El Estado Islámico reivindica el atentado de Barcelona

El Estado Islámico ha reivindicado este jueves el atentado de Barcelona, a través de su agencia de noticias Amaq, según informa el portal de seguimiento del yihadismo en las redes SITE Intel Group. "Soldados del Estado Islámico llevaron a cabo la operación" siguiendo órdenes del Califato contra "países de la Coalición" que combate a la organización en Siria e Irak.

Y aunque todavía no se ha confirmado la existencia de vínculos entre ninguna organización terrorista y los autores del atentado de Barcelona, los simpatizantes del movimiento yihadista se han apresurado a celebrarlo en las redes sociales. Tal y como han observado varios expertos antiterroristas que monitorizan sus canales en internet, las cuentas de Twitter de varios simpatizantes del Estado Islámico han aplaudido el ataque y compartido material gráfico e información sobre lo sucedido.

Rita Katz, directora de SITE, había indicado la tarde de este miércoles que las cuentas del ISIS celebran los atentados en Barcelona de forma similar a las postrimerías de la operación en Mánchester.

Katz ha indicado también que el atentado “se produce dos semanas después de que usuarios pro-ISIS amenazasen con reconquistar Al-Andalus y un ataque inminente. No está claro si están conectados”.

Lo mismo ha detectado Rukmini Callimachi, periodista del 'New York Times' que ha publicado numerosas exclusivas sobre el movimiento yihadista 'online' (entre otras cosas, logró averiguar la identidad real del tristemente célebre 'Jihadi John', responsable de la decapitación de varios occidentales). Callimachi ha percibido comentarios y vídeos referidos al accidente en cuentas de conocidos radicales de varias nacionalidades, y señala que “este es el primer atentado terrorista [yihadista] exitoso en España desde las bombas de los trenes de Madrid en 2004”.

El entusiasmo de los miembros del movimiento no es extraño. Tanto Al Qaeda como el Estado Islámico llevan varios años tratando de animar a sus partidarios e individuos autorradicalizados a que planifiquen y cometan atentados por su cuenta en territorio 'enemigo'. Tanto 'Inspire', la revista oficial de Al Qaeda en la Península Arábiga, como 'Dabiq' y su sucesora, 'Rumiyah', las publicaciones del ISIS, han instado repetidamente a la 'yihad en casa'.

El último número de 'Inspire', por ejemplo, incluye un detallado manual para hacer descarrilar trenes, y ejemplares anteriores han ensalzado las virtudes de los atropellos con vehículos convencionales. Por su parte, el fallecido portavoz del ISIS Abu Mohamed al Adnani hizo en 2014 un llamamiento a matar occidentales allá donde pudiese encontrárselos. “Machaca su cabeza con una roca, o descuartízale con un cuchillo, o pásale por encima con tu coche, o arrójale desde un lugar elevado, o estrangúlale, o envenénale”, dijo, una petición que el grupo no ha dejado de repetir desde entonces. En el número 3 de 'Rumiyah', el ISIS recomienda el uso de camiones y vehículos grandes, puesto que "son fáciles de adquirir" y son "uno de los métodos de ataque más letales y más exitosos a la hora de 'recolectar' gran número de 'kuffar' [infieles]".

Desde los terribles sucesos de Niza del verano pasado, se han producido otros seis atentados con vehículos en Europa durante el último año. En diciembre, el tunecino Anis Amri empotró un camión contra un mercadillo navideño en Berlín, matando a 12 personas e hiriendo a otras 48. Tres meses después, el musulmán converso Khalid Masood atropelló a decenas de personas en el puente de Westminster antes de estrellarse y atacar con un cuchillo a la policía, que acabó con su vida: el balance final fue de cinco víctimas mortales. El 7 de abril, otro atentado con un camión en Estocolmo dejó cuatro muertos y 15 heridos.

En junio, tres militantes yihadistas repetían 'modus operandi' en Londres, arrollando a los transeúntes en London Bridge y posteriormente atacando con cuchillos a cualquiera que se cruzase en su camino. Acabaron con la vida de ocho personas, entre ellas la del español Ignacio Echeverría. Pocos días después, en aparente venganza, un hombre atropelló a los musulmanes que salían de una mezquita en la capital británica, matando a uno de ellos e hiriendo a otros nueve. Ese mismo día, un sospechoso de radicalismo estrelló su vehículo contra un furgón policial en los Campos Elíseos de París, sin provocar víctimas. En el interior del coche se encontraron armas y explosivos.