Un cumpleaños de un millón de dólares en un país devastado por el hambre

El presidente de Zimbabue, Robert Mugabe, ha celebrado este sábado su 92 cumpleaños con una fiesta valorada en cerca de un millón de dólares (914.000 euros) en una de las zonas más afectadas por las devastadoras sequías que vive el país. En la región de Masvingo, lugar de la fiesta, el 75 por ciento de las cosechas han sido destruidas por la sequía, el golpe más duro desde la escasez de agua registrada durante los noventa.

"El dinero que se está presupuestando para esta fiesta de cumpleaños debería emplearse para importar maíz y evitar la hambruna en Masvingo y otras áreas del país", ha aseverado Obert Gutu, portavoz del principal grupo opositor, Movimiento por el Cambio Democrático (MCD).

Mugabe por su parte ha declarado que nadie padecerá hambruna por las sequías, que ya han afectado a cerca de tres millones de personas y han obligado a declarar varias zonas rurales como áreas de desastre, además de afirmar que no pedirá ayuda a Occidente para hacer frente a sus efectos.

"Si nos dan ayuda bajo la condición de que debemos aceptar el principio del matrimonio gay, entonces es mejor dejar esa ayuda donde está", ha aseverado Mugabe en un discurso de una hora de duración. "Los británicos y los estadounidenses, de la manera ladina de siempre, han utilizado esta situación para ofrecer grandes sumas de dinero a personas concretas dentro y fuera del partido para causar la disensión", ha señalado.

"No la queremos, si es una ayuda podrida, sucia, no queremos tener nada que ver con ella", ha añadido a pesar de que Zimbabue ya ha pedido más de un 1.500 millones de dólares (1.463 millones de euros) para poder adquirir grano y otros alimentos, peticiones que ninguna organización humanitaria ha cumplido hasta la fecha.

El presidente de Zimbabue es el líder más longevo del continente africano y ha agradecido durante las celebraciones de su cumpleaños a la rama más joven de su partido, Unión Nacional Africana de Zimbabue-Frente Patriótico (ZANU-PF), por organizarle una fiesta donde se han soltado 92 globos, leído poesía, cantos y alabanzas al propio Mugabe y donde han estado presentes niños en edad escolar, diplomáticos extranjeros, ministros del Gobierno y jefes de las fuerzas de seguridad.