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Una Merkel 'de hierro' hace llorar a una niña palestina: "A veces la política es dura"
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intentó animarla: "has hecho un buen trabajo"

Una Merkel 'de hierro' hace llorar a una niña palestina: "A veces la política es dura"

Reem, como así se llama la joven, tiene que abandonar Alemania porque a su padre se le acabó el contrato laboral. La canciller no aflojó su gesto ante la dramática situación

Foto: Angela Merkel intenta animar a una desconsolada niña (NDR/Aktuell)
Angela Merkel intenta animar a una desconsolada niña (NDR/Aktuell)

Angela Merkel ha sido la última política a quien un menor de edad pone en aprietos delante de la prensa. Después de que hace algunos días Nicolás Maduro recibiera las críticas de una niña que afirmaba no tener techo en su escuela –“No puede ser”, se sorprendió el presidente de Venezuela–, la canciller alemana fue interpelada por una joven palestina que debía abandonar el país germano porque a su padre se le había terminado el contrato laboral.

“Es muy duro ver que otras personas pueden disfrutar de sus vidas y tú no puedes hacerlo con ellas”, sentenció la pequeña Reem frente a Merkel en relación a los estudios que debía abandonar. Sus palabras fueron recogidas durante un encuentro con escolares celebrado el pasado miércoles, donde la niña –que harecibido escolarización durante los últimos cuatro años de su vida en el colegio Paul Friedrich Scheel de Rostock– expuso su situación.

En un perfecto alemán, la joven continuó su alegato afirmando que tenía “metas, como todos los demás”, pero que no podría llevarlas a cabo al ser deportada junto a su familia por cumplir con la normativa que impide a inmigrantes permanecer en Alemania sin contrato laboral. “Lo entiendo, pero a veces la política es dura”, contestó Merkel ante el discurso de Reem.

Lo que en principio era un inocente encuentro con estudiantes se convirtió entonces en una plataforma de alegatos referidos a la política exterior alemana. “Sabes que en los campos de refugiados palestinos en Líbano hay miles y miles [de personas]. Si ahora decimos 'todos podéis venir, venid todos desde África', no podríamos sostener la situación”, afirmó la canciller alemana frente la atenta mirada de la niña.

Su exposición quedó interrumpida cuando Merkel se percató de que Reem estallaba en llanto. En ese momento, la canciller se acercó a ella para posar su brazo en el hombro de la joven en un intento por animarla. Sin embargo, la niña encontró poco consuelo a pesar de las palabras que la dirigente le dedicó en relación a su esfuerzo durante la etapa escolar: “Has hecho un buen trabajo”. El moderador del encuentro manifestó su opinión al decir que no consideraba que estuvieran tratando el tesón de la menor, sino una situación muy difícil.

“Ya sé que es una situación muy difícil”, dijo Angela Merkel volviéndose sobre su espalda para mirar directamente al presentador. “Por eso quiero consolarla, porque no queremos que esteis en estas situación y porque estais pasando una racha mala, porque tú has demostrado a mucha gente que se puede poner fin a situaciones”, terminó la política dirigiéndose a Reem de nuevo mientras sus compañeros le tocaban la espalda en señal de apoyo y le daban un pañuelo para que secara sus lágrimas.

Angela Merkel ha sido la última política a quien un menor de edad pone en aprietos delante de la prensa. Después de que hace algunos días Nicolás Maduro recibiera las críticas de una niña que afirmaba no tener techo en su escuela –“No puede ser”, se sorprendió el presidente de Venezuela–, la canciller alemana fue interpelada por una joven palestina que debía abandonar el país germano porque a su padre se le había terminado el contrato laboral.

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