caso a la Corte Suprema del condado de Onondaga, cerca de Syracuse, en el estado de nueva York, el pasado 7 de mayo. En una audiencia celebrada este martes, el hijo del matrimonio argmentó ante el juez que necesitaba un plazo de seis meses para abandonar la casa y que sus padres no le notificaron que debía irse con la suficiente antelación. Pero el juez hizo caso omiso a este argumento, que lo calificó de "indignante", y pidió al abogado de la familia que redactara de forma inmediata una orden de desalojo.

Sin embargo, el proceso se prevé largo, ya que según publica este miércoles 'The New York Times', Michael recurrirá la decisión judicial. Y, mientras tanto, seguirá viviendo en la casa familiar. Sin ayudar a pagar los gastos y sin colaborar en las tareas del día a día.