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El 'espejismo' de Trump en las encuestas se desvanece
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TRAS LA REMONTADA QUE MOSTRABAN LOS SONDEOS

El 'espejismo' de Trump en las encuestas se desvanece

El efecto de la convención demócrata, las metidas de patas del candidato republicano y la división interna en su partido han hundido al polémico empresario en los sondeos

Foto: Donald Trump en un mitin en Green Bay, Wisconsin. (Reuters)
Donald Trump en un mitin en Green Bay, Wisconsin. (Reuters)

Las salidas de tono de Donald Trump, el candidato del Partido Republicano a la presidencia de Estados Unidos, le empiezan a pasar factura. Sus ataques a los padres de un soldado musulmán muerto en Irak, la expulsión de un mitin de una madre y un bebé que lloraba tras afirmar que adoraba a los niños sumado a la saturación del público por su constante presencia en los medios de comunicación y la crisis interna abierta en el Partido Republicano tras la Convención Nacional Republicana comienza a notarse en el apoyo del electorado.

Las mismas encuestas que hace una semana apuntaban a una remontada del magnate de Nueva York y a un empate técnico con la candidata demócrata Hillary Clinton, ahora muestran como Clinton supera a Trump en casi 7 puntos, según el agregador de encuestas 'RealClear Politics'.

Las convenciones de los partidos producen habitualmente un rebote en las encuestas de opinión y la mejora de Clinton se puede explicar parcialmente por el reciente congreso demócrata, según la web de análisis político de 'FiveThirtyEight', que se produjo una semana después de la convención republicana.

El pánico en el Partido Republicano tras una semana desastrosa ha disparado las especulaciones, que van desde la renuncia de Trump a un cambio radical de la campaña electoral. La división del partido es tal que algunos políticos republicanos y de los tradicionales donantes del partido han pedido el voto a su rival demócrata para impedir el ascenso al poder de Donald Trump.

Las expectativas electorales son tan malas que algunos analistas plantean la posibilidad de que Clinton arrase y gane en algunos de los tradicionales estados republicanos.

Las salidas de tono de Donald Trump, el candidato del Partido Republicano a la presidencia de Estados Unidos, le empiezan a pasar factura. Sus ataques a los padres de un soldado musulmán muerto en Irak, la expulsión de un mitin de una madre y un bebé que lloraba tras afirmar que adoraba a los niños sumado a la saturación del público por su constante presencia en los medios de comunicación y la crisis interna abierta en el Partido Republicano tras la Convención Nacional Republicana comienza a notarse en el apoyo del electorado.

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